SILENT ◡ Katsudeku

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No le había pasado en mucho tiempo, sonrojarse y ponerse de nervios al ver a alguien. Pero Izuku siempre se limitó a volver a gustar de alguien después de todo lo vivido con una ex pareja, sin embargo, no podía evitarlo, no elegimos a quien nos gusta y este es el caso del omega.
Al llegar a su casa y subir corriendo a su habitación sin siquiera notar si su madre estaba, salto a su cama y se revolcó en ella.

Seguramente se miró ridículo, pensó.

El pecoso suspiro pesadamente y miro su celular.

22:10

Fue entrecerrando sus ojos mientras pensaba en el trato que había realizado con el pelicenizo.

・・・

— En realidad no, no me lo devolvió — suspiro Shoto.

— Deberías pedírselo, no te cuesta nada — pronunció la de pelo completamente rosa.

El grupo de amigos estaba pasando el rato en casa de Sero, quienes hablaban acerca de cosas no tan triviales.

— No, si quieres tener su atención has algo más que solo prestarle los apuntes, ya sabes invitarlo a algún lugar — rodó los ojos la azabache.

— Momo, ya quisiera yo tener esa valentía — contesto el alfa.

Pues justo a lo que iba la conversación, Shoto se encontraba con problemas para comunicarse con la persona que le interesaba.

— En primera deberías decirnos quien es — dijo algo resignada Ochako.

— Si no nos quiere decir respetemos eso, chicos — dijo ahora el otro alfa que se encontraba abrazando a la ya mencionada.

— Tú cállate Iida, tú ya tienes pareja, mejor aconseja — soltó la alfa Jiro.

Se quedaron en silencio mientras veían como Shoto suspiraba.

¿Qué debería hacer? Quería llamar la atención de aquel omega con ojos color esmeralda.

Tan lindo, pensó.

— Yo digo que siemplemente deberías acercarte y sacar plática — menciono Mina.

— Eso es difícil — Respondió.

— Si enserio lo quieres y deseas conocerlo no veo la dificultad — dijo Sero esta vez.

— Él es mudo — Dijo sin más.

De nuevo la sala en la que se supone se encontraban viendo una película se quedó en silencio.

— Estás hablando de Izuku? — dijo casi murmurando la pelirosa.

— Espera, el chico que últimamente siempre está con Katsuki? — habló aceleradamente Momo.

— Ese mismo — Pronunció el alfa y volvió a suspirar.

— Últimamente te comunicas mejor con el, creo que deberías ya sabes darle a entender tus intenciones y eso — termino de decir Uraraka.

Yaoyorozu se levantó rápidamente.

— Te ayudaré, pero solo porque quiero que se mantenga un poco alejado de Katsuki — mencionó la azabache en un tono tranquilo.

— Tan obsesionada estás con él? — Pregunto la de cabello morado.

Momo se limitó a rodar los ojos ante la pregunta de la alfa y comenzó a hablar con Shoto acerca de lo que haría.

Todas las ideas que se lo ocurrían a la azabache no le parecían a Shoto, así que este simplemente termino por ignorarla y se sentó cerca de Jiro.

— Es difícil, cierto? — pregunto la ya mencionada mientras bebía alguna lata de refresco.

— Lo supuse, igual algo se me ocurrirá — soltó el alfa.

Tenía claro que fácil no iba a a ser, quería acercarse más al omega sin que este le tuviera miedo, quería reflejarle confianza.

Claro está el hecho de que tanto el alfa como el grupo de amigos nunca se imagino que Izuku fuera omega, pues no portaba alguna esencia natural. Pero pensándolo y analizándolo su apariencia si que lo delataba.

Desde que este se presentó como nuevo en la clase le llamo la atención, haciendo así que Shoto junto con Uraraka e Iida empezaran a hablarle, era de mucha obviedad que la incapacidad de el peliverde llevaría burlas y tal vez hasta acoso, cosa que estos tres ya mencionados odiaban y por ello mismo la desición de juntarse y tratar de comenzar a entender al pecoso. Era curioso y en cierta forma demasiado tierno el como trataba de comunicarse, siempre con una nerviosa pequeña sonrisa y sus algo grandes ojos color esmeralda, tan brillosos.