La guerra de los Black

Capítulo 14: Los Black

Harry se levantó en la tarde y no vio a Draco en la habitación, en cambio vio una túnica verde y una nota.

"Báñate que apestas y baja a cenar

Si para cuando sirvan no has bajado

mandaré a un elfo a gritarte al oído"

Harry se metió a la ducha, procurando no demorarse, salió y se colocó la túnica que le habían dejado. Bajó las escaleras y fue hasta el comedor, conocía medianamente la mansión, por los bailes de navidad.

A cualquiera le hubiera parecido terrorífico que Harry llegara a una sala casi en las tinieblas, y un chico sentado, con sus cabellos platinos reflejando la luz de las velas, lo invitara a sentarse a la otra cabecera de un largo comedor solitario, lleno de los más exquisitos platillos, pero para los chicos que tenían padres ricos a los que no les interesaba sentarse cerca, era normal.

— No es Greengrass.

— Solo porque este de lado de...

— No es eso, es que yo conozco a Daphne, además llegue a una teoría más interesante...

— Te escucho

— La chica es solo una herramienta, la están utilizando.

— Si eso es cierto, podría ser cualquiera...

— No cualquiera, todavía tenemos pistas, tiene que ser alguien cercano a los Black, sin miedo de hacer magia negra y con acceso al collar...

— Tal vez no alguien cercano a los Black... sino un Black

Draco paró de comer de repente, estuvo quieto unos segundos y luego levantó la mirada hacia Harry.

— ¿No te parece que este comedor es muy grande? — Draco

— Sí, tengo suficiente con que mis padres no quieran acercarse a mí mientras comen...

— ¿Verdad? No es como si fueran a venir cincuenta invitados de sorpresa...

— Sí, es estúpido

— ¿Quieres ir a la sala?

— Sí, por favor.

Harry y Draco fueron a la sala levitando sus platillos favoritos y se sentaron en el mismo sofá, frente a la chimenea.

— Así está mejor.

— Ya lo creo, ahora sigue contando tu idea, porque lo preocupante es que tiene sentido.

— Todo está relacionado, demasiadas coincidencias, y todo apunta al círculo cercano de los Black, ambos lados de nuestra familia tenían acceso a la información...

— Puede ser un Black, es cierto, pero para descubrir quiénes son sospechosos necesitamos saber el efecto de las flores. Si su intención era que nos volviéramos amigos ahí encerrados, eso descartaría a nuestros padres, pero no totalmente al resto...

— Tienes que pedirle a Snape que las analice...

— Ya lo hice, pero dijo que es un proceso largo y que lo sabría probablemente unas semanas antes de que entremos...

Draco se levantó, abrió la vitrina y se sirvió una copa de Whisky de fuego.

— ¿Vas a tomar un poco?

— No debería y tú tampoco

Draco rio.

— Tú no deberías, yo cumplí diecisiete hace un mes.

Harry hizo un puchero y lo miró resentido. Draco se rio de su cara.

— En fin, ahora solo queda esperar... qué pesadilla.

— No tiene por qué serlo, tienes una mansión gigante, ¿por qué no jugamos al quidditch un rato?

— ¿Solo los dos?

— Soltemos la Snitch — Dijo Harry con una sonrisa traviesa

— Te gusta humillarte solito, ¿verdad, Potter?

— Eso te diré yo cuando te deje mordiendo polvo.