Sentimientos Latentes.

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Narra Vegetta

Alex, Staxx y yo estábamos en la pisina de mi casa tranquilamente dándonos una buena mojada. Alex no paraba de reír junto con Staxx, los dos se veían lindos juntos. Mientras que yo estaba solo con el amor de mi vida al otro lado del mundo, pero, esta vez, ya no me dolía. Poco a poco ese dolor que me hundió en sufrimiento durante mucho tiempo parecía tener poco sentido.
Me concentraba más en las personas que estaban a mi lado, Staxx, por ejemplo. Él ha estado conmigo desde el principio, aguantando todas esas noches que lloraba desconsoladamente, sin parar.

- Oye, Samuel -Dijo Frank con su tono dulce-, ¿no te has escrito con Guille?

- No -contesté sincero-. ¿Porqué?

Frank frunció el seño y yo lo miré intuitivo. Parecía que lo que dijera haría que nuestra amistad terminaría. Cualquier cosa que dijera, si se iba a ir, si ya no quería estar conmigo, ya nada podía separarme de él. Quizá era porque Frank era mi mejor amigo, quizá era porque sentía algo más, no lo sé.

- Quiero hablar contigo. Pero no aquí -Se puso serio.

- Muy bien, vayamos a mi cuarto. Deja que Cheeto y Alex hablen juntos.

Y nos dirigimos a mi cuarto. Paso a paso sentía que el corazón me latía más fuerte, sentía que algo más pasaría. Algo en mí quería que pasara, quería sentir la piel suave y sensible de Frank. Pero tampoco quería hacerlo, porque Guille no lo habría hecho, él esta conmigo, lejos, pero lo está. Mi mente se nublaba y no pensaba bien, quería salir corriendo, pero ya era tarde.
Me encontraba con Staxx en la habitación, habitación.

- Después de lo que te voy a decir, no querrás volver a hablarme -me dijo nervioso.

- ¿De que se trata?

Staxx se acercó más a mí, y yo hacia él. Ninguno de los dos quería hablar, sólo nos mirábamos como si él sintiera algo más, como si yo quisiera que eso pasara. Su mano recorrió con ligereza el contorno de mis mejillas y después, de la nada, nuestros labios se unieron en un beso profundo y apasionante. Como si Frank lo hubiese esperado por mucho, como si yo no quisiera que terminara. Sus ñlabios era suaves, ttan suaves como una pluma. El beso hizo que lo recostara en la cama, dejándonos llevar por el momento.

- Te quiero demasiado -susurró Frank.

- Yo también. Pero esto no es posible.

Y era cierto, aunque quisiera, y no es que quiera, él y yo somos mejores amigos, no podemos estar juntos por nada del mundo y si Guillermo se enterara nos mata a los dos.

- A la mierda Guillermo. Yo estaré contigo -Continuó diciendo Frank, volviendo a besarme.

¿Ya no importaba que Guillermo no estuviera? Mi dolor había pasado por completo. Todo este tiempo que he estado sin él ha hecho que lo olvidara. Sera como si nunca hubiese existido, recordé lo que dijo, y era cierto.
Ahora, solo importaba que estuviera con Frank, Guillermo ya no volvería, eso era obvio. Nadie puede volver cuando lo intentan asesinar, solo era cuestión de tiempo para que me lo dijera.

- ¿Podemos salir mañana? -le pregunté a Frank dejando todo acto por concluido.

- Sí, supongo.

Era la típica cita de no novios que hay cuando pasan estas cosas.
Cuando Frank se fue, recordé que hace cuatro días había una carta de Guillermo que no había abierto. Todavía se conservaba en el empaque verde con el sello. Decidí abrirla para ver que dice.

Samuel:

Hola mi vida. Sólo querría decirte que cada vez estamos a punto de volver, si las cosas por allá ya se tranquilizaron, hasmelo saber y volveremos en un abrir y cerrar de ojos.
que es difícil estar teniendo una relación a distancia, pero, cuando vuelva estaremos juntos para siempre.
Mi madre ha descubierto que nos enviamos cartas, y por seguridad, quiero que las leas a medianoche y las guardes muy bien para que el asesino no encuentre nuestra ubicación.
Te amo.

Guillermo.

Ahora sí, estaba totalmente en un lío. O era Guille, o era Frank. Mi corazón no quería que esto pasara. Pero, desafortunadamente las cosas pasan, y pasan por una razón. Le costesté a Guille y fui al centro de envíos, Cheeto estaba ahí, con su padre. Aquel padre se me hacia algo raro. No es que sea malo, pero tiene algo que no me parece.
Me recosté en mi cama, la que había tenido a Guillermo desnudo miles de veces, aún olía a él, aún lo amaba, pero también amaba a Frank, y no sé cual es fuerte. Pero, yo no estoy en condiciones de elegir por ahora.

~~~~~~~~~~~~~~~~❤
Salseito it's coming xd ya empezó a dudar Samuel:o ¿a quién elegirá? Voten❤ y comenten con quién quieren ustedes que se quede!!

Cartas a Medianoche  «Wigetta» (Saga Wigetta a Medianoche 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora