◾Impostores II es la continuación del libro Impostores.
◾A partir de ahora la vida de los Impostores y herederos cambiarán por completo y solo tienen dos caminos, adaptarse o sufrir las consecuencias.
◾Personajes principales:
Impostores: Namjoon, Y...
Llevaba varios días sin poder asimilar todo lo que nos había ocurrido y de alguna manera quería culpar a alguien, pero sobre todo quería matar a alguien.
- Esto es tan estúpido - Digo mientras me visto- Nunca debimos escuchar a Namjoon.
Salí de mi nuevo cuarto y me encontré con Taehyun y Kai intentando cocinar algo.
- ¿Qué hacen?
Huening Kai: Veo que decidiste salir de tu cuarto para variar.
- No voy a dejar que todo esto me derrote.
Lisa: ¿Por qué siguen aquí aún?- Dijo mientras se arreglaba el cabello- Dijeron que iban a regresar al instituto para los exámenes al menos.
- ¿Qué sentido tiene? Es imposible que sigamos con eso.
Lisa: Lia y Ryujin lo entendieron mejor que ustedes- Suspiró.
Taehyun: No podemos ir y fingir que nada ocurrió.
Lisa: No tienen opción- Me miró- Además, tú deberías graduarte.
- No quiero ir a una universidad. Además, no puedo ver a los hijos de Seunghyun.
Huening Kai: En eso tiene razón.
Lisa: De acuerdo, no se gradúen y no tengan una mejor vida- Se sentó en el sofá- Yo tampoco terminé de estudiar después de todo.
Taehyun: Lisa ¿No sabes nada de Jisoo?
Lisa: No, ella desapareció y ni siquiera sabemos si está viva- Dijo mirando un punto fijo.
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Hace dos semanas.
Con mucha dificultad nos acercamos hasta la habitación que había hecho explosión, pero el humo y el fuego no nos dejaba ver mucho más allá de los escombros.
Lia: ¡Alguien responda!- Gritó.
Lisa: ¡1, 2, 3, 4!- Gritó- Somos nosotros, no hay nadie más- Dijo con desesperación.
- ¡Hermano!- Digo mientras intento avanzar- ¿Dónde estás?
Huening Kai: No veo nada...
Taehyun: Esperen- Tomó su teléfono.
Taehyun comenzó a llamar a Namjoon, pero no obtuvo respuesta.
Ryujin: Hay que buscarlos, no importa con qué nos encontremos.
Comenzamos a buscar en el lugar, mientras que el humo se disipaba, pero seguíamos sin encontrar nada.
