Hwang Hyunjin recibe un mensaje de un número desconocido pidiéndole ayuda ¿Tendrá que ver con lo que ocurre en la ciudad o es solo una broma?
Desapariciones, secuestros, adolescentes muertos, todo comenzó hace 10 años y cada vez son más frecuentes e...
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—Y... —Comenzó Changbin mirándonos a todos— ¿Quien irá a hablar con ese tal Sky? Es que tengo miedo. No puedo evitar creer que es una trampa.
—La verdad no creo que sea una trampa... De todos modos debemos tener precauciones —Dijo Minho mientras ponía una de sus manos en su barbilla— El problema es que Chris y yo no podremos ir. En la puerta ya nos conocen.
De repente el recuerdo vino a mi mente.
"—Chris ten cuidado, nos van a descubrir —Susurraba Minho a mi lado.
—Solo haz silencio y no nos descubrirán.
—Chris esto es muy arriesgado y va contra la ley.
—Lo que ellos hacen también va contra la ley.
—¡PERO NOSOTROS SOMOS LA LEY!
Tapé la boca de Minho con una de mis manos mientras veía a todos lados esperando que no nos hubieran escuchado.
Les pongo en contexto.
Conseguí la orden para revisar el club, logramos entrar, pero no vimos nada sospechoso, no logramos encontrar nada... Pero, como sabía que había algo raro en ese lugar, arrastré a Minho hasta el jardín trasero de la casa al lado del club, justo como el día de nuestra cit... digo, nuestra reunión para discutir temas de la investigación... Si, eso... Bueno, lo arrastré a ese jardín y ahora estábamos intentando lograr que yo subiera a la pared para pasarme al otro lado y así intentar investigar un poco más.
—Chris, esto no me gusta para nada.
—Ten fe.
—No tendré fe, bájate de ahí antes de que alguien te vea.
Había logrado subirme a la pared, solo faltaba pasarme al otro lado, registrar lo que pudiera parecerme sospechoso y volver a reunirme con Minho... Si no hubiera sido por un pequeño detalle.
—¡Hey oficial, no puede hacer esas cosas! —Dijo alguien que salía del club por la puerta trasera.
Noté que tenía un arma pero la estaba "escondiendo" detrás de su espalda.
Miré a Minho y este estaba pálido, mirándome del otro lado de la pared preocupado por mi, ya que a él no lo veían gracias a el gran muro.
Coloqué mi mano sobre la funda de mi arma reglamentaria lo más disimulado posible y volteé a mirar al hombre que cada vez se acercaba más a mi.
—¿Quien dice que no puedo hacerlo? Búscame la constitución y muéstrame si estoy en lo incorrecto.
Obviamente que no podía hacer esto, pero estaba desesperado.
Intenté ganar tiempo mientras buscaba una manera de escaparme de esta, pero justo en ese momento salieron 4 hombres más del local.
Sus uniformes decían ser de seguridad, pero dudo que el personal de seguridad normalmente tenga tantas armas.