20 / 𝐕𝐢𝐧𝐠𝐭

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Los ojos rosados del joven chico se cerraron fuertemente en busca de evadir el golpe con la luz artificial que lo había despertado. Suspiró removiéndose levemente sobre la desolada cama hasta esconderse entre las sábanas, abrazando la almohada contra su rostro, estirando su espalda y flexionando una de sus piernas para tratar de reconciliar el sueño nuevamente.

Hasta que finalmente se cayó.
Se espabiló cuando notó que tenía espacio de más en esa cama, y eso no era una buena señal.

Abrió sus ojos sin pensarlo, incorporándose para buscar con la mirada al rubio del cual no hubo rastros.

—Kou idiota...

Murmuró al notar que efectivamente que lo había dejado solo.

Se dejó nuevamente caer en la cama en un leve gemido por lo cansador que le había resultado hacer tal investigación visual, pero recordó el detalle de que si Kou había dejado la cama y prendido las luces, indicaba que era por la hora: Debían ir a la secundaria nuevamente.

Insultó entre dientes por unos segundos, mentalizándose a que debía levantarse para irse, sin antes repasar la lista de cosas que hacer.

Tomó postura para realizarlas. Se vistió y arregló para bajar, sabiendo lo incómodo que sería el ambiente entre ellos.

( . . .)

Tsukasa se encontraba arrodillado sobre su silla. Reclinándola lo suficiente para verlo, padeciendo de espacio personal, sin creer lo que le había dicho Mitsuba sobre esa noche junto al famoso Minamoto.

—¿¡Dónde carajos quedó su heterosexualidad!?— Se burló el mismo pelinegro provocando su carcajada junto la del castaño.

—En la oscuridad.— Agregó Natsuhiko siguiendo la broma entre ellos ganando con éxito la alta risa infantil del más bajo del grupo.

—No sean infantiles.— Ordenó la chica de cabello esmeralda conteniendo su corta risa por querer tratar con seriedad un asunto con tal espacio de importancia para la mente del de ojos rosados —Mits, ¿quieres contar qué pasó después de eso?— Preguntó centrando su atención en el protagonista de la historia de amor de la que hablaban, y de cierto modo, también se burlaban.

Sakura posó su mano sobre la silla de Tsukasa, bajándola suavemente para evitar el riesgo de caída que este pasaba, ignorando sus pucheros o súplicas en su nombre en contra a sus cuidado, protestas que murmuraba con un pequeño canto entre dientes acallado por el siseo de la boca de la chica, cortado en 2 por su dedo índice sobre sus labios humedecidos por un labial rosa claro.

—Solo... Dormimos y al despertar, él ya estaba a bajo cocinando el desayuno. No quiso dirigirme la palabra en todo el día... tampoco lo intente— Declaró su visión de los hechos buscando la sucesión indicada para no saltearse detalles importantes —Quedamos en que solo fue cosa del momento y los impulsos.

—Sí, ¿También golpeó la pared y fue a comprar un balón de fútb-...?

Nats fue callado por un golpe en su hombro de la chica a su lado que lo vio como si fuera a matarlo, pasando esa amenaza al de ojos amarillos. Quien cubría su boca para evitar que vieran su sonrisa, decidiendo simplemente esconderse dentro de su buzo, subiendo  la prenda hasta su frente para cubrir sus expresiones, sonriendo sin culpa para sacar todo sentimiento que pudiera ser representados con la risa, mientras se recostaba sobre las piernas de Sousuke.

Your Type 𓂃 MitsukouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora