Mio

Quince. Pero con una condición

Elisa Kennedy

La noche apenas esta comenzando, siento como el ambiente invade mis pensamientos, en como Dalit come con cierta lentitud , como si tuviera algo en su cabeza , algo lo tiene mas preocupado que emocionado por cierta triunfo que logro.

Es más fuerte su emoción insuficiente, después de darle tres bocados a mi plato , siento que es suficiente , con el simple hecho que Dalit esté aquí , me siento un poco cómoda.

-no sé porque, la emoción de vacíos es mas fuerte que la de felicidad – exclama con un suspiro, se toma del cuello donde saca una cadenita y tiene el anillo colgado

-ya te diste cuenta- en eso me mira confundido

-¿Qué trata de decir? – me mira inexpresivo

-cuando paso algo con la señorita Ainara, le estas dando mucho prioridad a tu emoción lo alimentas más , tú mismo te saboteas , tratas de dejarlo ir , pero no lo haces – digo tranquilamente , tomo mi copa y le doy un trago – no te dejas ser feliz

Se queda congelado sin expresión, esta avergonzado , sus palabras que me dijo se van a la basura

-no tienes nada que decir – pregunto , pero el niega con la cabeza

Es un tonto si sigue creyendo que Ainara volverá , no lo hará , he visto mucho de ella que puedo afirmar que lo hará

-perdón por ser tan directa , pero eres muy estúpido para seguir creyendo que regresara – digo en frio

-estúpido – susurra, pone sus manos en su cabeza, en eso me mira fijamente – y que, si lo soy , no me puedes entender – recalca , miro que hace un puño con sus manos , su voz se vuelve ronca – La quiero con todo mi corazón

-bien sabes que te estas mintiendo tu mismo, por creer que ella te ama, pero no es así, piénsalo – digo con un suspiro, su expresión vuelve fría

quisiera decirle lo que pienso, pero debo tolerar su sufrimiento, debo tener la paciencia para el , vuelvo a mirarlo sin esperar nada

-ya te dije , no lo entiendes , además no es tu asunto – exclama en voz alta

Vuelve a repetir las mismas palabras, me da un coraje

enserio , sabes que no te merece, es una zorra, sigues cayendo, tú eres el estúpido aquí – pienso

como quisiera decírtelo en la cara , como quisiera pedirte explicaciones , pero no , solo debo estar tranquila , como me encantaría insultarte a la zorra que no te merece ni un poquito , pero le das tan prioridad , pero lamentablemente , solo puedo guardarme mis contestaciones en mi cabeza.

-no quiero escuchar mas , puedes irte , creo que no fue buena idea hacer esto – dice en voz baja

Yo no digo nada mas , solo tomo mis cosas , le echo una ultima mirada a Dalit , esta en un trance que no sabe salirse , lo primero que debo enseñarte es que te olvides de ella.

En ese momento que salgo del bar , siento como el frio cala por todo mi cuerpo , pero eso no me importa , sigo caminando entre esos edificios grandes , la gente camina por dirección opuestas , puedo mirar hasta aburrirme. Siempre eh hecho eso.

Desde que me aleje de todos, mataba el tiempo mirando , que hacían los simples humanos , unos escurrían de prisa, otros morían de preocupaciones y otros corrían por su felicidad.

Yo solo quería ver, no tenia ni un objetivo, realmente nunca lo tuve, no tenia prisa, el tiempo es el que me sobraba, en ese momento escucho que suena mi teléfono. Miro el mensaje