C3. Sorpresas.

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—¡Este lugar es increíble!—levanto la mirada un segundo y una extensa sonrisa se abre paso en mis labios cuando me encuentro con la mirada ambarina de Danna.—¿Qué pasa…?—murmura.

—Nada.

—¿Entonces por qué me estás mirando así?—cuestiona.

Me rio en voz baja antes de llevar la copa de agua a mis labios.—No te estoy mirando de ningún modo…—anuncio alzando una de mis cejas.

Una risita cargada de nerviosismo se hacen presente en su rostro y niega lentamente.—Claro.

—Es que la verdad, eres perfecta.—respondo encogiéndome de hombros.—Aunque…eso ya lo sabes, no es que sea nada nuevo… ¿no?

—Te amo.—susurra sin dejar de mirarme.—Te amo como no tienes ni idea…

—No la tengo, es verdad.—pausa.—Pero sí puedes estar completamente segura que te amo más que a mi vida entera…y no sólo a ti…también al bebé que llevas en tu vientre…

—Todavía no me lo creo…—murmura.—Chris…

—Tampoco me lo creo.—admito interrumpiéndola.—Es que es algo realmente…increíble. Que de algo tan grande y tan fuerte como nuestro amor nazca algo tan pequeño y frágil como nuestro bebé…

—Si continúas diciendo estas cosas terminarás por hacerme llorar.—protesta y un segundo después una risita escapa de sus labios.—Olvídalo, ya lo conseguiste…

—No era mi intención…

—Lo sé.—murmura.—Pero no logro controlar  mis emociones.

—¿Esa es la parte no tan buena del embarazo, no?—inquiero y ella se ríe en voz baja.

—Supongo.

—Escucha; tal vez ahora mismo te suene como algo realmente loco…—pausa.—Pero…creo que podríamos, ya sabes, llevar ese pequeño plan que teníamos desde hace mucho tiempo…
Danna suspira.—¿Cuál de todos?—pregunta alzando una de sus bien definidas cejas.

Me  rio.—Adoptar a nuestro bebé perruno.—los ojos de Danna se abren con total sorpresa y una risita escapa de sus labios.

—¡Dios, sí!—responde de inmediato.—¡Tenemos que ir por Angus!

—¿Era en serio lo del nombre?—cuestiono. Ella asiente.

—Pues claro que sí.—asiente.—Dijiste que te gustaba y es un hombre lindo, corto y sencillo. ¡Es perfecto!

—Tan perfecto como tú.

—Te amo.—susurra sin dejar de mirarme.

—Te amo.

—Y te echaré muchísimo de menos…

—También te echaré mucho de menos.—anuncia.—Pero…lo hemos hecho antes, mi amor.—hace una pequeña pausa.—Son sólo unos días estaremos bien…

—Lo sé…es sólo qué…

—Nada malo va a pasar, Chris…—me sonríe. Y su sonrisa es tan grande que me brinda toda la seguridad que me hace falta en este momento.—Lo prometo. Sólo confía en mí…

—Confío en ti…

—Entonces estaremos bien.
 

 

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ALWAYS YOURS #3 (Saga STARVING)|Christopher Vélez(Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora