CAPÍTULO VEINTINUEVE - VERDADES OCULTAS

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Mihail

La vida es un juego de azar donde diariamente se toma decisiones sin saber si los resultados de ellas pueden elevarte a la cima o hundirte en el precipicio. He jugado al azar por años en mis negocios y en mi vida criminal intentando que cada movimiento con mis fichas me sirvan para obtener algún beneficio aunque el último movimiento que pretendía dar me jugó en contra ya que no pude conseguir ninguno de mis dos planes.

El primero tener a Onur Yıldırım frente a frente junto a Arthur Kavanagh para quitarme a dos pájaros de un tiro de arriba ya que aún no he reaccionado por lo que hicieron los turcos con el casino Scorpion y aunque permanecí en silencio por mi cabeza nunca desapareció el deseo de destruirlos junto a Arthur por no pagar como debía el hecho que le quitara a su hermano de arriba entregándome a su hermana.

Y segundo...joder. Mi peor error ha sido ella que por llevar ese maldito apellido me he empecinado en hacerla sufrir aunque he tenido lapsus emocionales dejándome guiar por el hombre que soy y no por el criminal en que me convertí. Ese movimiento de mandar a matarla junto a Macon me tiene con la bilis en la boca por no tener respuesta de Denzel el vory a cargo de la misión.

Alzo la vista cuando Jasón entra al despacho en la fortaleza de Moscú, ya tenemos un día en el lugar sin tener respuesta de lo sucedido. Todos se han mantenido en silencio cosa que agradezco por que como estoy ahora mismo es para sacar la furia con quien sea.

—Encontraron varios cuerpos calcinados cerca de los helicópteros— habla—y una mujer con quemaduras severas ahogada en el río — explica.

— ¿Ya los identificaron? — cuestiono.

—No — respira hondo —, las autoridades del lugar aún no logran reconocer los cuerpos.

— ¿Si iban por mí porque estaban en Washington? — pregunto sin entender nada.

¿Qué tenían Macon y Eleora en común para ir solos a Washington?

— ¿Qué hay en Washington? — cuestiono.

—La mafia ítalo-estadounidense tiene negocios ahí pero no creo que Macon nos traicionara — lo miro—, hablé con los hombres de la italiana y me confirmaron que la señorita salió a un asunto personal.

¿Qué asunto personal hay entre Macon y Eleora? Acaricio mis sienes sin entender una mierda de lo que pasa. Necesito tener a Eleora frente a mí, para abrazarla, llenarle la cara de besos y para...

—La amiguita — me levanto rápido de la silla.

Detengo mi movimiento pensando en que poner al tanto a la amiguita sobre la posible razón de que Eleora y Macon estuvieran juntos en la ciudad de ella puede poner a la endemoniada en más problemas y con toda la mierda de vida que le ha tocado vivir no estoy para seguir provocándole más.

Vuelvo a sentarme en mi sillón respirando profundo dejando caer mi cabeza en el escritorio sin saber cómo mierda proceder, estoy agotado, estoy cansado y estoy que ni yo mismo me aguanto pensando en que quizás Eleora salió ilesa de las manos de mis hombres cosa que me hace prender muchísimo porque para salir ilesos de los vory hay que ser muy fuerte y si sucedió así debo entrenar mejor a mis hombres por ser débiles por dejarse ganar de una mujer sin embargo si la mataron sería algo que nunca me lo perdonaría.

Me levanto con las intenciones de ir a la habitación de la mujer que no tengo idea de cómo se llama ni me interesa pero necesito que despierte para que me diga como mierda llegó Eleora a las manos de Damon Martinelli.

Entro en la habitación equipada con todos los equipos médicos necesarios para garantizar la salud de la mujer, la enfermera que tiene asignada me repara por unos segundos antes de sonrojarse y esquivar la mirada.

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