Capítulo 32: No te vayas, por favor.

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- Me has puesto perdido de puré - se quejó el azabache fingiendo una cara seria.

El bebé solo rió y continuó jugando con su comida, tirándola por todos lados y dándole manotazos a la cuchara hasta llenar a Zhan de arriba a abajo con su contenido.

El mayor tenía toda la cara de color anaranjada por las zanahorias y la calabaza e incluso un poco le llegó a caer en el ojo. Medio tuerto tomó la decisión de que su hijo se comería todo lo que quedaba en el plato sin más juegos, claramente A-Yuan no se lo dejó fácil.

El azabache acercó el cubierto decorado en el mango con un dibujo animado hacia la boca del pequeño. Esta vez parecía que si lo aceptaría ya que la abrió esperando a que le dieran, sin embargo solo estaba tramando otra travesura de las suyas.

Cuando la cuchara casi entraba en su cavidad y Zhan sonrió por que lo iba consiguiendo, el niño se la quitó de las manos y la metió en su boca. El pelinegro tuvo que tragarse la comida mientras que su hijo reía sin control y A-Li y Yibo ocultaban sus carcajadas.

- Engañado por un bebé. Pff - soltó la chica antes de reírse como su sobrino.

- Ya vale, ¿no? - dijo con el utensilio todavía entre sus dientes.

El castaño se apiadó de él y, tras quitarle la cuchara de la boca, lo besó notando el sabor de las verduras para luego limpiarle la cara con un paño húmedo.

El mayor no desviaba su mirada del rostro y las acciones de su novio, aunque este no le miraba ya que estaba concentrado quitándole las manchas. Su corazón se puso feliz otra vez e intentó quedarse con lo máximo posible en sus recuerdos de cómo era: su pelo castaño aún un poco largo aunque se lo hubiera cortado, sus ojos marrones con ese brillo en sus pupilas, sus labios rojos y carnosos con sabor a durazno...

Se perdió tanto en sus pensamientos y en su ensoñación al tener aquel ser tan perfecto delante que no notó como Yibo también lo miraba fijamente, seguramente haciendo lo mismo que él.

Ambos volvieron al presente y sus ojos se llamaron con la necesidad de juntar sus bocas las cuales no se hicieron de rogar y se buscaron.

El menor pasó sus brazos alrededor de su cuello y se apretó a su cuerpo queriendo que su calor y olor se transpasaran a él. Zhan, por su lado, acariciaba su espalda por dentro de su camisa desde los hombros hasta su cintura deseando quedarse con la suavidad de su piel en las manos. El beso que acompañaba a sus caricias y mimos era apasionado pero lento, no querían correr solo disfrutar de ese momento.

A-Li rodó los ojos al ver que no tenían consideración cuando ella y A-Yuan estaban todavía allí delante. Así que, antes de que la cosa empeorase, si es que lo hacia, se levantó y tomó al pequeño en brazos.

- Vámonos, A-Yuan. Dejemos a tus papis solos un ratito. La tita Li va a jugar contigo en el cuarto de papá, ¿sí? - habló con un tono infantil.

Una vez sin compañía, Zhan sacó sus manos de la camiseta del contrario y agarró con ellas sus mejillas atrayéndolo más hacia él y profundizando el beso. Yibo abrió su boca permitiendo que su lengua entrase en ella y degustase su saliva. El azabache recorrió su interior hasta que comenzó una lucha con el menor para ver quien comandada el beso. Debido a un escalofrío que por poco hace jadear al castaño, el pelinegro ganó la batalla dirigiendo como quería el movimiento.

Pasado un minuto, dejó sus labios y deslizó los suyos por la longitud de su cuello pasando por encima de su manzana de Adán. Lamió esta provocando que el menor echara su cabeza hacia atrás para que continuara, algo que hizo cuando la chupó afectando a la estabilidad de su pareja.

Zhan colocó uno de sus brazos en la cintura y el otro en su cuello, luego lo empujó hacia atrás tumbándolo en el sofá y quedando él encima.

Los besos pasaron de su nuez a su clavícula, la cual se veía debido a su camiseta de tirantes. El castaño se mordía el labio reteniendo sus sonidos mientras entrecerraba los ojos, una imagen que le encantó al azabache y que provocó que volviera a besar su boca. En mientras, pasó sus pulgares por sus costados presionándolos en su camino hacia arriba.

𝐴𝑙 𝑖𝑔𝑢𝑎𝑙 𝑞𝑢𝑒 𝑙𝑎 𝐿𝑢𝑛𝑎 𝑒𝑠𝑝𝑒𝑟𝑎 𝑎𝑙 𝑆𝑜𝑙 /Zhanyi/Terminada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora