1.columpiarse 2.ensuciarse y rasparse las rodillas

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-¡Midoriya! Juguemos videojuegos-Kirishima y Sero le llaman pero no les hace caso y corre apurado hacia las habitaciones.

-será luego chicos, lo siento-logra decirles antes de seguir corriendo apurado.

Había instalado el columpio en el lugar menos húmedo que encontró, pues afuera aún llovía a cantaros.
Y por algún milagro del cielo, había conseguido que Katcchan lo cuidara mientras él iba por Todoroki.

No le preocupaba que le pasara algo al columpio, sabía que con Katcchan a su cargo nadie se acercaría a él, bueno quizás Kirishima y Kamirari fueran la excepción, pero Bakugō los mandaría volando.

Lo que le preocupaba era que Katcchan se aburriera o arrepintiera y dejara desamparado el columpio.

-¡Todoroki-kun!-toca la puerta antes de entrar.
El bicolor se sientan de golpe en la cama aun medio dormido asustado por el fuerte golpe de la puerta.

-rápido no tenemos mucho tiempo-lo jala para que se pare de la cama.
-¿qué pasa? ¿atacan los villanos?-se levanta alterado pero no le da tiempo cuando Izuku ya lo jala por los pasillos descalzo.

-nada de eso-niega corriendo esquivando a todos los que se le atraviesan-ya tengo una respuesta a tu pregunta.

-oh

Es todo lo que suelta Todoroki y deja ser arrastrado por el peliverde hasta donde sea que lo lleve.

Esperaba que fuera rápido para volver a su cama y dormir.

-espera-se detiene para ponerse unas pantuflas.

Mira al pecoso moverse ansioso en su lugar y se pregunta qué tendrá tan alterado a su amigo.

-¿Bakugō te persigue de nuevo?

-algo así
Ríe nervioso, pero pronto deja eso de lado jalando de nuevo al bicolor.

-afuera está lloviendo Midoriya-se resiste, no quiere salir al frío.

-si si, lo sé pero no nos mojaremos.

Lo jala y corre por todo el pasillo de afuera hasta llegar a la parte trasera de los dormitorios.

-¡Deku de mierda! Tardaste mucho-bakugō lo ve enojado.

-muchas gracias Katcchan-se inclina agradeciendo-lo siento mucho ya estoy aquí.

-¡cállate! Tengo los pies mojados...

Empiezan una pequeña pelea, pero los ignora cuando nota el objeto que cuelga de un tubo del techo.
Se mueve con el aire frío y el asiento es color rojo.

-Midoriya-le llama y el rubio junto con el pecoso dejan de pelear-¿que es esto?

Midoriya deja de lado los gritos de Katcchan y se acerca nervioso rascando su nuca.
-pensé...-toma una cadena del columpio-porque contestar yo tu pregunta, si puedes hacerlo tú.

-¡que ñoñería están planeando ustedes dos!
Bakugō se acerca toma el columpio y lo sacude brusco-¿para que mitad y mitad quiere un maldito columpio? Ya no estamos en edad para columpiarnos, entren de una maldita vez que hace frío.

-nadie te tiene aquí Bakugō, puedes irte.

Le ofrece sin la intención de sonar grosero, pero no es bueno con las palabras y Midoriya le a dicho que a veces es demasiado directo.

-¡a mi nadie me dice que hacer maldito mitad y mitad!

-ah-es todo lo que le dice y se voltea a donde Izuku, Bakugō solo se enoja mas.

17 Cosas que Shoto no hizo en su infancia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora