IV

1.9K 222 41
                                    

Tokio antiguo Sengoku.

12:00 am.

En las tierras del Oeste, Lady Irasue sonreía al leer aquel pergamino del Kami del destino pues todo estaba saliendo como esperaba y pronto podría llegar a emparejar a su hijo con una yokai.

- Todo está resultado bien - dijo sonriendo - Ahora solo falta que esa niña abra nuevamente el pozo -

Las puertas se abrieron dejando ver al pequeño yokai sapo entrando a toda prisa.

- ¡¡Mi Lady!! - gritaba.

- ¿Qué sucede? - preguntaba sin interés.

- La humana del hanyō está aquí y quiere verla - respondió con nerviosismo.

- Deja la pasar - dijo con simpleza.

Jaken se asombro ante la simple respuesta de la Lady del Oeste, pero no sé atrevió a contradecirla y solo obedeció saliendo de la habitación, poco después entro aquella ex protectora de la perla, Kikyō se mostraba serio y con un porte que solo pocos tenía.

- ¿Qué quieres? - preguntó sin mirarla.

- Mi Lady - dijo haciendo una reverencia - Solo he venido a confirmar que los dos niños a los cuales me mandó a cuidar han hecho el pacto -

- ¿A qué te refieres con pacto? - preguntó con interés.

- Kohaku le ha prometido a la pequeña Rin pedir su mano y casarse - respondió.

- Esa si que es algo bueno - dijo sonriendo - Cambiando de tema veo que tú también estás premiada -

- ¿Mi Lady? - preguntó confundida.

- La amiga de tu encarnación vino a confesarme que ella espera un hijo de ese hanyō al que tanto amas - respondió sonriendo - Y veo que tú también lo estás -

- Eso quiere decir que estoy embarazada de Inuyasha - dijo con emoción.

- Recuerda que no eres la única que espera un hijo de ese hanyō y si por alguna razón esa humana regresa tu querido hanyō volverá con ella dejándote - mencionó - Así que te aconsejo que hagas que te marque -

Kikyō miró a Irasue con un leve sonrojo y una leve tristeza, ya que Inuyasha nunca la marcaría por el amor que tiene hacia su encarnación.

- El nunca lo hará - dijo.

- Hump todos caen - comentó - Solo dale este té y verás cómo su celo aparece dejándolo al borde de su calentura que sin desearlo te marcará -

- ¿Acaso usted? - preguntó curiosa.

- Nunca - respondió - Cuando me entregué a Inu No Taisho lo ame más que a nadie en la vida y dejé que me marcará, pero ese maldito me engaño con esa humana al final no me importó por qué me dió lo que más quise un hijo Sesshomaru es la creación perfecta de mi y de su padre -

- ¿Entonces como sabe que esto funcionará? - preguntó confundida.

- Porque así como tú muchas vinieron a mi para hacer que sus parejas las marcarán aún sino querían - respondió - Dáselo esta noche de luna llena -

Look At Me (看著我).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora