Lista para esto. Fleur y Tonks.

Capítulo 16

  Llegaron a Grimmauld place a unas cuantas horas del amanecer, encontraron a Sirius y a Draco recostados en la sala de estar, se notaba que habían intentado esperarlos despiertos durante la noche y que habían fracasado durante la misión.

—Deberíamos despertarlos y que suban a sus habitaciones a descansar, ha sido una noche larga para todos—dijo Remus mientras se acercaba a Sirius y acariciaba su cabello en un intento de despertarlo— Hey canuto, hemos llegado, vamos a la cama.

El animago tardó un poco en procesar la situación, cuando parecía lo suficientemente consiente se apoyó en Remus y miró a ambas chicas.

—Tú debes ser Fleur, es un gusto conocerte—le extendió una mano a la rubia y ella la tomó educadamente—yo soy Sirius, si les parece bien charlaremos más tarde, estás en tu casa.

Se dirigieron hacia su habitación y dejaron a Fleur y Tonks junto a Draco, el chico seguía dormido en el sillón y ambas se debatían en despertarlo o dejarlo dormir ahí.

—Yo lo despertaré si te parece bien—dijo Fleur para acercarse al menor y al ver que su novia no opuso resistencia continuo con la tarea— Draco, Draco, vamos rubio teñido ¿no me has extrañado?

Draco se levantó inmediatamente al escuchar la voz de Fleur y corrió a abrazarla, ambos chicos permanecieron en su sitio por un buen rato y Tonks se extrañó de verlos así, sabía que se llevaban bien pero no era consciente de cuánto.

— ¡Por Merlín Fleur! Estábamos muy preocupados por ti. Tonks se estaba volviendo loca, no me dejaba ni un minuto en paz.

—Eso no es cierto—dijo Tonks—bueno tal vez un poco pero era para mantener mi mente ocupada.

—Tranquila, lo entiendo—dijo Fleur mientras la abrazaba por la cintura—perdón por todo y gracias Draco por cuidar de ella, sé que no lo vas a aceptar pero estoy segura de que lo hiciste.

—No tenía opción, iba a acabar con todo si no tenía un ojo encima.

Tal vez las palabras de Draco sonaban un tanto exageradas, pero Tonks sabía que sus intentos por alejar su mente de los pensamientos referentes a su novia habían pasado factura, los muebles de la casa habían sido reacomodados de cinco formas diferentes durante su corta estancia en la mansión Black, algunas de las cenas familiares no habían terminado tan bien y el hecho de que no se despegara del rubio casi para nada no había pasado desapercibido para los demás.

—Creo que no es momento para hablar sobre mi comportamiento de este verano, debemos descansar un poco, vamos, todos arriba por favor.

Subieron las escaleras hacia el segundo piso los tres juntos y Draco se despidió de ellas para dirigirse a su habitación.

— ¿Dónde dormiré yo?—preguntó Fleur.

—Puedes tomar cualquiera de las habitaciones si gustas... o puedes dormir conmigo si no tienes problema—al ver que Fleur no contestó de inmediato, Tonks se puso nerviosa—tal vez fue una tontería preguntártelo, por supuesto que quieres tu propio espacio y yo no pensé bien las cosas, disculpa.

—No, está bien de hecho, quiero dormir contigo si aún te parece bien.

Tonks asintió y tomó de la mano a su novia para guiarla hasta su habitación, las cosas de Fleur se habían quedado en la entrada y la metamorfomaga le ofreció uno de sus propios pijamas, le indicó donde estaba el baño y mientras ella se cambiaba Tonks hizo lo mismo, ordenó un poco sus cosas y se sentó en una orilla de la cama a esperar.

Al salir del baño Fleur se recargó en el marco de la puerta con los brazos cruzados, el pijama que le había prestado su novia consistía en una playera ancha y unos shorts, muy similar al que la propia metamorfomaga vestía en esos momentos.