capítulo 4

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Narra Daniela.

Una semana.

Llevo una maldita semana buscando algo que me lleve con mi mamá, la manada trata de ayudarme y por esa razón todos estamos estresados.
A pesar de que Alana también ayuda desde lejos, eso no evita que cada día quiera con toda mi alma que aparezcan sanos y salvos.
Nana Rose también salió con Deaton a buscar a mi hermano.
Estaba tan metida en los archivos que teníamos de los contratos recientes de mamá pero ninguno era demasiado lejos.
Estaba por largarme a gritar y comer hamburguesas yo solita cuando Eris grito asustando a todos.

—¡ENCONTRÉ ALGO!

Fran brinco en su sitio, Irma y Jovani dejaron caer una hojas, Storm le pego un zape a Eris y yo me caí de la silla en la que estaba.

—¡Pendejaaaa! Casi se me para...

Proteste sobando mi cabeza siendo ayudada por Fran a levantarme.

—¡Asco! Deja de pensar en Fran ¿Quieres?

Sentí mis mejillas arder y le mostré el dedo medio Irma.

—Pinche mal pensada...

—Como sea...— ella nos hizo una seña para que nos acercarnos con su mano, todos nos acercamos a ella y la laptop que estaba frente a ella.— dijiste que tú madre nunca sale sin su motocicleta ¿No?,— asentí mordiendo levemente mi labio nerviosa.— me diste sus placas y con el bonito hackeo que conseguí descubrí que tú madre esta en un lugar de California, — todos se quedaron viéndonos a Fran y a mi cuando él puso su dedo en mis labios para que dejara de morderlos.— ¿Okeeey? Es un pueblo con nombre extraño...

No lo soporté así que tome su rostro entre mis manos y le di un beso ruidoso en la mejilla.

—¡Te amo Eris!

Ella se limpio la mejilla con su manga riendo.

—¿Cuál es el plan?

Pregunto Jovani esperando algún plan.

—¿Tienen visa?

Plan que no les diría, no quiero ponerlos en riesgo.

—La duda ofende...

Ellos no deben de salir heridos por nada, son mi manada y por ende, mi responsabilidad.

—Iremos a Beacon Hills y averiguaremos donde está mamá...—Cómo si tuvieron fuego en el trasero, salieron corriendo de la casa.— iré yo, ustedes no sabrán cuando irse y así es mejor... No estarán en peligro.

Dije apenas me dejaron sola, suspiré y fui a mi habitación a hacer mis maletas.
Busque entre mis cosas y también empaque los documentos necesarios.
Siendo ya de noche subí a mi Jeep, estaba por arrancar y alguien se atravesó cuando estaba por salir a carretera.

—¡Ya lo mate!—Salí rápidamente y, por el aroma, me di cuenta de que un mercenario, que trabajo alguna vez con mi mamá, estaba rondando.—¿Estás bien?

—Ayuda...

Lo levanté y lo recargue en el Jeep, Marcus, era el nombre del mercenario.
Él no se metía con nosotros ya que además de ser sobrenaturales mamá nos mando a entrenar.

—¡Ay Dios! Lo lamento mucho pero debo de hacer algo que no creo que te agrade

Su estúpido trato era no hacer daño a familia y eso incluye parejas. Quiero llorar.

—Solo hazlo, te seguiré el juego.

—Que quede claro que solo es para salvar tu pellejo.

Lo bese cerca de los labios, cualquiera que nos viera creería que si era un beso, beso por lo que pase mis manos por detrás de su cuello, él abrazo mi cintura y me apego a él justo en el momento en que dos autos se detuvieron frente nosotros.
Nos separamos al escuchar un carraspeo.

—¡Marcus! — fingí estar sorprendida y alegre de verlo aquí.— Hola, mi madre no a vuelto aún...

Dije con una sonrisa tan falsa que me sorprende que me creyera.

—No sabía que tenías novio...

—No soy mucho de revelar mis relaciones con las personas ¿Sabes?

Él solo gruñó y se volvió a subir a su impala para irse.
Por otra parte, en el otro auto estaban mis amigos que nos veían con la boca abierta.
Empuje al chico y trate de acercarme a ellos pero gritaron fangirleando en el caso de Irma y Eris, fanboyleando en caso de Storm.
Jovani solo se lanzo sobre el chico y lo golpeó varias veces en la cabeza.
Fran solo nos veía con indiferencia.
Solo podía pensar en que ya la cagué.

—¿Qué hacen aquí? Todos...

Pregunté deteniendo a Jovani.

—¿Qué? ¿No querías que supiéramos de tu noviecito?

Pregunto molesto Fran, me confundí ya que es el más calmado de todos, los demás solo empezaron a cuchichear entre ellos.

—Por mero respeto a nuestra amistad no te mando a la chingada

—Entonces ¿Qué excusa tienes? Se supone que somos amigos y nos contamos todo no creo que sea un extraño al que besas solo porque lo ves guapo... A menos que juegues con las personas de esa manera

—Eres un... Olvídalo.

Suspiré y tome del brazo al rescatado y lo hice entrar a mi casa para revisarlo.
Solo tenía una herida de bala con acónito por lo cual fue fácil relativamente curarlo.

—¿A qué hora nos vamos?

Pregunto Jovani a lo que ya no pude mentirles.

—Yo me iré, en ese condado hay una manada, la McCall y nada me asegura que nos recibirán a todos...

Eris trato de protestar cuando el rescatado empezó a reír.

—Básicamente te debo la vida... Te seguiré a dónde vayas, alfa,— estaba a punto de darle un golpe y decirle que no debía de hacerlo pero no me dejó.— mi nombre es Nathaniel Park y debo de cuidar a Joni...

—¿Porque?

—Es mi medio hermano menor...

No pude evitar suspirar y se me ocurrió algo.

—Hagamos esto, me iré y si en una semana no tienen respuesta mía podrán buscarme ¿Hecho? Porque si no, nadie va y me escaparé...

Parecieron meditarlo un poco, al final todos aceptaron.

—Trato pero... Usaremos el sistema de emojis, si estás en peligro o te sientes sola o algo lo usarás, evitarás explicaciones e iremos a buscarte.

Asentí sonriendo para después salir corriendo y subí a mi Jeep, suspiré aliviada y encendí mi vehículo.
Mire por el espejo retrovisor dándome cuenta de que todos estaban ahí, esperando a que me fuera y con la ilusión de que, a la primera, confiaría en ellos para que me vayan a ayudar a dónde quiera que esté.
Sin embargo en ese momento una nueva duda surco mi mente ¿Cómo reaccionará mamá? a pesar de saber que mamá me aceptaba me era imposible saber cómo reaccionará al saber que soy una alfa, que tengo betas y daría mi vida por ellos también.
Suspiré y emprendí camino, sabía que sería largo pues vivo en el centro de México.

—¡Aquí voy mamá!

la hija de Derek HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora