Capítulo 47

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—Algo anda mal—dijo Bellatrix—esto no debía suceder, tienes que salir de aquí—la mortífago miró a Hermione directo a los ojos, tratando de transmitirle confianza con ese gesto, acarició su mejilla delicadamente y después la estrechó entre sus brazos.

— ¿Qué está pasando? Siento como si te estuvieras despidiendo de mi—susurró la castaña.

—Se han apoderado del ministerio, no sé cómo pasó esto, pero no es bueno, mucho menos para ti o Potter—extrajo su varita de una de sus botas y haciendo un elegante movimiento apareció un pequeño bolso ante ella—tenía preparado esto para... bueno, no importa ya, pero aquí tienes todo lo que pudieras necesitar, llévate a Potter contigo y por favor no confíen en nadie.

— ¿Qué? Espera... yo... ¿qué vamos a hacer con Ron?

—Hermione, tienes que salir de aquí, ahora—Bellatrix señaló a su alrededor, la gente corría por todas partes y un zumbido crecía a cada segundo, como si una gran masa estuviera a punto de rodearlos—llévatelos a los dos, a donde sea, pero sal de aquí.

—Está bien, lo entiendo...gracias Bella, no sé cuándo te volveré a ver y yo... quiero que sepas que eres muy importante para mí—Hermione inclinó su cabeza y conectó su frente con la de la mortífago, quería decir más, hacer algo más, pero no fue posible.

— ¡Hermione!—gritó Ronald mientras se acercaba a ellas, claramente buscando proteger a la castaña.

Se abrazaron por última vez y un fugaz beso se plantó sobre la comisura de los labios de la menor, casi imperceptible y muy corto, pero con un gran significado.

Cuando Ron llegó a ellas, jaló la mano de Hermione y la alejó de ahí, en dirección a Harry, quien aún no entendía lo que estaba pasando. La sabelotodo miró por una vez más a Bellatrix y deseó que no fuera la última.

Justo cuando ambos chicos estaban por llegar a Harry, un golpe sordo se escuchó por lo alto, anunciando que las barreras que protegían la madriguera habían caído, las características cortinas de humo negro de los mortífagos no se hicieron esperar y rodearon la pista de baile.

Remus recorrió el último tramo rápidamente y tomando a Harry de los hombros, lo lanzó en dirección a sus amigos, quienes con un rápido vistazo de la situación, desaparecieron con un simple chasquido, guiados por Hermione.

Mientras tanto, Fleur guiaba a sus futuros suegros lejos de ahí, cuando su conversación se cortó inevitablemente, no hizo falta más que una sola mirada para que las chicas decidieran como actuar, la rubia no estuvo tranquila hasta que vio a los padres de su prometida desaparecer del lugar con la clara indicación de juntarse en Grimmauld place con Narcisa.

Tonks buscaba desesperada a Draco, sabía que el chico se había ido con Charlie, pero eso no le aseguraba nada, mientras tanto, fue testigo de la despedida de Hermione y su tía, lo cual sinceramente le sacó una lagrima, también vio a Remus aparecer en el momento más oportuno y a los chicos desaparecer a su vez. Todo sucediendo asombrosamente rápido.

Se unió con Bellatrix poco después de que los primeros mortífagos aparecieran y hombro con hombro comenzaron a atacar, Remus siguió su ejemplo y los tres defendieron su espacio magistralmente, era muy claro que los superaban en número y que la orden había sido tomada desprevenidamente, por lo tanto, no estaban dando el desempeño esperado.

Noquearon a unos cuantos de sus "compañeros" mortífagos y salvaron a otros invitados más, se desenvolvieron tan acordemente que se les olvidó un pequeño detalle, no eran los únicos en esa fiesta y lo recordaron hasta que los seguidores del señor tenebroso comenzaron a tomar rehenes.

Lista para esto. Fleur y Tonks.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora