Capítulo 23

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| Preocupación |

Abril

Desde aquel día en el cual Draken llegó a mi casa por la noche, no lo había vuelto a ver.

Habían pasado cinco días desde esa noche, y aún que nos habíamos enviado algunos mensajes, no volvimos a quedar para vernos, pero no me preocupaba tanto, ya que solo eran cinco días y era algo normal que quisiera su propio espacio para ciertas cosas, a decir verdad... me gustaba más así, a veces el espacio en las relaciones es necesario, cuando están muy pegados todo el tiempo casi sin respirar y lleno de besos todo el día me repugna demasiado, no podría estar en esa situación de estar ahogados para demostrar amor, ¿qué acaso el hecho de que el afecto sea a veces no es más emocionante? Si es siempre a cada segundo solo me darían ganas de golpear a la otra persona.

Hoy era un día común, estaba en clases a punto de poder irme a casa, el día claramente como el resto de la semana había sido tranquilo, y luego de esta clase finalmente podría ir a casa, aún que primero planeaba ir al café a tomar algo como de costumbre, pero no saldría tan tarde, ya aprendí esa lección.

En esta clase de historia, el maestro se ausento por problemas personales, así que había un reemplazo sentado en el puesto del maestro pegado en su móvil mientras el resto hacía lo que quería, por mi parte solo escuchaba música, estaba tranquila esperando la hora pronta de salida. Hasta que aquellas chicas de la otra vez llegaron y tuve que parar la música.

-¡hola Abril! -saludó una de ellas, todas estaban rodeando mi mesa.

-huh... hola. -hablé algo tímida.

-¿que tal estas?

-oye no hemos visto a Draken contigo últimamente, ¿rompieron? -¿Por qué son tan directas?

-ahm... de hecho no estamos juntos. -pasé las manos por mi cabello nerviosa.

-oh, pero tienen algo, ¿no? Se tomaron la mano la otra vez.

-yo les dije que él no era de nada serio. -rió una de las chicas chequeando su móvil.

El hecho de que difundieran cosas erróneas de él, me molestó.

-estamos saliendo, solo que lo hacemos en privado. -la campana sonó, y tomé mi mochila- si me permiten, iré a verlo, él no es un patán. -hablé por última vez saliendo del salón dejándolas atrás.

Podían meterse conmigo, pero no hablar mal de él.

Al salir de la escuela, comencé a caminar en dirección hacia el café, el cual estaba en dirección contraria a mi casa, pero a penas di unos pocos pasos cuando una voz llamó mi atención.

-¿Abril? -me llamó Draken detrás mío, por lo cual me voltee algo sorprendida.

-¿huh? Oh, Draken. -me acerqué a él con una sonrisa hasta que quedamos frente a frente- ¿que haces aquí? -pregunté curiosa mientras algunos ojos se posaban en nosotros.

-bueno... venia a pasar por ti a la escuela... ¿dónde vas?

-al café, pensaba ir a tomar una malteada.

-¿te molesta si voy contigo? -mi corazón se aceleró un poco, era un bonito gesto de su parte a pesar de ya haber ido juntos.

ᴍᴀʟᴀs ɪᴍᴘʀᴇsɪᴏɴᴇs  // 𝐊𝐞𝐧 𝐑𝐲𝐮𝐠𝐮𝐣𝐢 𝐱 𝐎𝐜 //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora