Halloween
El tiempo pareció pasar como agua, cuando menos se los esperaban las tiendas preparaban las mercancías que se utilizarían en Halloween, octubre había llegado precipitadamente. A los alumnos del instituto no les eran indiferentes las fechas. Cada año, sin falta, Shandi (una chica que presumía el dinero de sus padres y al tiempo la falta de atención de estos) organizaba la ya conocida fiesta de noche de brujas, o Halloween como se conoce popularmente. Ese año la condición para entrar a su gran celebración sería vestir con disfraces, esto llegó a los oídos de todos los adolescentes que compartían escuela con ella y por obra de sus padres o por pura suerte los disfraces ya estaban listo desde semanas antes, quizá menos. Aun así, esa idea no atraía mucho a los jóvenes integrantes de Metallica y mucho menos a los de Megadeth.
Esa mañana James abandonaba el salón de química, sus ánimos estaban por los suelos pues la noche anterior había estado escribiendo y haciendo las tareas retrasadas que había pasado por alto. El profesor encargado había propuesto un proyecto para evaluar el semestre, algo así como un examen final. El trabajo sería en parejas, y para suerte de James, la pequeña y un tanto extraña castaña había sido elegida como su compañera. Su nombre era Beth, y según su presentación unos minutos antes de abandonar la clase, había estado en ese curso desde el inicio de semestre, pero James insistía en que jamás se había cruzado con ella.
Mientras caminaba hasta su siguiente clase, James observó los múltiples carteles que anunciaban la fiesta que se daría el treinta y uno de octubre. Sin prestarle mucha atención a ese detalle, se encaminó a su casillero como primera parada y cuando estuvo frente a él buscó las pequeñas llaves en sus bolsillos, depositó sus libros en el reducido espacio y cuando cerró la puerta se topó con su compañera de trabajo. Su corazón dio un vuelco casi al instante.
—¡Carajo!, ¡me asustaste! —reprochó el rubio, la chica castaña lo miró con diversión, era algo tímida y eso ponía incomodo a James.
—Lo siento... ¿Ya te vas? —interrogó la chica con curiosidad, ahora que James la miraba bien, la castaña era más baja que él y parecía tener al menos dos años menos, no entendía que hacía en su clase teniendo esa edad.
—Ajá, ¿Pasa algo? —Beth observaba a James totalmente embelesada, el rubio frunció el ceño ante tal gesto. A lo lejos, Mustaine presenciaba la situación con recelo.
—Quería saber si vas a ir a la fiesta.
—No lo sé, ¿tú vas a ir? —preguntó James con desinterés.
—Sí. ¿Sabes?, podríamos ir juntos, sólo si tú quieres —Hetfield hizo una mueca. Beth lo miraba con interrogación, esperando una respuesta positiva, que seguramente no recibiría.
—Aaamm creo que voy a ir con Dave —James observó la reacción de la castaña. Beth agachó la cabeza con vergüenza, seguramente ocultando el leve sonrojo que aparecía en sus mejillas.
—¿Dave Mustaine?
—Ajá, él mismo.
—Oh, ya veo... bueno... nos vemos mañana para empezar el proyecto —James observó a la castaña irse caminando a paso rápido, podía asegurar que iba maldiciendo a Mustaine o incluso a él mismo, aun así no pudo importarle menos.
Estaba a punto de irse cuando una presencia lo interrumpió, era Mustaine, lo había observado todo y estaba haciendo su mayor esfuerzo por no preguntar nada acerca de lo sucedido.
—¿Quién era ella? —Mustaine se maldijo por dentro, no podía creer que estaba interrogando a James por sus estúpidos celos que seguramente no tenían lugar alguno en la situación.
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Promises ~Hetstaine~
Fiksi PenggemarY cuando caminamos por la calle El viento canta nuestros nombres en canciones rebeldes Los sonidos de la noche deberían ponernos ansiosos Pero es demasiado tarde cuando el miedo se ha ido Te encontraré en la próxima vida, te lo prometo donde podemo...