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Un ratoncito

POV CALLE

-¿Hay algún problema?- me preguntó el abogado.

-No ninguno- respondí tomando aire, volviendo a tomar la pluma y finalmente firmando.

-Perfecto, puede pasar señorita Garzón-

En ese momento Poché se levantó le apretó la mano a su papá buscando apoyo y pasó a firmar. Oficialmente no estábamos casadas.

-Eso sería todo por mi parte, queda lista la anulación del matrimonio.

-Gracias- dijimos todos en la sala.

Me quedé platicando con mi abogado y no vi en qué momento la sala había quedado vacía, salvo por mi presencia y la de mi abogado.

-Quedo pendiente cualquier cosa Daniela- dijo saliendo.

Salí de la sala mirando hacia todos lados en busca de Poché, pero tal parece que se había ido tan pronto tuvo oportunidad.

-Es obvio que ya se fue, o ¿Querías que viniera a terminar lo que estaban haciendo en el baño?-

-No estábamos haciendo nada en el baño Juliana. Ya vámonos que mi papá debe de estar vuelto loco con las niñas.-

Nos fuimos directo al campo de golf para encontrarnos con mi papá y con mis hijas.

-¿Sigues casada?- me preguntó mi papá a penas me vio.

-Obvio no.-

-Te lo dije, me debes esta apuesta Germán- dijo Juliana a mi papá.

-¿Fueron capaces de apostar sobre eso?-

-Si sirve de algo yo siempre confíe en que lo ibas a hacer hermana.-

-Son increíbles- dije caminando en dirección a dónde estaban mis hijas jugando.

-Mamiiiii- corrió Andrea a abrazarme y al verla, Ainara se le unió.

-¿Si le diste un beso a mi mamita de mi parte?-

-Yo creo que le dio más que eso bebé.- Llegaba Juliana por detrás.

-¿Le diste más que eso?- preguntó mi papá.

-Le di el besito que me pediste mi amor- Le dije a mi hija ignorando a mi papá.

-Hija deberíamos de empezar a hablar del talento de tus hijas en el golf, Andrea se parece mucho a Poché, por más que intente enseñarle sus tiros no llegan a ningún lugar. Pero Ainara podría ser un buen reemplazo ya que tú nos abandonaste, esa niña es la mejor para seguir nuestro legado.-

-¿Viste Andy? Soy la mejor.- Decía Ainara burlándose de su hermana.

-Ainara, no te burles de tu hermana, las dos tienen talentos distintos, no tienen que ser buenas en las mismas cosas.-

-Por eso yo dibujo más bonito que tú Aini, yo soy como mi mamita Poché.-

-Las dos son muy talentosas, mejor recojan sus palos de golf para regresar a casa.-

Una vez mis hijas habían recogido sus cosas, nos despedimos de mi papá y de mi hermana, las acomodé en sus sillas en la camioneta y emprendimos nuestro camino a la casa.

-Mami, ¿Le podemos marcar a mi mamita?-

-Si, ¿les parece llegando a la casa?

-¡No!  Ya queremos hablar con ella.

-Ok- contesté soltando un suspiro, marcando su número para que se conectara al sistema de audio de la camioneta.

-Hola ex esposa- contestaba Poché- ¿Tan rápido ya me extrañas?-