Lista para esto. Fleur y Tonks.

Capítulo 13

  Sacó rápidamente a Fleur del arbusto y levitó su cuerpo hasta la entrada del laberinto, trataba de ser lo más cuidadosa posible en cada movimiento que hacía. Buscó rápidamente un lugar donde colocarla y dejó que los medimagos se hieran cargo.

Gabrielle llegó rápidamente a su lado en cuanto notó que era su hermana, ambas temblaban pero Tonks trató de ser fuerte, sostuvo a la pequeña rubia entre sus brazos en todo momento. Veían como le administraban varias pociones a Fleur y curaban sus heridas por lo que parecieron ser horas.

De un momento a otro la chica abrió los ojos y pareció tomar conciencia de lo que pasaba. Aun se veía bastante débil pero había recuperado el color en su rostro y las heridas desaparecían rápidamente, sin embargo seguía cubierta de su propia sangre y Tonks se encargó de limpiarla con un hechizo.

Fleur le extendió una mano a cada una y ellas se acercaron con gusto, Gabrielle fue la primera en hablar.

—Jamás, escúchame bien, jamás en tu vida te atrevas a hacer una locura como esta Fleur Delacour, los torneos quedan totalmente prohibidos a partir de ahora para ti.

Ninguna mencionó nada más, Fleur estaba ahí, estaba viva y no había nada más de que preocuparse. Cuando todos parecían estar superando la conmoción sobre el asuntó de Fleur, un nuevo golpe llegó sin avisar.

Harry aparecía frente a todos, gritando desesperadamente. Tenía un fuerte agarre sobre Cedric. El cuerpo inerte de Cedric.

El chico que minutos atrás le había entregado la varita de su novia y que le había pedido disculpas por no lograr ayudarla a tiempo yacía sobre el pasto. Muerto.

Pudo escuchar a Fleur sollozar junto a ella, la abrazó mientras trataba de evitar que las lágrimas cayeran de sus ojos, la impresión de ver al chico tirado en la hierba, sumado a los gritos desgarradores de su padre que inundaban todo el lugar hicieron que un nudo se formara en su garganta. Trató de evitar una idea que cruzó su mente, pero el tener a Fleur entre sus brazos lo hacia imposible. Pudo haber sido ella. El cuerpo en el centro del lugar pudo haber sido el de su novia.

La sensación de que algo iba mal la llenó de nuevo, como si el tormento no se acabara aun y estuviera a punto de suceder algo más. Una voz en su cabeza le decía que volteara en una específica dirección. Harry era arrastrado fuera del lugar por Moody y su instinto le decía que fuera tras el chico.

Pasó junto a su primo y le pidió que fuera con su novia, solo confiaba en él y no estaba segura de lo que estaría a punto de suceder.

Siguió a ojo loco por el castillo, lo escuchaba discutir con Harry y entonces no dudo en intervenir, nuevamente algo le decía que las cosas estaban a punto de cambiar.

—Metiendo tus narices donde no te llaman Nymphadora—la voz de Moody se escuchaba diferente.

—Sé que algo está mal contigo y no dejaré que dañes a Harry o a nadie más.

—Yo ya he cumplido con mi trabajo, mi señor ha vuelto al fin.

Entonces lo entendió. No era Alastor quien estaba frente a ella, todo este tiempo alguien se había hecho pasar por él.

— ¿Dónde está ojo loco?

—Vaya, no sé a qué te refieres, estoy justo frente a ti—entonces su rostro empezó a cambiar y la persona frente a ella se dispuso a buscar algo por toda la habitación. Cuando no lo encontró se dirigió a Harry y antes de que pudiera hacer algo Tonks lo desarmó. En ese momento Dumbledore llegaba junto a Snape y Mcgonagall.

—Alastor ¿Qué haces?—Dumbledore trataba de averiguar que sucedía.

—No es él, alguien se ha hecho pasar por Moody todo este tiempo.