El Dragon Enamorado |KookJin| ᵀᵉʳᵐⁱⁿᵃᵈᵃ

10

— ¿No hay algún otro camino?— SeokJin preguntó sin querer moverse de dónde estaba.

— No te preocupes, este puente esta en buenas condiciones y jamás soltaré tu mano, si por alguna razón el puente llega a caer yo te salvaré— el Omega se quedó en silencio para después asentir y dar un paso hacia el puente.

JungKook lo tomaba con fuerza de la mano y libero un poco de su escencia en un intento de calmarlo porque no dejaba de temblar.

— Si yo fuera tú no te creía, mi madre cayó de este puente.

— ¿Qué?— SeokJin se detuvo de inmediato.

— ¡Cállate, Min!— JungKook le gritó al guardia que había escogido para que fueran a la ciudad — ¡Tú eres huérfano!

— Por culpa de este puente es que quede huérfano.

— No le hagas caso, SeokJinnie, todos los leopardos de las nieves son huérfanos porque las hembras los dejan cuando creen que ya está preparados para sobrevivir por su cuenta y a YoonGi lo dejaron desde muy pequeño.

— ¿Por qué?— no le encontraba sentido a que hicieran eso.

— Es una especie en peligro de extinción, así que las hembras buscan reproducirse.

— En resúmen, mi mamá no me quería— El leopardo hablo de nuevo— no te preocupes, si se cayó del puente ni me enteré-

— Sigues sin ayudar— el dragón refunfuño.

— Y si se cayó fue por su culpa y no por la del puente, esta cosa es bastante estable— corrigió —así que puedes pasar sin problemas.

— Vamos— JungKook lo ánimo a seguir avanzando y SeokJin siguió caminando hasta llegar al otro lado del puente— Después de este mini bosque está la ciudad.

— ¿Y no es peligroso?— el Omega preguntó.

— Para nada, tenemos la tasa delictiva más baja de cualquier reino— YoonGi comentó orgulloso— normalmente todos lo cruzan con su forma animal porque suele ser más rápido, pero para los otros hay un camino marcado para que no se puedan perder.

— Oh...— siguió caminando sin soltar la mano de esposo. Se quedó pensando en la tasa delictiva de su reino, allá era bastante alta, pero también era demasiado notable la diferencia económica entre los habitantes, había lugares a los que no se le permitía ir porque era peligroso, los asaltos y robos eran algo demasiado común.

— Estuve investigando sobre las universidades y escogí las mejores opciones a mi parecer, hice las citas; pero si ninguna te convence podemos ir a ver las otras— el dragón hablaba algo nervioso, SeokJin ya comenzaba a hablar con él y se tomaban las manos sin pensarlo mucho, hasta en su escencia se notaba que el miedo había disminuido y ya no era aquel olor de fresas ácidas, ahora era realmente dulce y eso lo estaba volviendo loco.

Al acercarse más a la ciudad el bosque se volvía más como un parque, se escuchaba mucho más ruido, voces, etc.

— Por el tipo de terreno no muchos usan automóviles, usan automóviles, solamente los camioneros los usan por su trabajo, es resto suele usar su forma animal, motocicletas o bicicletas.

— JungKook, no es estúpido, no tienes que explicarle todo— Min se cruzó de brazos.

— Cierto-

— No me molesta, aquí es donde viviré y posiblemente también estudie así que me gustaría conocerlo bien~— la alpaca defendió al Alfa— ¿Podrías seguir explicándome?

— Claro, SeokJinnie—contestó rápidamente y así comenzó el recorrido de los tres por la ciudad y las diferentes universidades tanto públicas y privadas con las cuales contaban.

SeokJin había quedado impresionado con el lugar, cada edificio adaptado al territorio en el que se encontraba, las especies que convivían en paz y la gente tan amable que había, hasta había betas que parecían tener puestos importante, en su reino los betas eran inferiores y no podían tener ciertos trabajos o tener acceso a algunos lugares.

— Bien, tenemos la fecha para algunos exámenes de ingreso a los que accidiste a participar, yo me encargaré de todo el papeleo de inscripción y te llevaré el día que sean y también están los folletos de las universidades privadas que más nos convencieron— los tres habían parado en una cafetería en dónde SeokJin no estaba para nada cómodo porque pudo notar a varios y varias Omegas que se le quedaban viendo a su esposo y eso por alguna extraña razón le molestaba.

— Woow, tendrás que estudiar mucho, pequeño Principito— YoonGi dijo con un tono burlón.

— ¿Mucho?

— Mucho, son varias pruebas— tomó un trago de su bebida— pero tienes suerte de que tienes a un cerebrito como esposo.

— ¿Cerebrito?

— Este dragón así de torpe como lo ves tiene un coeficiente intelectual de ciento cuarenta y ocho puntos, tuvo una de las mejores calificaciones en todo el reino y es muy bueno con los idiomas— YoonGi siguió nombrando las cualidades de JungKook que hacían que se avergonzará, bajaba su cabeza y parecía que quería esconderse en sus alas y hacia rollito su colita. En esa postura ya no parecía tan amenazante y a SeokJin le daba bastante ternura.

— Me siento un tonto-

— No, no, no eres un tonto— el dragón lo interrumpió— aún eres muy joven y estás listo para entrar a la universidad.

— Y tu esposo seguramente te ayudará a estudiar, podrás escoger cualquier universidad que tú quieras— el leopardo lo ánimo.

— Pero no quiero molestarlo, JungKook tiene demasiado trabajo-

— ¡Te ayudaré!— el alfa gritó, si, seguía sin poder controlarse algunas veces cuando estaba nervioso.

— ¿De verdad?— SeokJin lo miró emocionado.

— Si, por supuesto que lo haré— asentía efusivamente.

— ¡Gracias!— JungKook aún se preguntaba como era posible que se pudiera enamorar cada vez más de SeokJin, con sus ojitos azules que brillaban de felicidad sus bracitos que había levantado con emoción y todo, el era simplemente perfecto.