VI. new mates

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después de tener su brillante idea, wilhelm decidió comentarla con simon primero. si de veras quería ganarse su aprecio otra vez sabía que no debía ocultarle nada.

sorprendentemente pudo dormir más de cinco horas seguidas antes de que sonase su despertador. se levantó de la cama, dispuesto a seguir su rutina matutina.

en cuanto estuvo preparado, salió del cuarto y vio a sus guardaespaldas ya listos para llevarlo a su clase. avanzó por los pasillos con bastante rapidez ya que iba tarde.

entró al aula, se sentó en el mismo sitio de siempre y esperó a que la clase empezase. pero no fue así.

en su lugar, la directora entró en el aula, siendo seguida por una chica y un chico pelirrojos. por alguna razón a wilhelm le sonaban de algo.

—buenos días, clase.

los alumnos se levantaron de sus asientos para saludar a la directora.

—gracias por sus cordiales saludos. vengo a presentarles a sus nuevos compañeros, a los que espero que reciban con la misma cordialidad —se giró hacia ambos alumnos y susurró—: preséntense.

la chica tomó el control de la situación en ese momento.

—encantada, clase. yo soy candice lavesque —wilhelm notó el acento francés de la chica, sabía que había oído esa voz antes—. y el es mi hermano, yves.

—encantado —murmuró el chico.

—bien, pueden tomar los asientos libres al fondo. ahora si, que comience la clase.

[...]

las clases habían acabado por fin. wilhelm estaba tranquilamente estirado en su cama, hablando por teléfono con simon.

—quiero verte —wilhelm sonrió del otro lado de la línea. el también quería ver a simon.

—yo también quiero verte.

—¿y a que esperas para volver a escaparte por la ventana, principito?

—¿me estás retando? —la sonrisa en el rostro de wilhelm era cada vez más grande.

—tómalo como quieras.

—¿que me darás si voy? —una risilla por parte simon hizo reír también a wilhelm.

—te recuerdo que ya no estamos juntos, galán.

—por el momento.

un silencio al otro lado de la línea se hizo presente. de repente solo se oyó una risa escandalosa.

—¡no te rías! sabes que voy a lograrlo porque tú quieres lo mismo que yo.

una carcajada volvió a oírse, haciendo reír a wilhelm también.

—¿quieres que le diga a rosh que pase a por ti? para que su alteza no tenga que coger el transporte público.

—cuando llegue ahí nadie te va a salvar de mis cosquillas, simon.

ambos rieron.

—está bien, está bien. le diré a rosh que te recoja dentro de una hora, ¿está bien?

—genial, gracias. nos vemos.

el príncipe colgó la llamada con una sonrisa en la cara. sin duda estaba demasiado enamorado de él.

arregló su cabello y su vestimenta. revisó que todo estuviera en orden antes de irse y pidió a sus guardaespaldas que le trajesen la cena a su habitación, para luego recibirlos con una sonrisa inocente. ni siquiera tocó la comida ya que probablemente cenaría en casa de simon.

salió rápidamente por la ventana, con cuidado de no caerse, y se dirigió a la entrada de hillerska, justo donde paraban los buses.

estaba tecleando un mensaje cuando de repente una voz femenina se oyó a sus espaldas.

—¿el príncipe está esperando un autobús? que moderno —allí estaba candice, con los brazos cruzados y una sonrisa ladina.

—dios, me asustaste.

—ya veo, te quedaste pálido —la chica emitió una risa dulce— ¿acaso te estás escapando? —dijo, mirándolo con una ceja levantada. wilhelm volvió a palidecer, haciendo que candice volviese a reír —tu tranquilo, yo no diré nada.

—gracias, supongo. aún que me lo debías después de casi provocarme un infarto antes.

ambos rieron.

—soy candice lavesque, encantada —ofreció su mano al príncipe para que éste la estrechase.

—wilhelm, un placer.

en ese instante una moto llegó a donde estaba el futuro monarca. rosh se quitó el casco y le hizo una seña con la cabeza para que subiese.

—ha llegado mi autobús —una sonrisilla falsa apareció en el rostro de la chica mientras el príncipe hablaba.

—adios, wilhelm.

sin más, se giró y se fue en dirección al edificio.

—eso ha sido lo más raro que me ha pasado en mucho tiempo —admitió el príncipe, montándose en la moto de rosh.

el camino fue bastante rápido a decir verdad. estaban en enero, por lo que el tiempo no era el mejor del mundo y hacía nada acababa de empezar a nevar.

estaban acabando de cenar. la madre de simon acababa de llegar y rosh se marcharía en un par de horas y llevaría a wilhelm de vuelta a hillerska.

—hmm... estos spaghetti están riquísimos —admitió el príncipe.

—son mi especialidad.

—se nota. por cierto, ¿has visto a los nuevos?

—¿hay nuevos en hillerska? si estamos a mitad de curso, no tiene sentido.

—son dos gemelos, candice e yves creo. al parecer le he caído bien a candice, ya veréis cuando se entere que no me van las chicas.

una carcajada de parte de rosh y simon se oyó. wilhelm se sumó también.

—¿candice e yves? me suenan de algo. ¿como se apellidan? —preguntó rosh.

—oh, joder. me dijo su apellido pero tengo mala memoria.

—es dory version príncipe —farfulló simon ganándose una mirada de reproche por parte del príncipe y una risa por parte de rosh.

continuaron la cena con la misma actitud que antes. hasta que el teléfono antiguo de wilhelm comenzó a sonar.

"oskar guardaespaldas" apareció en la pantalla. oh, oh.

—¿diga?

—alteza, ¿dónde se encuentra? —preguntó del otro lado de la línea.

—en mi habitación, ¿por qué la pregunta?

—porque usted no está en su habitación.

...

holaa!
CASI 3K!!!!
gracias gracias gracias

preguntita: ¿estáis leyendo algún libro actualmente? yo sí, estoy leyendo dune de frank herbert:)

¿que os está pareciendo la novela?

muchas gracias por todo el apoyo, los comentarios, los votos... GRACIAS<3

solo quería comentaros que ahora comienza el drama de verdad y que no todo es lo que parece 👀

[990 palabras]

back to you, again - wilmon//young royals [DESPUES DE LA TEMPORADA 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora