VIRUS; Kookmin. COMPLETA.

N U E V E

Capítulo extenso (5863 palabras)

Muchas veces comencé a cuestionarme si era feliz, qué eran esos motivos en las cuales podía sentir aquel sentimiento donde millones de personas lo sienten a cada segundo alrededor del mundo.

Mi vida en sí ha sido monótona, la rutina que he llevado por años me había parecido aburrida hasta hoy, en donde me encontraba reflexionando todo lo que tenía y lo que perdí a causa de esto.

Pero ahora mi pregunta era.

¿Podriamos volver a ser felices después de que todo esto termine?

Ver los rostros de las personas me ha dejado pensando, se veían demacrados apesar de estar en un lugar seguro, pero de igual manera, uno nunca sabe lo que puede suceder y la desconfianza era el principal problema en cada uno.

—Jungkook, ¿Me estas escuchando? — la voz de Hobi hyung me sacó de mis pensamientos. Giré a mirarlo distraído, este me miraba mientras comía unas galletas.

—Perdona, estaba pensando en algo— le dije volviendo a ver a las personas caminar por el patio del refugio.

—¿Que piensas? — preguntó con curiosidad.

Hubo unos segundos de silencio por mi parte hasta que respondí.

—¿Estaremos seguros aquí, Hyung? — pregunté sin dejar de observar a una pareja que estaba viendo a un niño jugar en el parque, se veían desanimados pero aún así estaban los dos juntos tomados de la mano.

Hoseok hyung suspiró.

—No lo sé Jungkook, quiero creer que sí.— respondió sin más, mirando a la misma dirección que yo.

Asentí ido, esperando que podamos irnos y al menos olvidarnos por un rato de este horrible momento.

⚠️

—Ahg— me quejé a lo bajo, dejando la pesa a un lado. Me senté en el suelo, secando con una toalla el sudor que bajaba por mi cuerpo.

En ese momento apareció Yeonjun corriendo hacia a mí.

—¡Koo! — dijo emocionado una vez que se paro al lado mío.

—¿Que sucede?—  le pregunté mirándolo curioso.

—¿Puedo ir a jugar con Soobin?—  preguntó haciéndome un leve puchero.

Suspiré levantándome para observar a Soobin que esperaba paciente a Yeonjun.

Bajé la mirada encontrando con los ojos bambis de este suplicandome con estos que lo deje.

—Esta bien, pero solamente dos horas y vuelves a la habitación. Ya te sabes el camino— le dije, poniendo la toalla en mi cuello observando como Yeonjun asentía frenéticamente antes de abrazarme y correr hacia Soobin.

Cuando note a los dos menores desaparecer, acomodé las pesas en su lugar y me dispuse a salir del gimnasio del lugar.

En el camino iba saludando algunas personas con las que había hablado en mi estadía en el refugio, al salir del pasillo que daban a los gimnasios me adentré a los otros pasillos que eran de las habitaciones.

Al llegar a mi habitación, dejé las llaves en la mesa y me dirigí al placard para buscar ropa para cambiarme no si antes darme un baño.