"No" es lo primero que se me viene a la mente ante su interrogante. Quizás estoy siendo demasiado rencoroso e infantil por algo que pasó hace poco más de diez años, pero Soo Eh marcó un antes y un después con su llegada y en esta ocasión, no permitiré que se repita. Suspiro y mi respuesta se queda atorada en mi garganta. ¿Por qué me es tan difícil mantenerla alejada? —Sí. — respondo finalmente, contradiciendo todo lo que en mi mente se había planeado.
Ella sonríe y despega un poco sus labios, quizá quiera agradecerlo o yo que sé, pero su intento de hablar se ve apagado por el sonido de un claxon. Un coche blanco se ha estacionado frente a nosotros, tiene un enorme moño rosa en el techo; quien menos imaginé se baja del coche y se acerca a Soo Eh y a mí con andar seguro.
Soo Eh mira al coche y después lo mira a él, JaeJoong le sonríe. Al parecer, ambos han olvidado que existo.
—Lindo auto. — anuncia Soo Eh y lanza un silbido. — ¿Regalo de mi suegrito? — le pregunta, bastante confianzuda y JaeJoong suelta una carcajada.
—Sí y no. —responde, pero su respuesta no es lo suficientemente clara para ella. —Es definitivamente un regalo, pero no es para mí. — se pone tras de ella y señala el auto. —Este es un regalo para mi lindo y bello Patito. —le aclara y le entrega un pequeño control negro, logrando que en el rostro Soo Eh se dibuje una gran sonrisa.
—¿Cómo? ¿Por qué? ¿Dónde? ¿Mío? ¿Un auto? ¿Un BMW? —su serie de preguntas hacen reír a JaeJoong.
—Tranquila, amor. Le pide y acorta la distancia para besarla.
Por un momento, siento la imperiosa necesidad de alejarlos, de llevarme a Soo Eh lejos del imbécil de JaeJoong y que jamás la vuelva a ver, a tocar o siquiera pronunciar su nombre; pero no lo hago, ¿por qué debería hacerlo? Ella no significa nada para mí, ¿o sí?
Toso para poder llamar la atención y sacar a la pareja de enamorados de su "encantador" momento.
JaeJoong se aleja de ella y fija su mirada en mí. Me sonríe y siento un profundo escalofrío por todo mi cuerpo.
—Hola, Hyun Joong. ¿Cómo te va? — me pregunta, sin ningún indicio de ironía o segundas intenciones, sólo con amabilidad. Estoy sorprendido, él nunca me había tratado de esa forma y no sé cómo reaccionar. Sonríe al encontrarme mudo ante sus palabras. —Supongo que tu silencio es porque te encuentras de maravilla y las palabras no alcanzan para describir aquella sensación. — comenta e inmediatamente capto la ironía de sus palabras. Maldito imbécil. —¿O estás sin palabras por la belleza de auto que tienes frente a ti? Supongo que nunca antes habías visto un auto de tal magnitud. —Insultos disfrazados de amabilidad barata, como me dan ganas de romperle la cara.
Veo como Soo Eh hace una mueca, incomoda por las palabras de su noviecito. —No debiste gastar en un regalo tan costoso. —comunica y le tiende el control.
—No, de hecho no gaste nada. Lo compre con el dinero del premio que gané por mis habilidades en la arquitectura. —Le responde y con sus palabras mi odio hacia el crece aún más. —¿Te gusta?
—¡Me encanta!
Yo debí ganar ese premio. Ese dinero debió ser invertido en la fiesta de cumpleaños de Yung So, en ropa nueva para mi madre y mis hermanos, y sospecho que era el suficiente para que mi madre dejara unos meses su segundo empleo en la lavandería, pero no; ahora está invertido en el estúpido carro de aquella niña mimada. Sin más, me doy la vuelta para regresar a mi casa y alejarme de aquellos dos.
—Compañerito. — Soo Eh frustra mi huida.
—Debo irme, mis hermanos me esperan. — le respondo de la maneras más fría y cortante posible, veo que en su rostro hay un poco de tristeza, pero me importa y me marchó definitivamente.
