Danmachi-Fiel a mi Palabra

Capitulo 3: Alas rotas

Que onda queridos lectores.

Hoy les dejo este capítulo del fic.

Disfruten.

-Bell-kun, ¿me escuchas?- la chica de cabello negro pregunto al chico albino, mismo que abrió los ojos.

-¿Sucede algo?- pregunto de manera casual.

-No exactamente, es solo que te ves distraído- con algo de preocupación, la chica observo al ojirrojo.

-Solo pensaba...- dicho eso, Bell se levantó de los muslos de la chica.

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-¿Quién te dijo eso?- una vez más Loki pregunto al aventurero frente a ella.

-No es alguien muy conocido por usted, Loki-sama- el prisionero dentro de esa celda no era otro que Bell Cranel, el más famoso y prometedor aventurero en semanas pasadas.

-¿Y bien?- arqueando una ceja, un hombre con aspecto antropomorfico de lobo pregunto a la pelirroja.

-Mmm~... No está mintiendo...- la de ojos rasgados miro directamente cada palabra del chico y no había mentira en ellas.

-Larguemonos de aquí, es una perdida de tiempo Loki- el hombre-lobo le dio la espalda a la deidad y salió.

-Nos vemos chico...- la pelirroja se levantó del asiento y se dirigió a la salida.

-...- sin decir nada, el chico se despidió con la mirada de la embaucadora.

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-Es inútil hablar con él- siendo abordada por todas las mujeres de su Familia, la diosa miro con tristeza a sus dependientes.

-¡No solo es inútil!- gritando como siempre, el peliplata fue fulminado con la mirada -¡...! Tch, no tengo ningún problema con él...- tronando la lengua, Bete salió del lugar  con la cabeza alta pero el tono de voz apenas audible, continuo -Estoy seguro que se habrían llevado bien...- atravesando la puerta de la sala, el werewolf sonrió a la nada.

-Aun le pesa, ¿cierto?- preguntando a Riveria, Loki recibió un asentimiento de la alto elfo.

-De cualquier modo, ¡lo ayudaremos!- con un puño al aire, el grito de Lefiya ánimo a todas las presentes.

-¡Seguro!- fue el grito del resto

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-¡¡¡AUN NO TE RINDES!!!- siendo abofeteado de manera violenta por el antiguo rey elfo blanco, Bell lo miro confrontando su mirada -¿¡Que tan estúpido puedes llegar a ser!?- recordando la feroz batalla contra su Maestro, el ojirrojo fue hundido en la mesa de un golpe.

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-¡¡¡AGHHHH!!!- el grito de dolor del peliblanco resonó en la sala.

-¡Niño estúpido! ¡De haber aceptado a Freya-sama hubieses evitado todo esto!- dolido por como las cosas estaban ocurriendo, Hedin Selland, Ejecutivo de la Familia Freya, miro al niño frente a él -¡Bell! ¡No seas estupido y únete a nosotros!- a pesar de saber que su diosa estaba obsesionada con el chico, el elfo miro a la otra chica a su lado -Y tu...- la pequeña hada levantó la vista, y ahí lo vio: regio, sobrio y con un aire parecido al de su mentora -¡Inútil!- que le recalcaran eso era doloroso -¡Para ser un elfo eres débil, indecisa e igualmente estúpida como Bell!- escupió ese veneno sin una pizca de gracia, la elfa estaba por llorar hasta que una voz interrumpio todo.