¡Osorio, Dame un hijo!

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Joaquín miro a su abuela la cual sonreía al alfa al lado suyo era una alfa tierna pero a la vez sería.

—Eres un alfa muy apuesto Emilio. —hablo la mujer de avanzada edad la cual sonrojo al pálido.

—Abuela. —hablo el omega.

—Son destinados y eso nadie lo puede cambiar además se ve el amor que se tienen. —dijo. —tu no te preocupes por tu padre.

La pareja sonrió mientras el alfa abrazaba al omega con intenciones de nunca alejarse. La mujer salió junto con la pareja luego de hablar los demás al verlos no dijeron nada.

—Ellos se van a casar y van a estar juntos como la pareja destinada que son. —hablo la mujer. —Jaemin Joaquín ya va a cumplir veinticuatro.

—Mamá ese no es el alfa que quiero para mi hijo. —la vio. —es un Osorio.

—Se muy bien de donde viene su alfa. —miro al pálido. —y se que el lo va a cuidar lo e notado desde hace mucho. —regreso su vista a su hijo. —además esta la marca espiritual y si sus lobos la hicieron mientras se apareaban hay más probabilidad que Joaquín este en estado.

Joaquín al escuchar eso miro a su alfa el cual miraba su vientre ¿había una posibilidad de estar embarazado? El castaño tomó la mano del alfa y se acercó a sus padres los cuales lo vieron.

—Papá. —se dirigió al omega. —si estuviera en estado. —bajo la mirada. —¿serias capaz de alejar a tu nieto de su otro padre?

—Señor Bondoni. —hablo el alfa mientras soltaba al omega. —yo amo mucho a su hijo. —se inclinó para quedar de rodillas frente a los padres de su pareja. —consedanme el honor de que Joaquín forme parte de mi vida y de las siguientes.

Todos vieron como el alfa estaba de rodillas pidiendo la mano del omega todos estaban sorprendidos pues el pálido pelinegro se estaba humillando para poder estar con su otra mitad.

—Emilio basta. —hablo Joaquín. —no debes de hacer esto yo me quedaré contigo con o sin el permiso de ellos.

—Señores Bondoni por favor. —dijo el alfa.

Joaquín intentaba levantar al pálido no quería que siguiera humillandose de esa manera, sus lágrimas comenzaron a resbalar por sus mejillas mientras lloraba pero un mareo hizo que el alfa reaccionara rápido y lo tomara en brazos antes de que golpeara el suelo.

—Joaquín. —le hablo Emilio. —cariño despierta.

Los padres del alfa se acercaron para ayudar a su hijo a recortar al omega en la cama, llamaron a un doctor el cual no tardo en llegar. Emilio se quedó todo el tiempo junto con su omega, al terminar de revisarlo vio a todos los presentes.

—¿Quien es su alfa? —pregunto viendo a todos los jóvenes adultos.

—Soy yo. —hablo el pelinegro. —¿el esta bien?

—¿Ustedes dejaron que sus lobos se emparejarán? —pregunto.

—Si ellos se conocieron hace como un mes. —respondió. —¿por qué la pregunta?

—Sus lobos al aparearse hicieron una marca. —hablo el beta. —y también un nudo.

—¿Que trata de decir? —hablo el padre del omega.

—Los embarazos creados por los lobos tardan más tiempo en desarrollase. —respondió el doctor.

—¿Embarazo? —susurro el pelinegro.

—Felicidades joven Osorio. —palmeo el hombro del alfa. —su omega tiene tres semanas de embarazo.

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