Estoy tan agotado física y mentalmente, que sólo deseo tomar un baño y dormir profundamente. Todo se va a la basura cuando escucho mi celular sonar, un mensaje de Ok Ryun.
«Futuro esposito Emoticono colonthree
Muero por verte, te espero en mi casa.»Al leerlo me siento molesto. En ésta ocasión, el mensaje de Ok Ryun no me ha causado felicidad, como suele pasar siempre, pero no le doy importancia a mis recientes sentimiento y me levanto de mala gana para ir a su casa.
.҈..
La última hora he estado en casa de Ok Ryun, ella se ha comportado demasiado cariñosa y atenta. Estamos viendo una película, difícilmente podría decir de qué se trata, pues nos hemos estado besando todo ese rato.
Al escuchar como la puerta se abre, nos separamos; como sí fuéramos dos adolescentes cachados en una situación comprometedora.
—¿Ya lo convenciste? —pregunta al instante Min Ah, tiene los brazos cruzados sobre su pecho y me mira con molestia. ¿Qué rayos le pasa a esa niña?
—No, esper…
—¿Convencerme de qué? —la interrumpo con mi pregunta, al verla la noto nerviosa.
—De enamorar a Soo Eh y… —no le doy tiempo a Min Ah de terminar su frase, pues me levanto de modo brusco y me alejo de mi novia.
—Hyun Joong. —me intenta detener Ok Ryun, pero yo la aparto y me dirijo hacia la puerta. No pienso ser el juguete de Min Ah. —Espera. —mi novia me sostiene del brazo, pero yo me rehúso a ser utilizado en la estúpida venganza de mi cuñada. Tengo dignidad y no pienso jugar con los sentimientos de alguien, por mucho que la desprecié. —¡Escúchame! —me grita cuando ve que ya tengo mis zapatos puesto. Yo no la miro, pero me quedo quieto esperando sus palabras. —Min Ah está sufriendo por ese chico y yo odio ver a mi hermanita sufrir, ella es el único familiar que me queda y…
—¡Y que se joda el estúpido de tu novio! ¡Usen Hyun Joong, total a Ok Ryun le importa un carajo su novio! —alego furioso y volteo a verla. —Total, no lo quiero y…
—¡Hyun Joong! —me interrumpe. —Te amo, pero...
—Pero siempre terminarás haciendo lo que ella te pide. —termino su oración y me doy vuelta, no quiero verla. — Me largo.
—Espera. —Ok Ryun me tomó por el brazo, se acercó poco a poco a mí y me besó delicadamente. Amaba como su boca recorría la mía y poco a poco bajaba, primero mi barbilla, luego hacia mi cuello. Gruñí por la sensación de placer que sus labios provocaban. Ella seguía llenando de besos mi rostro, pero perdí toda cordura cuando mordió el lóbulo de mi oreja. Mi punto débil.
—Lo haré. —atiné a decir, excitado y la cargué para llevarla a su cuarto. Estaba desesperado y ansioso de llenar de besos todo su cuerpo.
Cuando estábamos desnudos, satisfechos y cansados escuché Ok Ryun suspirar.
—¿Que tienes? —le pregunté y comencé a acariciar de forma circular su espalda, era tan suave y tersa.
—¿Qué pasará entre tú y yo? —pregunta y voltea a verme.
Me levante un poco para mirarla directamente a los ojos, vi preocupación y entendí el porqué. —Quedará intacto. —le aseguré y así sería. Yo amaba a Ok Ryun y pronto sería mi esposa.
.҈..
Mi cabeza era un mar de dudas, así que fue al único lugar donde entro en paz. Hace frío, pero la vista es impresionante. Me siento y comenzó a contemplar todo.
Después de tanto meditarlo, opté por hacer creer a Min Ah que estoy enamorando a Soo Eh, pero lo que verdaderamente haría, sería evitarla y mantenerla lejos.
Ya es tarde, así que me levanto y me dirijo a la puerta, pero antes decido ver cómo van creciendo aquellos tulipanes, me llevo una gran sorpresa al descubrir que uno de ellos se ha marchitado.
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Nuestro Hilo del Destino
Fanfiction«Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper». ¿Qué pasaría si por capricho de un Dios el hilo es atado a la...