Había pasado una semana desde la última vez que hablé con Julio por teléfono, ahora cada vez que llamaba, le pasaba el celular a Lucía para que contestara y conversara con su papá, yo estaba bastante molesta como para entablar una conversación con él, una que no involucrara discusiones.
-Sí, la abuelita me llevó al palque -escuché que decía mi hija al teléfono. Julio había llamado cuando le estaba terminado de poner su pijama, así que la dejé con el celular mientras le trenzaba el cabello.
-Mis amiguitas, teno muchas acá, pelo quielo que vengas -dijo con tristeza en su voz.
-Sí, ajá -respondió y me tendió el celular -Papá quiele ablal -dijo y tomé el celular de su manito.
-Hola -musité parándome de la cama para salir al balcón, mientras dejaba a Lucía viendo caricaturas.
-Clara ¿por qué no tomas mis llamadas? -contestó frustrado al otro lado del teléfono.
-Estoy lidiando con muchas cosas ahora y lo que menos necesito es tener una pelea contigo por teléfono -respondí con sinceridad.
-No llamo para pelear contigo, Clara. Nunca lo haría, agradezco infinitamente todo lo que has hecho por Lucía, porque has cubierto mi lugar de una manera increíble -suspiró -Siento no ser el papá que querías para ella...
-Julio -interrumpí -No querría a nadie más como padre de Lu y lo sabes, pero me gustaría que estés más presente en su vida o al menos en los momentos importantes para ella. Sé que tienes un trabajo que amas y te va bien, pero yo también tengo eso y no la he dejado de lado.
-No es lo mismo, Clara.
- ¿No? Solo porque tú estás triunfando en Hollywood y yo sigo actuando en España, no significa que mi trabajo valga menos que el tuyo. Ambos podemos hacer sacrificios.
-Tengo un contrato que...
- ¿Crees que yo no? -pregunté comenzando a enojarme de nuevo -No quiero tener este tipo de conversaciones contigo, Julio. Siempre terminamos peleando y me agota mentalmente.
-Bien -respondió cortante - ¿Necesitas dinero o algo para el cumpleaños de Lucia? -preguntó cambiando el tema.
-No, gracias. Mamá ha organizado todo y no me ha dejado poner un peso y tampoco intervenir. Entre Lucía y ella están organizando la fiesta, así que no sé qué esperar -respondí sonriendo y recordando las veces que me han excluido de sus charlas de cumpleaños.
-Me lo dijo, pero no me quiso soplar la temática -contestó riendo.
-He tratado de escabullirme en los armarios para pillar algo y así buscar un regalo acorde a la temática, pero no he tenido éxito -confesé.
-Chica lista -susurró riendo y luego se calló -Extraño España, Clara -confesó con nostalgia -Es tan poco el tiempo que paso en casa cada vez que voy, con mi familia, con ustedes...
-Siempre puedes volver, Julio. Tienes mil razones para estar aquí y sé que en el fondo no quieres construir tu familia en Estados Unidos, bajo el foco de todos.
-Ahora no puedo -dijo con tristeza -Pero intentaré ir para el cumpleaños de nuestra hija, lo prometo.
-No prometas algo que no podrás cumplir -susurré cansada de sus falsas promesas.
-Estoy haciendo un esfuerzo.
-Espero verte aquí entonces, sabes lo importante que eres para ella.
-Y ella para mí, por Lu es que hago todo esto, para que no le falte nada -respondió.
-En eso es en lo que siempre te has equivocado, Julio. Ella no necesita nada material, nunca lo ha necesitado. Te necesita a ti, a alguien que la cuide de los monstruos del armario cuando yo duermo profundamente y no despierto hasta que está llorando sobre mi cama -confesé con vergüenza. Si bien no soy han buena para dormir como Julio, de noche suelo dormir profundamente y muy pocas cosas son capaces de despertar, es por eso que Lucía duerme conmigo la mayoría del tiempo.
-Veo que sigues teniendo el sueño profundo -se burló.
-Ya, pero al menos no duermo todo mis ratos libres, día y noche -me burlé de vuelta - ¿recuerdas cuando estábamos grabando ATDMV y los chicos hacían lives mientras dormías?
-Estaba agotado -se excusó -Y tú no te aburrías de acompañarme en muchas de esas siestas y acurrucarte a mi lado -recordó y no pude evitar que mi mente volviera a todos los momentos que pasamos juntos antes del estreno de la película.
-Fue una buena experiencia -solté -Digo, la película -me corregí -Hicimos amigos, contactos y moldeamos nuestro futuro a partir de ahí.
-Sí, no me quejó, estoy donde siempre soñé desde que comencé a actuar -dijo con nostalgia -Es difícil rechazar una propuesta así, cuando no a muchos se la ofrecen -agregó y sé que en el fondo estaba tratando de convencerse a sí mismo de que había tomado la decisión correcta al irse de España.
-Tengo que colgar, Lucía me espera para tomar leche y dormir. Ha sido un día largo -dije bostezando largo y tendido.
- ¿Aún le das pecho? -preguntó con curiosidad.
-Algunas veces, en general de noche, le está costando conciliar el sueño y de alguna forma tomar pecho la relaja y se duerme rápido. Creo que está ansiosa por su fiesta.
- ¿No te molesta? Digo, ya tiene dientes y eso -dijo sin dobles intenciones.
-Al principio sí, cuando le estaban saliendo sus primero dientes, era horrible cada vez que me mordía por accidente, pero ya estoy bien con eso, todo controlado, han pasado años ya —respondí riéndome.
-Hablaré con ella sobre eso, tiene como mil biberones y tú debes estar cansada -dijo sonando preocupado.
-Estoy bien, Julio. No me moleta hacerlo, amo tenerla conmigo. Cuando crezca ya no me querrá con ella todo el tiempo -vociferé soltando un bufido, pero Julio se quedó callado.
-Lo siento, no quise hacerte sentir mal.
-No, está bien. Sé que me estoy perdiendo momentos hermosos con ella...
-Está en tus manos la decisión y lo sabes -interrumpí mirando hacia adentro, donde Lucia ya estaba comenzando a cabecear -Tengo que cortar, Lu se caerá de la cama en cualquier momento -agregué.
-Ve con ella, no quiero que tenga un chichón el día de su fiesta -dijo riendo con nostalgia -Buenas noches, Clara.
-Buenos noches, Julio -respondí y cortó la llamada.
Ese tipo de llamadas con Julio me confundían, me transportaban a los momentos que pasamos juntos y que me hubiese gustado seguir compartiendo a su lado.
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One shot Clara Galle y Julio Peña
ФанфикMini historias de Clara Galle y Julio Peña, quienes interpretan a Raquel Mendoza y Ares Hidalgo en la adaptación de Netflix A través de mi ventana.