El nuevo tú

Especial Peter

Me odio y probablemente Mathew también me este odiando. Al recordar la mirada en sus ojos un dolor agudo penetra mi corazón. Todo lo que dije y como lo lastime ¿Por qué demonios hice eso? ¿Por qué no pude controlarme y hablar calmadamente?

Aveces me gustaría tener una mejor personalidad. Que mi lengua no sea tan afilada y que mi forma de defenderme no sea aplastado aquello que me molesta. Pensar dos veces antes de actuar no es tan difícil ¿Por qué no puedo hacerlo?

Hasta hace unos días Mathew y yo estábamos perfectamente, yo mismo estaba impresionado de lo bien que nos llevábamos, nuestras personalidades y caracteres combinaban a la perfección. No podía imaginarme que hoy el terminaría odiándome y mucho menos que se enfadara conmigo de esa forma.

«Y con justa razón».

Yo no tenía idea. No supe cómo manejar la situación. Soy como soy un tipo que resuelve todo a los golpes. Alguien que aleja los problemas antes de enfrentarlos.

«Soy un virgen que jamás tuvo novia ¿Como mierda sabría que todo este tiempo el no me trató como un amigo?»

Debí sospecharlo cuando me llamaba en medio de la noche o cuando empezó a ir cada día a mi trabajo. Pensé que la forma en que me miraba a los ojos mientras sonreía era normal y que la reacción en mi pecho también lo era. No estaba acostumbrado a tratar con personas como él.
Estúpidamente pensé que lo inusualmente amable en su actitud era parte de su personalidad y que la forma en que de vez en cuando tocaba mi pelo era su forma de tratar a sus amigos.

Lo raro de que todo eso tenga un significado no es que Mathew esté interesado en mi. Lo extraño es que realmente disfrute todo eso. Auténticamente era feliz viendo cómo corría hacia mi apenas verme. Me gustaba la sensación de su excesivo contacto físico y mierda ahora entiendo porqué todo el mundo está tan obsesionado con besar.

«¿Estaría bien si yo sintiera lo mismo que el?»

Estoy acostado aún en mi cama. Como estoy de vacaciones de invierno últimamente duermo mucho y juego con Luci, lamentablemente hoy no tengo ganas de nada. A mi teléfono siguen llegando mensajes pero ninguno es de la persona que espero y no soy lo suficientemente valiente para escribirle yo.

Escucho la puerta principal abrirse y no estoy seguro de si es mi papá o si es Jake.

—¿Hey y la comida?

«Definitivamente es Jake».

Escucho como saluda a Luci quien ve televisión en la sala y solo me limito a rogar que no entre.
Dicho y hecho. Entra a mi habitación, me cubro con una manta de pies a cabeza y ruego para que entienda la señal.

—¿Que te pasa? ¿Estas en tus días? —Siento como se sienta en la cama.

—No quiero hablar ¿No tienes una cita con tu esposa?

—Pensé que odiabas que estuviera con Maddy.—Trata de quitar la manta de mi cabeza pero no lo dejo.

—Realmente no estoy de humor.

—¿Que paso? has estado raro desde la fiesta de Mathew.

Al escuchar ese nombre siento como si apuñalaran mi corazón.

—¿Sucedió algo? Mark dijo que te fuiste y lo dejaste abandonado.

—No fue nada.

—Sabes que si tienes algún problema puedes hablar conmigo ¿No?

Sus palabras penetran mi mente. No hay secreto que no sepamos o compartamos el uno con el otro pero..., ¿Que tan sincero se puede ser con tu mejor amigo? ¿Que debería decirle?