Mar

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POV POCHÉ

Las palabras de Calle me dejaron demasiado pensativa, ella me dijo que me iba a recuperar, pero en este momento yo no sabía si quería ser recuperada. Viéndola a la distancia jugando con mis hijas en la playa me hacía recordar por qué me enamoré de ella, amaba su espontaneidad, su sonrisa, sus ganas de disfrutar la vida y la manera en que alegraba la vida de cualquier persona que la conocía.

Su decisión de viajar conmigo a México me hizo entender que estaba poniendo mi felicidad por encima de la suya, estaba dejando todo por ir conmigo, me estaba demostrando su amor de la manera más mágica posible.

-Dani, me voy a la habitación.- le avisé poniéndome de pié.

-¿No irás a cenar con nosotras y mi papá?-

-No, pediré room service tengo que pensar en muchas cosas.-

-Dale, nos vemos al rato.- Me dijo y regresó con mis hijas.

Al llegar a la habitación los pensamientos volvieron a inundar mi mente. No sé por qué me negaba tanto a estar de nuevo con ella, estaba claro el amor que nos teníamos y el esfuerzo que ambas hacíamos. Tal vez era más por mi que por ella, sabía la obsesión que podía generar hacia mi trabajo, moría de miedo de poder volver a decepcionarla, de pasar por lo mismo una vez más.

Decidí disipar mis pensamientos y preocuparme por mi trabajo. A pesar de la hora enlacé una llamada a México para darle a saber mi decisión a Michel.

-Bueno- escuché del otro lado de la línea.

-Michel perdón por la hora, espero no haberte despertado.-

-Majito, es fin de semana, en México, no se duerme.- dijo haciéndome reír.

-Claro, México es sinónimo de fiesta, te hablaba por qué tomé mi decisión.-

-Espero que me des una razón más para celebrar.-

-¿Cuándo me necesitas en México?-

-Eso quería escuchar, a mi me gustaría que llegaras lo más pronto posible, ¿Te late el próximo lunes? No este que viene, sino el siguiente.- Dijo y me di cuenta lo pronto que era.

-Ok ahí nos vemos. Será un honor trabajar contigo.-

-Honor el mío parcera, aquí te espero.-

Colgué y de inmediato empecé a estresarme por la cantidad de cosas que debía hacer antes de irme, decidí que no me llevaría nada de muebles y le recomendaría a Dani que tampoco lo hiciera, tenía que dejar todo organizado para que Johann siguiera con todo en Colombia y debíamos ir a la escuela de las niñas a hacer todos los trámites.

Era demasiado considerando que solo estaría 4 días en Colombia después de Punta Cana y antes de México.

Me quedé gran parte del tiempo sola en conferencia con Melissa, me estaba ayudando a organizar la mayor cantidad de cosas posibles para ir aligerando responsabilidades. No sabía exactamente cuánto tiempo estuve ahí, pero estoy segura que fueron varias horas.

-Mamiiiii- las voz de mis hijas me sacó de la concentración en la que estaba, viéndolas entrar a las tres a la habitación.

-Hola chiquis, ¿Cenaron rico?-

-Si, te traje un mini waffle mamita.- Me dijo Andy desenvolviendo un waffle ligeramente aplastado en una servilleta.

-Gracias mi amor, ya es muy tarde, vayan preparándose para bañarse y a dormir enanas.-

-Voy a preparar la tina para bañarlas.- Me dijo Dani entrando al baño.

-Mamita, ¿Vamos a vivir en el mar?- Dijo de la nada Ainara.

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