YUQI
-Oh Jeon, también estas aquí- Gracias a Satán Yves vino a mi rescate, consiguiendo que finalmente la mirada de Soyeon se quitará de mi rostro -Es raro que nos encontremos todas aquí- No sé si eran cosas mías pero ya parecía alcoholizada, o por lo menos ya debía de tener un par de tragos encima. Actuaba mucho más relajada y amigable, ya se parecía a Soojin cuando estaba drogada.
-Pensé que eras un lobo solitario en el instituto- Soojin me atrajó nuevamente a su cuerpo, abrazándome por la espalda mientras reposaba su rostro sobre mi hombro. ¿Ya esta borracha? Olía a alcohol, pero no creía que fuera suficiente como para ya tenerla intoxicada -Y ahora resulta que me cambias por otra.
-Ya te dije que te lo compensare después- Solté una pequeña risa al sentir como su aliento entraba en contacto con mi piel, dándome cosquillas -Es más, ¿Qué era que querías?
-Necesito una casa donde quedarme por unos días- Fruncí suavemente el ceño, intenté girarme para mirarla a los ojos, pero ella me mantuvo en mi lugar -Ya sabes, problemas familiares.
-¿Estás bien?
-Sí, solo necesito donde quedarme.
-Ni siquiera deberías preguntar, sabes que puedes quedarte el tiempo que quieras.
-¿De qué tanto hablan ustedes dos?- Shuhua no tardó en acercarse hasta donde estábamos y mirarnos con curiosidad -¿Son pareja?
-N-no…- Nuevamente sentí una mirada prácticamente asesinándome, y como la cobarde que soy, no tuve el valor suficiente para afrontarla.
-¿Hacemos una bonita pareja no?- Las manos que estaban sobre mi abdomen me apretaron un poco más contra el cuerpo de Soojin, y no era por ser pervertida pero podía sentir perfectamente como sus senos hacían presión en mi espalda -Le he dicho varias veces que seríamos una pareja muy feliz pero ella se fresea- Intenté defenderme pero cuando abrí la boca, ella llevó el vaso que tenía en una de sus manos hasta mis labios, haciéndome ingerir gran parte del contenido -Vas a tener que recompensarme por haberme rechazado- Susurró en mi oído.
-Hey, Hey, esa cercanía no me gusta, no me la ultrajes- Shuhua intentó alejarme del cuerpo de Soojin, pero la mayor se negó completamente a hacerlo.
-¿Por qué debería soltarla? Esta noche es mía- Me hace muy feliz que se “peleen” por mi pero puedo sentir como algo nos está matando en estos momentos.
¿Y qué más da? Que se enoje. Ella misma dijo que las cosas no irían más allá y que deberían dejar las cosas hasta donde habíamos llegado. Es un buen punto, no debería tenerle miedo. Disfruta porque estas rodeada de mujeres hermosas, esto no pasa todos los días.
Bien, creo que a nadie le haré daño si dejo por un rato a la vista mi verdadero yo.
-Sabía que solo querías emborracharme para aprovecharte de mí- Empecé por arrebatarle el vaso a Soojin, dándole nuevamente un enorme trago -Pero por esta noche no me voy a quejar si sigues teniendo la misma intención.
-Oh. Oh. Por fin estas sacando tus garras- Las manos de Soojin siguieron posadas en mi abdomen, y aunque no pudiera verla, sabía que tenía una sonrisa divertida en el rostro -Me gusta.
-Sabía que no eras solo un cachorrito asustado- Shuhua se unió a las “burlas” mientras alzaba ligeramente una ceja -Ahora debo averiguar cuál de las dos me gusta más.
-Tengo para todos los gustos- Le guiñe un ojo, escuchándola reír por mi comentario.
-Entonces… ¿Vamos a divertirnos?- No sé en qué momento, pero Miyeon regreso con una botella de lo que parecía ser Vodka y empezó a servirnos shots para todas -Por cierto, a mí también me gusta que seas así- Me dio uno de aquellos pequeños vasitos y sonrió en grande.