Lista para esto. Fleur y Tonks.

Capítulo 45

  El ambiente dentro de la casa cobró vida en cuanto se aseguraron que el estado de Fleur había mejorado. La orden se enteró esa misma tarde y a petición de Hermione, permitieron a Fleur descansar los siguientes días, no sin antes hacerles prometer asistir a la reunión del sábado en la madriguera, donde Molly organizaría una cena por el cumpleaños de Harry.

No pusieron trabas y aceptaron gustosos, tenían más días para disfrutar y para organizarse, en realidad solo disfrutaban un momento de paz.

Hermione llegó ese mismo día, dispuesta a pasar el mayor tiempo posible junto a ellos, nadie se lo impidió, ella también era considerada parte de la familia. Por eso, Remus tenía ya establecidas las habitaciones de todos, estaba seguro de que eran aquello que los muggles solían llamar una "familia muégano" todos siempre juntos, a donde fuera que se requiriera.

Fleur se desapareció por la noche, rondando por los cuartos de los demás y pasando un sospechoso tiempo lejos de Tonks, la metamorfomaga no se preocupó por eso, al contrario, estaba segura de saber lo que su chica tramaba y ella misma se dedicó a lo suyo.

—Remus, necesito tu ayuda—dijo Tonks entrando abruptamente en la habitación del licántropo.

Estaba convencida de que él era la opción correcta para ayudarla, confiaba en él, en su discreción y en que guardaría silencio, las demás personas en su familia armarían mucho alboroto.

— ¿Ahora qué hiciste?

— ¿Qué? No he hecho nada—respondió indignada— ¿Por qué pensaste eso?

—Simple, eres la sobrina de Sirius, siempre estoy preparado para cualquier cosa.

— ¿Ah sí?

—Si—dijo seguro—siempre tengo un plan para cualquier tontería que se te ocurra.

— ¿Estás seguro de eso?

—Totalmente ¿quieres ponerme a prueba?

El reto era muy bueno como para dejarlo pasar, tenía un pensamiento positivo de que ganaría esta vez y decidida, soltó el motivo por el que estaba ahí.

—Necesito un anillo para pedirle a Fleur que se case conmigo.

Remus levantó una ceja, se puso de pie tan arrogantemente como pudo, se dirigió a su mesita de noche y del primer cajón extrajo una pequeña caja azul de terciopelo. Se la tendió a una sorprendida Tonks y a su vez se burló de ella.

— ¿Eso es todo?

— ¿Qué? ¿Pero cómo? —Nymphadora la tomó aun esperando que fuera una broma, pero dentro encontró un hermoso anillo de compromiso, tenía pequeñas piedras de colores entrelazadas con delicados ornamentos de plata, era simplemente perfecto— ¿De dónde lo sacaste? ¿Desde cuándo lo tienes?

—Me lo dio Sirius—antes de que la metamorfomaga replicara, comenzó con su historia—era de su madre, se suponía que él tendría que entregárselo a su esposa cuando llegara el momento, pero ambos sabemos cómo terminó eso.

— ¿Te lo dio a ti?

—Algo así—aceptó Remus— la realidad fue que no podíamos casarnos, hablamos de ello por mucho tiempo, me dio el anillo como una promesa y me hizo jurarle que se lo daríamos a nuestros hijos en su momento. No encuentro alguien mejor que tú para tenerlo.

—No puedo aceptarlo.

—Nymph, me parece perfecto que se lo des a Fleur, eres lo más importante que tengo, te he visto crecer y está claro que yo no tendré un hijo a quien entregárselo. Honra la memoria de Sirius al usarlo, estoy seguro de que él también lo habría querido así.