Mi lindo mafioso

974 10 0
                                    

2000sRobert Pattinson

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

2000s
Robert Pattinson

La fiesta en casa de Amy fue mejor de lo que Charlotte pudo imaginar.

Todo comenzó en él cumpleaños número 18 de su tan querida amiga, Amy.

Se conocieron hace cuatro años y desde entonces se volvieron las mejores amigas. Asistían al mismo colegio privado, tenían el gusto por las cosas caras y el amor por la buena vida, pero con una única diferencia; Amy era hija de un abogado prestigioso y de dudosa moralidad mientras que la madre de Charlotte trabajaba en una zapateria. Había obtenido una oportunidad de estudiar en esa escuela gracias a su gran inteligencia, pero a pesar de su gran diferencia económica, Amy nunca desprecio a Charlotte, todo lo contrario, trataba de enseñarle como actuar ante tanta gente con poder y eso fue justo lo que Charlotte hizo.

La fiesta se celebrará en la gran casona de los padres de Amy. El jardín estaba adornado de acuerdo a la ocasión. Todos estaban felices de que Amy por fin había cumplido la mayoría de edad y todos querían un momento a solas con la cumpleañera.

Charlotte comprendio que Amy estaria muy ocupasa en todo ese alboroto por lo que fue a recorrer el resto de la casa.

Ese día había elegido un vestido bastante casual era de color crema, le llegaba justo arriba de la rodilla con escote en forma de V y mangas largas.

Se adentro por un enorme pasillo y miró los retratos familiares. Mientras que ella se entretenía, en una habitación no muy lejos de ella el señor Jones, padre de Amy, junto con Thomas, cerraban tratos con un apretón de manos y justo como todos lo imaginan, el señor Jones era toda una fichita.

Charlotte, mientras más caminaba más se daba cuenta de lo que realmente quería. Al encontrase con toda esa gente divirtiéndose y gastando sin parar admitió que deseaba una vida llena de lujos, viajes, ropas caras, joyas majestuosas y un hombre que la amará. La vida de esa casa a Charlotte le parecía fantástica pero no envidiaba a nadie, ella sabía que en algún momento viviría todo eso.

Caminaba de espaldas distraídamente cuando su espalda chocó con lago duro.

–¿Te perdiste?– una voz suave preguntó.

Eso basto para que Charlotte se girará de forma asustada y se topase con el dueño de aquella voz.

Era una chico bastante atractivo, de caballos rubios, ojos verdes y grandes, piel blanca y corpulento sin caer en el gordo. Era bastante alto, él podía intimidar a quien sea pero en ese momento le mostraba una sonrisa juguetona.

–Yo... yo no...
–¡Mi querida Charlotte!– se escuchó la voz del señor Jones de fondo –¡vamos! Ya va a iniciar el discurso.— Sin dejarla contestar la tomó ligeramente del brazo y la llevó al centro de la reunión.

𝕽𝖔𝖒𝖆𝖓𝖙𝖎𝖖𝖚𝖊. ᴿᵉˡᵃᵗᵒˢ ʸ ᵒᵗʳᵃˢ ᶜᵒˢᵃˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora