[𝐁𝐒𝐃] 𝓟𝓮𝓸𝓹𝓵𝓮 𝓒𝓱𝓪𝓷𝓰𝓮 | DazAku

9 - La Era Oscura

Esta pequeña historia toma lugar cuando Dazai iba a tercero. ¿Hace cuánto?, te preguntarás. Pues, nada más y nada menos que hace tres años ya.

Era la primera semana después de vacaciones de Navidad, después de haber estado con su hermano. Posiblemente, una de las peores navidades que hubiese vivido hasta entonces. Los recuerdos de aquella época son borrosos, y por esa razón hacía referencia a aquellos días como La Era Oscura.

A la hora del recreo, en el patio, Akutagawa esperaba a su maestro y amigo, expectante de un nuevo entrenamiento.

-Buenos días, Dazai.

-Hoy no tengo ganas de entrenar.

-¿No? ¿Por qué no?

-¿Acaso estás ciego? Debo mantener el brazo en reposo.

El chico lucía algo más deteriorado de lo normal. En su cara medio vendada, se podían ver algunos rasguños, y su brazo izquierdo estaba roto. El joven Akutagawa pensó que esto era resultado de un enfrentamiento.

-Te has metido en una pelea, ¿verdad? ¡Deberías haberme avisado! Podría haberte ayudado.

Esas inocentes palabras que le dijo, desde su completa ignorancia, penetraron en la piel del ya malhumorado joven como si fueran uno de los peores venenos. Un veneno que recorrería sus venas y sacaría la parte más podrida de él.

-Jajajaja... ¿Cómo podría ayudarme alguien como tú? Solo mírate, de un empujoncito ya acabarías en el suelo.

-Eso no es cierto.

-¿Quieres que te lo demuestre?

Dazai le asestó un golpe seco en el abdomen. El niño se cayó al suelo, privado de aliento.

-¿Ves? Aún eres demasiado débil.

Aún en el suelo, Akutagawa comenzó a toser, y algunas gotas de sangre cayeron de su boca.

-¿Eh? Eres tan débil que ni siquiera puedes aguantar un pequeño golpe como ese. Esto es lo que pasa cuando hablas más de la cuenta.

Le dio una patada.

-¿Cómo piensas proteger a tu hermana así? ¿Cómo piensas defenderte? ¡Levántate y haz algo!

-Dazai, me volveré más fuerte, lo prometo...

Él continuó con los golpes.

-¡CÁLLATE! No importa lo que digas si sigues siendo tan débil. Si no puedes aguantar, entonces ¿qué vas a hacer cuando los adultos, los verdaderos demonios, vayan a por ti? ¡¡Contéstame!!

-¡Para! -decía entre llantos-. ¡Me haré más fuerte, lo prometo!

Esta escena, en realidad, horrorizó al chico envuelto en vendas. Esas voces, esos gritos de auxilio lo alteraron. Eran los mismos que escuchaba cuando estaba con su hermano, solo que esta vez la voz no era suya, sino de otra persona. Esto terminó por apagar el último atisbo de cordura que le quedaba y desencadenó en él un ataque de pánico que se tradujo en más violencia.

-¡CÁLLATE, CÁLLATE, CÁLLATE! Debes aguantar, ¡SÉ FUERTE!

El chico de pelo negro ya no respondía.

-¡¡Eh!! ¿¡Qué haces!?

Chuuya, que como siempre llegaba tarde, corrió a separarlo en cuanto vio aquella escena. Dazai se rio de forma maníaca.

-¿¡Has perdido la puta cabeza o qué!?

Algunos profesores fueron allí también. Dos de ellos se llevaron a los chicos, mientras que los demás se quedaron con Akutagawa.
Siendo arrastrado por el profesor, Dazai se volteó para mirarlo. Yacía inconsciente en un charco de sangre. ¿Estaba muerto? No pudo sentir nada más que un profundo vacío en su interior. ¿Qué había hecho? ¿Por qué tuvo que conocerlo? Si tan solo aquel día no hubiera ido al baño, si él no lo hubiera seguido... Haberlo conocido había sido su perdición. Y ya no había vuelta atrás.