Lily Evans miraba el periódico, su pelo rojo apagado y sin vida, incluso el sol que entraba en la sala de desayunos de la sala de seguridad de San Mungo, ni siquiera el sol podía darle brillo. Hacía años que no se lo cortaba, siempre lo había tenido largo pero ahora era ridículamente largo. Hoy por fin se le había concedido la libertad y esperaba que James viniera a buscarla. Sólo había salido tres veces en régimen de libertad diurna, con supervisión en los nueve años que habían pasado. La graduación y la boda de su hija, así como la boda de su hijo con Susan Bones. Decir que su familia no era lo que ella había soñado sería decir poco. Siempre había imaginado que su hijo se casaría con Ginny Weasley, una compañera de Gryffindor y miembro de la Orden, y a su hija la había imaginado casándose con la familia Longbottom. Fomentando el nombre y las conexiones de los Potter, asegurándose de que todo el mundo supiera que era lo más ligero posible. Los Longbottom eran las conexiones; los Weasley, aunque no tenían comodidades económicas, eran todos trabajadores y antioscuros. Odiaba a Susan Bones, la había interrumpido cada vez que intentaba hablar con su hijo en su boda, había sido la primera vez que lo veía en años y no podía dejarlos hablar... No lo había visto a él ni a la familia desde entonces, James le traía fotos de sus nietos cuando la visitaba pero eso era todo.
-¿Lily?- llamó una de las Medibrujas, dándole una pequeña sonrisa como lo hacía con todos los pacientes, era una de lástima mezclada con alguien que era genuinamente de buen carácter como para preocuparse por los que estaban dentro del hospital de San Mungo. -James está aquí, ya es la hora- tenía una bolsa con sus pertenencias en una bolsa de plástico transparente.
Lily echó una última mirada a la ventana, antes de levantarse y seguir a Janine fuera de la habitación; llevaba tanto tiempo aquí que casi le aterraba moverse sabiendo que se iba. Al mismo tiempo no quería quedarse, quería recuperar a su familia, quería ver realmente a sus nietos y no sólo fotos de ellos, ayudar a criarlos como había criado a sus hijos.
Caminaron por los pasillos en silencio, al poco tiempo llegaron a la sala familiar donde James estaba esperando. James cogió la bolsa de Janine, dedicándole una sonrisa de agradecimiento y una inclinación de cabeza.
-¿Has venido solo?- Preguntó Lily tímidamente, a veces no sabía qué iba a hacer estallar a James por lo que tendía a preguntar las cosas con incertidumbre. Sin reaccionar a que la medibruja cerrara la puerta para darles privacidad aún miraba suplicante a James.
-Sí, sí, lo hice-, contestó James, con el pelo afeitado más corto de lo normal y vestido para impresionar. -Tenemos que irnos, tengo una... reunión a la que asistir-, añadió mintiendo ligeramente, había quedado con su encantadora novia que esperaba que se convirtiera en su prometida, aunque ahora mismo estaba algo molesta con él. Había comprado una casita de un dormitorio para Lily en Hogsmeade y ella actuaba como si la hubiera traicionado. Había muchas cosas que podía ser, pero un tramposo no era una de ellas. No quería que Lily viviera con él, pero no podía, en conciencia, dejarla sin hogar. Se sentía culpable de su estado mental, si él mismo no hubiera estado tan cegado podría haberle conseguido ayuda cuando Voldemort atacó, evitando todo este dolor.
-¿Dónde están Nick y Roxy- Preguntó Lily cuando James abrió la puerta y comenzaron a caminar el resto del camino de salida del hospital ahora que habían pasado el ala de seguridad.
-En el trabajo-, explicó James, Nick era ahora un inventor, acababa de crear la escoba más nueva del mercado, y le iba muy bien, mejor que la Nimbus. Roxy trabajaba en el flamante departamento del Ministerio de Magia, que había sido creado con el único propósito de mantener a los niños a salvo, su contraparte en el mundo muggle se llamaba servicios sociales, habían intentado llamarlo servicios Peverell pero Harry los había rechazado de plano, el hecho de que hubiera trabajado duro para poner en marcha el departamento no significaba que quisiera que llevara su nombre. Ahora mismo había una reunión en el Wizengamot para decidir el nombre, pero no estaba seguro de si Harry estaba allí o no.
ESTÁS LEYENDO
INVISIBLE
FanficEn esa fiel noche de Halloween, Nick Potter fue aclamado como 'Niño que vivió', su gemelo Harry fue ignorado en favor del hijo famoso favorito. Harry es empujado a un lado, cuando se trata de eso, ¿qué pasará? ¿Harry luchará por un mundo que no lo q...