The Wrong Way / Calum Hood (terminada - en corrección)

Entre Estudio Y Distracciones

S

alí del estudio directo a los vestidores, revisé mi teléfono, primero leí el texto de Calum, definitivamente no estaba de ánimo para lidiar con él, también hay un par de mensajes de Eme y uno de Henry “Éxito en la entrevista, un abrazo". Guardé mi teléfono mientras los productores se encargaban de quitarnos los micrófonos y otros dispositivos. Cuando todos se fueron, quedé sola con Ross.

— ¿Qué demonios fue eso? — pregunté, sintiendo cómo la rabia comenzaba a subir por mi cuerpo. Ross en vez de disculparse, sonrió de forma cínica.

— Por qué tan molesta? Si hasta publicidad gratis le hice a tu amigo. 

— Ese no es el punto, Miller. 

— ¿Cuál es el punto? — alzó una ceja mirándome serio. 

— Que, se supone que tu — apunté con mi dedo en su pecho — eres mi amigo y no debieses intentar dejarme en ridículo en un programa de televisión, además sabes que me da ansiedad. 

— Estás exagerando o ¿Es que a tu amiguito le molestó la entrevista? 

Recordé el mensaje de Calum y me quedo dubitativa ¿era eso lo que me preocupaba? No, claro que no. 

— No lo sé, ni me importa Ross, me vi como una idiota en televisión con tu estúpido comentario de esa canción. 

— Primero, solo te pusiste nerviosa medio segundo y te aseguro que nadie que no te conozca en persona lo notó, segundo, yo creo que sí te importa y solo voy a decirte que si hace un berrinche por algo así no vale la pena. 

— ¡Ya te dije que no se trata de el - le respondí tajante, aunque en realidad no estaba segura de qué es lo que sentía exactamente.

— Como sea — me interrumpió — vamos a almorzar y te llevo a casa, no tiene sentido discutir por esto. 

Lo miré feo, sintiéndome frustrada ante su falta de comprensión. pero caminé tras de él hasta salir del set y subirnos a su auto, bostecé y me estiré. 

— Vaya, se nota que la noche te dejó agotada ¿cuánto dormiste? 

— Lo habitual Ross ¿podrías parar? – pregunté molesta y con voz cansada- Tú tienes encuentros de una noche bien seguido y no te ando molestando. 

— Entonces ¿eso ocurrió entre tu y Hood? ¿Un encuentro de una noche y nada más? 

— Exactamente.

Ross sonrió de una forma que me hizo recordar a la de mi hermano cuando sabe que le miento.  

Cambiamos el tema y empezamos a discutir sobre nuestras agendas, nuestras apariciones públicas suelen ser populares porque es como ver a dos hermanos reales bromeando en televisión y, además teníamos otros proyectos juntos, Ross había dejado las competencias de baile hace años, pero ganó varios premios y al igual que yo, tomaba clases y practicaba de manera periódica, por lo que constantemente se nos estaban invitando a convenciones de baile o "máster class". Normalmente nada de esto me molestaría y amaba compartir con él, pero solo quería dejar de verlo. Pasamos rápido a almorzar y comí lentamente la mitad de mi sandwich.

— ¿Estás bien?  Realmente pareces agotada – preguntó Ross con preocupación.

— Estoy bien — respondí dejando el resto de mi almuerzo en el plato — pero sí, estoy algo agotada entre la escuela, el baile, la serie, los estúpidos premios, Henry... 

— Vale, mejor te llevo a casa a ver si duermes un rato.

Salimos del restaurant y subimos nuevamente a su auto, el camino hasta mi casa fue corto y pasamos la mayor parte en silencio. Me sentí agradecida por el silencio que compartimos en el auto, no tenía ganas de hablar y Ross parecía entender eso.