back to you, again - wilmon//young royals [DESPUES DE LA TEMPORADA 1]

II. less chances

era la última clase del día para wilhelm. matemáticas. tenía buenos recuerdos de esa clase en concreto. era una de sus materias favoritas.

la clase acabó rápido. wilhelm se dirigió rápido al patio, con la esperanza de que felice estuviese allí con buenas noticias sobre su pequeño trato.

buscó a la chica por todos lados, mas no la vio. en cambio, si vio a alguien que llamó su atención. simon.

sabía que tratar de acercarse a él sería una pérdida de tiempo, era más que obvio que sus guardaespaldas no le dejarían y, además, no tenía claro si el chico seguía sin ganas de hablarle.

lo miró desde donde se encontraba esperando a felice, con la esperanza de que se girase y fuese hacia el. que todo fuese como antes. y en un momento dado, simon giró la cabeza ya que sentía una mirada en la nuca, su sangre se congeló al ver a wilhelm. no quería saber nada de él, simon no sabía si estaba más enfadado por lo que había pasado antes de navidades o por lo que sara le había dicho ayer. tal vez le dolía tanto por que quizá sara no estaba equivocada.

quitó la mirada del príncipe cuando éste le saludó. siguió andando hasta la parada del bus, tenía la tonta idea de que quizás éste iría detrás de él y le explicaría todo. cosa que no pasó.

wilhelm lo vio marcharse, y sintió impotencia por no poder ir detrás de él e intentar arreglar las cosas. miró hacia todos lados, intentando buscar a felice con la mirada. no hubo suerte.

[...]

—alteza, su amiga felice le ha traído esto —habló uno de los guardas que custodiaban la puerta del cuarto del chico—. dice que son galletas recién hechas, insistió en que las abriera usted.

—gracias.

el guarda cerró la puerta y wilhelm no tardó mucho más en abrir el paquete de supuestas galletas.

sonrió al ver el contenido. felice era sin duda asombrosa. le había conseguido el teléfono móvil en menos de 24 horas. vio que había un sobre dentro del paquete.

"wilhelm,

no he podido ir a la hora acordada ayer, estuve hablando con sara sobre lo que vio ayer ya que ayer no me cogió el teléfono cuando la llamé.

no te alteres por lo que te voy a decir, pero sara se lo contó a simon. yo lo siento de verdad, intenté hablar con ella antes de que le contase algo, pero al parecer fue tarde.

tienes el móvil dentro de la cajita, su pin también está ahí. espero que te sirva y podáis hablar.

ah, también me he enterado de que tus ventanas no están selladas, si no que tienen una llave ora abrirlas. al parecer, tus guardaespaldas tienen una cada uno. si me consigues una puedo conseguir una copia para ti.

espero que te haya ayudado, perdón por lo de sara otra vez:(

felice."

no perdió tiempo. añadió el número de simon en su teléfono nuevo, no sin antes añadir el de felice y darle las gracias y decirle que su idea le había parecido algo complicada pero si salía bien podría ser clave.

sabía que en breves le llamarían para cenar, por lo que decidió llamar a simon luego de la cena. además debía idear una estrategia para quitarle la llave a su guardaespaldas.

ni diez minutos pasaron hasta que llamaron a la puerta para avisarle que debía ir a cenar. wilhelm se aprovechó de ésto.

—me siento mal, ¿podría alguien traerme la cena?

—¿que le ocurre, su alteza?

—tengo dolor de cabeza, si pudiese alguien traerme una pastilla se lo agradecería.

—ahora mismo, señor.

oyó los pasos apresurados de uno de sus guardaespaldas. poco tardó en llegar con una bandeja con la cena y una pastilla.

—ahí tiene señor. ¿necesita algo más?

—¿puedes abrirme la ventana? hace mucho calor en esta habitación.

el guardaespaldas pareció dudar, pero al final cedió, sacando una llavecita de su bolsillo e introduciéndola en una mini cerradura que wilhelm no había visto. había pensado rápido en una distracción antes de que su guardaespaldas volviese; vómito falso.

—mierda —salió corriendo hacia el baños, imitando arcadas. obviamente el vómito falso ya estaba preparado.

un poco de champú, mascarilla para darle color marrón y como tropezones uso un bizcocho que no se había comido en el desayuno.

—llamaré a la enfermera, ahora vuelvo.

el guarda salió del cuarto y wilhelm aprovechó para cerrar la ventana, coger la llave y tirar de la cisterna del baño para ocultar sus pruebas.

para cuando llegó la enfermera, ésta solo le recomendó descansar, ya que quizá se debía a estrés. estrés fingido claro.

marcó el número de simon con ansia. dos timbres fueron suficientes para oír la suave voz del chico del otro lado del teléfono.

—¿sí? al habla simon.

—extrañé tu voz.

simon, del otro lado de la línea, se tensó.

—wilhelm.

—exacto. simon quiero solucionar las cosas, sé que no actúe bien, pero era lo que en ese momento mi familia necesitaba, al igual que yo. no espero que lo entiendas, porque nunca lo harás, pero si quiero que sepas que quiero luchar por ti, por que no te mentí cuando te dije que todo el mundo está hecho de metal, pero tú, tú eres diferente, tú me gustas de verdad.

—wilhelm, no puedo seguir haciendo esto, yo también tengo prioridades al igual que tú. entiendo que antepongas la corona a mi, pero yo también merezco tener la oportunidad de ser feliz, sea contigo o sin ti.

y sin más, la llamada se cortó.

...

holi
aaaaa gracias por las 300 lecturas en menos de 3 días!!
muchísimas gracias enserio
siempre pueden comentarme que les está pareciendo la fic e ideas (en mensajes privados éstas últimas)
enserio muchísimas gracias a todos los que están dándome tanto apoyo!<3

(970 palabras)