03.

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Me echo el tenedor a la boca saboreando los fideos con salsa, están muy buenos pero le faltan queso.

Me levanto y abro el refrigerador sacando el queso, tomo un cuchillo y comienzo a cortar pedazitos, los echo en mi plato sobre los fideos y me vuelvo a sentar después de guardar el queso.

Miro hacia adelante masticando y frunzo el ceño por la forma que me mira la Nati.

—¿Qué?. — hablo con la boca llena y trago para después tomar jugo.

— Hueona, hace una hora me dijiste que te ibas a Brasil, y aún no entiendo, o sea, ¿me vai' a dejar sola pa' ir a culear?. — me río limpiandome la boca y siento mi cara ponerse roja.

— No, tonta, es por trabajo, pero estoy como en shock todavía, o sea, él me dijo que me quiere ahí. — me quedo pensativa mirando hacia mi plato.

— ¿Que te quiere donde?. — sonrie coquetamente y ruedo los ojos. — Ya, ya, entonces él te quiere ahí y tú tienes que ir, es trabajo, no puedes decir que no.

— Si, lo sé, pero nunca pensé que un trabajo me mandaría fuera del país, o sea, siempre quise salir de Chile, pero como que aún no lo asimilo. — termino de comer mis fideos y me recuesto en la silla. — Entonces, tengo que ordenar mi ropa, aunque no sé por cuántos días será, supongo que unos cinco días.

— Yo te ayudaré con la ropa, déjame todo a mí. — me tira un beso levantándose y se va a mi pieza.

— Hoy te toca lavar los platos. — me levanto dejando estos en el lavaplatos y voy hacia mi habitación.

Me quedo en el umbral de la puerta mirando mi teléfono, tengo un correo de una tal Mónica.

"Adjunto archivo del pasaje de avión, número de vuelo 12B.

<Abrir archivo>

Adjunto archivo de reservación del Hotel, número de habitación 175, piso 12.

<Abrir archivo>

Cualquier duda o consulta escríbame a éste correo y la atenderé lo más pronto posible."

Termino de leer y aprieto el primer archivo, mi vuelo sale en dos días a las tres de la tarde.

Miro hacia el interior de mi habitación y abro grande los ojos.

— ¿Qué estai' haciendo?. — entro a mi pieza y camino como puedo hasta la Nati.

Dejó la pura caga', hay ropa en todas partes, en el suelo, en la cama, en el escritorio, ni siquiera sabía que tenía tanta ropa.

— Te estoy ayudando, en Brasil hace calor, así que todo ésta ropa de invierno no la llevarás, te dejé encima de la cama unos vestidos para que veas cual te gusta más, lleva zapatillas cómodas, y bikin...— le tapo la boca con la manos y la miro negando.

— Iré a trabajar, no a vacacionar, si me quieres ayudar podríai' imprimir estos archivos, por fa. — le entrego mi celular y asiente.

— Ya, pero igual vai' a llevar un bikini. — me rio sentandome en la cama mirando los vestidos.

— Bueno, ya. — tomo un vestido floreado y lo dejo sobre mis piernas.

Ella sale de la pieza y me quedo mirando todo.

Mierda, no le he dicho a mis papás.

Bueno, será una sorpresita.

*****

Dos Días Después.

Termino de cerrar mi mochila de mano y salgo de mi pieza caminando hasta el sillón, han sido unos días super locos.

Hace dos días me enteré que iría a Brasil, tuve que pedir una reunión urgente con los profesores de mi universidad, les hablé de la situación y me mandarán todo lo necesario para que no me atrase en mis clases, no sé si podré meterme a las clases online pero como se graban, no tendré mucho problema.

Otra cosa que pasó, fue que Benjamin me llamó por videollamada, eran casi las dos de la madrugada y estaba ordenando mis cosas para echarlas a la maleta, hablamos un rato y me dijo que me tendría que quedar hasta que la Copa América terminara, no sé cuánto sería eso, probablemente dos semanas me dijo él.

Mis papás como que aún no asimilan que saldré del país, además hace poco se vieron el capítulo de Grey's Anatomy en donde se estrella el avión en donde van los doctores y ahora le tienen miedo a los aviones.

La Nati está triste por que la dejaré por dos semanas, pero su pololo va a venir y se quedará con ella, no sé en realidad si está triste o si está feliz, pero bueno.

Dejo mi mochila sobre el sillón y tomo mi celular guardando el cargador en el bolsillo de la mochila.

Reviso mi celular y veo que quedan cuatro horas para mi vuelo. Ya me tengo que ir, no quiero atrasarme.

Tomo con una mano mi maleta y en la otra me cuelgo la mochila, la Nati me está esperando abajo y mis papás están en el aeropuerto, primera vez que llegan temprano a algo.

Me pongo la mascarilla y salgo de la casa cerrando la puerta con llave, guardo la maleta en la maletera y me subo al auto, la Nati avanza y ya nos vamos al aeropuerto.

*****

Ya estoy en el avión.

Creo que ahora es cuando me doy cuenta de lo que realmente está sucediendo.

Miro por la ventana y veo como avanza el avión, lentamente.

Mis papás se pusieron a llorar, yo también lloré, nunca me había alejado tanto de ellos, aún me ven como una niña y yo sinceramente también me veo como una.

Me acomodo en el asiento esperando a que el avión despegue, estoy muy nerviosa, es mi primera vez en un avión, y además estoy sola.

Un perfecto desastre.

— Hola, señorita, ¿desea algo para comer?. — la azafata me mira sonriente mostrando un carrito lleno de maníes y dulces.

— Sí, ¿me puede dar dos maníes y un jugo, por favor?. — ella me los entrega y le sonrío detrás de la mascarilla. – Muchas gracias.

Sigue caminando por el pasillo después de decirme gracias y me bajo la mascarilla para darle un sorbo al jugo.

Aun no dan la orden de utilizar aparatos electrónicos por lo que saco uno de mis libros en inglés y me pongo a leer.

Ocho horas después y estamos a punto de llegar al destino.

Siento el poto cuadrado, más encima había un señor adelante mío que roncaba más fuerte que la chucha.

Me coloco el cinturón nuevamente y el avión desciende de a poco, se mueve y me asusto al escuchar fuertes ruidos, pero ya aterrizó y estamos en la linda tierra de Brasil.

A trabajar como dijo el Mr. Increíble.

•••••

¡hola!

¿como están?¿ya se vacunaron?

espero que estén todes bien, los tkm y gracias por sus votos🥰💕

[capítulo editado]

Tradúceme Ésta [Ben Brereton] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora