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A la siguiente mañana no leo en mi camino al trabajo. No estoy de humor. Mientras que la noche anterior sufrí falta de sueño por la emoción, anoche me quedé viendo el techo toda la noche con una abrumante sensación de terror y humillación. Así que en vez de leer, en mi caminata al trabajo de hoy pateo pequeñas piedras y ramas caídas en el camino, liberando un poco del enojo que siento hacia mí misma.

Mientras salgo del pasaje hacia High Street me sorprendo cuando miro a lo alto de la colina y veo una figura parada en la entrada del café, viendo por las ventanas. No me toma mucho darme cuenta que es Billy. Una onda de nerviosa emoción me recorre mientras sigo caminando hacia él.

'¿Qué estás haciendo aquí tan temprano?' pregunto.

'¡Ah, Sophie! ¡Ahí estás!' dice, soplando en sus dedos con la intención de calentarlo en medio del frío aire de la mañana. 'No estaba seguro de la hora en que abrían.'

'No abrimos hasta las ocho, así que tendrás que esperar un rato.'

'¿En serio?'

'Sip.'

'Que mal.'

'Te invitaría a entrar pero no puedo ofrecerte nada caliente hasta que todo se caliente. Me temo que no habrá café.'

'¡No me importa tomar algo frío! ¿Podría sentarme en una mesa y trabajar en mi libreto mientras horneas?' pregunta con ojos suplicantes.

Sé que a Molly no le importará. Es más, sé que le encantará y estará feliz de recalcarme que estaba en lo cierto cuando dijo que él volvería.

'Ok, entra entonces,' suspiro, abriendo la puerta y entrando los dos.

'Gracias. Tengo que estar en el set a las 9, así que no me quedaré mucho.'

'¿Sigues trabajando en tu libreto?'

'Bueno, supongo que podrías decir que sigo distrayéndome,' dice con una brillante sonrisa mientras me observa. 'Creo que culparé a la señora Brown por iniciar mi distracción con sus sospechosa mente.'

Y yo, por muchas cosas, pienso. 'Bueno, no creo que vuelva a hacer eso - no ahora que sabe que está en presencia de la grandeza. De hecho, apuesto que ha estado toda la noche llamando por teléfono a todos los que conoce presumiendo sobre ti. Le habrá estado diciendo a todo aquel que escuche que ella sabía que había algo "especial" en ti desde el principio.'

Juro que puedo ver las mejillas de Billy enrojecerse mientras murmura, 'Estoy seguro de que no lo hizo.'

Me encuentro sorprendida por su timidez. Después de todo, es una superestrella de Hollywood; ¿no se supone que tiene grande egos y piensan que son intocables? Seguramente está acostumbrado a mejores elogios que esto.

'De acuerdo,' digo, viendo la hora. 'Tengo que empezar a hornear.' Señal el horno con la cabeza. '¿Puedo ofrecerte algo?'

'No, no, no. Estoy bien. Solo... haz de cuenta que no estoy aquí.'

Le doy una pequeña sonrisa antes de dirigirme detrás del mostrador hacia los hornos donde hago la mezcla de la tanda matutina de muffins, panqués, pan y un pastel de zanahoria especial para la señora Wallis, cuya familia la visitará esta semana. Casi termino cuando escucho que Molly entra por la puerta a las siete cuarenta y cinco, lista para hacer sus famosos bollos. La veo detenerse confundida cuando ve a Billy sentado en una mesa, y luego sonríe. Inmediatamente sé qué está pensando.

'¿De nuevo aquí, señor Buskin? No esperaba verlo pronto. Al menos no hasta que abriéramos.'

'No estaba seguro de la hora a la que abrían pero, gracias al cielo, me dejaron entrar para poder trabajar.'

Billy & MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora