PRÓLOGO

18.5K 787 175
                                    


Venecia, Italia.

El ser humano se mueve por emociones, impulsos, sensaciones y tentaciones que le cala cada fibra de su cuerpo provocando que se deje llevar de los instintos que le exigen romper reglas, mandatos y normas con el fin de conseguir lo que quiere.

Un gran ejemplo de esto se encuentra en el libro que rige a la mayoría de los habitantes del planeta con sus mandamientos exclusivos para conseguir la vida placentera en la tierra como también la vida celestial eterna, narrando en su primer libro dentro del gran libro llamado Biblia el pecado cometido por la primera mujer sobre la tierra nombrada Eva que llevándose de la emoción, impulso, sensación y tentación probó del fruto prohibido arrastrando con ese acto a la perdición a todos sus descendientes.

Muchos relacionan la manzana con ese fruto prohibido viéndolo como el símbolo del pecado sin saber que el verdadero significado que carga ese fruto es la gran caída del hombre porque si algo hay que admirar de ese evento no es solo el pecado que los desterró del paraíso sino el poder de la mujer para hacer caer al primero y único hombre que habitaba en la tierra coronándose para muchos como pecadora trayendo con su decisión placer, amor y sufrimiento, pero para mí está coronada como la mujer capaz de dar la primera mordida a la pasión, poder y peligro.

Llevo la manzana a mi boca dando una mordida que espero que sea el inicio de momentos llenos de pasión, de eventos que me den poder y de situaciones llenas de peligro porque siendo quien soy apartada desde niña del mundo donde mi padre es el rey es momento de que rompa las reglas viviendo por primera vez en ese mundo que cargado de todo lo que mueve al ser humano en mi caso solo quiero obtener de ese ambiente la libertad de la que estoy ansiosa por disfrutar.

Mastico el fruto en medio de la oscuridad del hotel rompiendo la sugerencia de no comer frutas en la noche, me gusta el ambiente tenue que me excluye de la realidad a la que estoy a punto de enfrentarme y saboreo el néctar que cae en mis labios reconociendo que esto es una locura que provocará la ira de mi progenitor desde que sus hombres les informen que escapé de ellos para volar a Venecia.

Ser la hija del líder del esqueleto de las mafias en el mundo Damon Martinelli es un lazo que me ha mantenido alejada de casa siempre por seguridad y entiendo las decisiones de mis padres de excluirme de sus negocios porque con el solo hecho de tener a un padre despiadado, cruel y sanguinario es suficiente motivo para querer protegerme con los enemigos que lo acechan para destruirlo escondiéndome del resto como también de sus propios métodos de torturas porque es tan inhumano que sus acciones maléficas revocarían sobre mi si viviera en Sicilia por ser la ciudad de la mafia Cosa Nostra que lidera mi padre.

Soy la única heredera de uno de los clanes más sádicos, crueles e inhumanos que puedan existir actualmente en el mundo siendo una de las más peligrosas de las mafias italianas razón por la cual tuve que hacer uso de mis técnicas aprendidas de mis escoltas personales haciendo una visita al país siendo esta una de mis tantas decisiones de rebeldía por mi deseo incesante de querer volver a casa.

Mi última visita a este país que significa tanto para mí fue cuando tenía once años, hace exactamente diez años que no venía por órdenes de mi padre estudiando cada grado de estudio en un país diferente por seguridad y tomar la decisión de viajar después de tanto tiempo como regalo a mi cumpleaños número veintiuno me hace percibir que será mi roída a la manzana de la mafia que me dará conocimiento entre el bien y el mal exiliándome de la vida que estoy cansada de vivir con cadenas invisibles en manos sin poder tomar mis propias decisiones.

Un mensaje entra en mi celular provocando la sonrisa al leer la pantalla, respondo apresurada para mantener a mis amigas en Estados Unidos tranquilas y me levanto del sofá en el que estaba sentada desde que llegué esperando que mi padre venga por mi porque estoy segura que en cualquier momento llegará.

ÉXTASISDonde viven las historias. Descúbrelo ahora