El juego del Amor (+18)

Capítulo 23 - Memories

Sara Guzman

Y aquí estoy, a punto de contarle mi pasado a Daniel, es raro hacerlo, solo 3 personas saben lo que pasó en verdad, Hanna, Alison y mi mamá, otras personas saben que tuve un mal de amores, como Cesar o mi papá, pero no saben la historia completa.

- Esto no es fácil de contar porque me costo mucho superarlo - le digo a Daniel

- Stellina si quieres compartirlo conmigo te voy a escuchar, si no, no hay problema - me dice. 

- Creo que quiero decírtelo, en cierta parte me ayuda a enfrentarlo en vez de ignorarlo - le digo y me coje de la mano, mientras estamos sentados en un columpio al frente de la piscina.

- Siempre voy a estar para escucharte - me dice.

- Está bien pero me voy a poner más cómoda - le digo y me mira raro, pasó una de mis piernas por encima de su pierna. - Ahora si- le digo.

- Estás tentando al diablo ¿Lo sabías? - me dice.

- Me encanta hacerlo - le digo y me besa, su sabor se ha vuelto un narcótico para mi.

- Me encantas - me dice

- Bueno guapo, ya te voy a contar mi pasado, mmm por donde empiezo - me cuesta, de verdad que me cuesta.

- Cuando tenía 14 años, me sentía mal conmigo misma ¿Sabes? no me gustaba mi apariencia, no siempre fui la diosa que conoces - le digo y ríe - no me gustaba nada de mi y mi pelo, lo detestaba porque me hacía resaltar mucho.

- Pero tu pelo es bellísimo - me dice.

- Lose, pero antes no lo pensaba y solo me acomplejaba porque llamaba mucho la atención, como sea, no era muy sociable cuando estaba en el colegio, mi única amiga era Hanna pero no estudiabamos juntas, por ende en el colegio no tenía muchos amigos, entonces un dia llego un nuevo chico al colegio, se llamaba Noah él tenía 16, era de último año, era muy lindo, llamaba la atención de todo el mundo, un dia estaba comiendo en la cafetería y el se me acercó, me pareció muy raro que lo hiciera ¿Porque se acercaria a mi? La niña rara, antisocial, el caso el empezó a hablarme mucho, hasta que empezamos a salir y no me di cuenta pero me había enamorado de Noah, se convirtió en mi luz, en mi todo, un dia el me confeso lo mismo, que él estaba estúpida y malditamente enamorado de mí - digo, siento como un pequeña lágrima empieza a brotar de mi ojo, porque aquí empieza lo feo.

- Stellina, si no quieres ... - me dice.

- Déjame terminar, el caso es que empezamos a salir pero siempre que lo hacíamos era en lugares lejos del colegio o lejos de donde él vivía, yo no le veía nada malo, que estupida fui - digo. 

- No te trates así nena - me dice y me abraza.

- Pero es que lo fui, como sea nos hicimos novios, yo me sentía tan bien, el me dio la confianza que no tenía, me llenaba de cumplidos, era el mejor, a los dos meses yo cumpli 15, el dijo que me iba a dar el mejor regalo que un hombre le puede hacer a su novia, el dia despues de mi cumpleaños me fui con él a la playa, nos quedamos en una habitación y todo empezó mmmm yo estaba muy nerviosa porque iba a ser mi primera vez, pero igual yo lo amaba, así que paso lo que tenía que pasar, esa noche me hizo el amor o eso creí yo, a la mañana siguiente el se comporto muy borde conmigo, era un Noah totalmente diferente y así fue los siguientes días, yo no entendía porque él se comportaba así, entonces empecé a entrenar baloncesto porque a él le gustaba mucho, pensé que si hacia eso, tendriamos mas cosas de qué hablar, resulta que soy muy buena en el baloncesto, supongo fue lo único bueno de eso - dice y le sonríe, él me devolvió el gesto - cada vez era más distante, solo nos veiamos teniamos sexo y se iba, me dejaba sola, confundida y dolida, yo estaba ciegamente enamoradamente de el, por eso queria que funcionara y segui insistiendo, todo esta situación ya iba para un año, en la escula eramos desconocidos, solo eramos novios en el rincon de mi habitacion o en la suya, se acercaba el dia de su cumpleaños, yo no podia ir porque ese mismo dia tenia que ir con mi papa a un viaje de negocios, decidi ir a su casa un dia antes de su cumple para darle un regalo, me puse una lenceria, nunca habia hecho eso y lo hize por el, llegue a su casa y toque la puerta, ese fue mi mayo error.