Hoseok ríe nervioso antes de contestar el teléfono y asentir hacia la secretaria en la línea, no perdiendo detalle de como Yoongi marca su distancia y regresa detrás del escritorio, sentándose desganado y respirando con dificultad aún sin quitarle la mirada de encima, lo cual es hechizante, y le confunde tanto que de no estar literalmente trabajando se lo comería a besos y todo por descubrir que su jefe no siente tanta frialdad por él como le había hecho creer.No puede evitar sentirse halagado porque maldita sea, un hombre como él, que además le gusta mucho, ha mostrado interés en su persona.
—Señor Min, Joo aún espera hablar con usted—se atreve a hablar, evidentemente retomando su tranquilidad, y deseando por ahora volver a la realidad pues no sabe como actuar.
Se queda atento, aguardando que él aborde el tema, sin embargo Min Yoongi parece no recordar lo que pasó minutos atrás.
—Comunícame con él—dice frío, evitando su mirada.—Y olvida lo que sucedió, volvamos a trabajar.
—Pero señor..
—Pero nada, vuelve a tus obligaciones.
Hoseok abre la boca ofendido, y quiere replicar pero no tiene dignidad suficiente para ello, ni argumentos sólidos que le inviten a ganar.
El mayor entonces nota con horror, como Hoseok asiente, lo suficientemente apenado como para replicar, y dispuesto como siempre a cumplir su trabajo sin esperar nada más. Mientras tanto él deja salir el aire de los pulmones, sintiendo una extraña sensación en el pecho, y ansias inmensas de tomar a su asistente del cabello y ponerlo de rodillas para castigar esa lengua visperina que le está volviendo loco, y es que no va negar que el chiquillo le pone, tanto que podría pasar por alto que trabajan juntos si con ello puede tenerle bajo su cuerpo, ofreciéndole además una bonita sonrisa que tranquilice su día como esta última semana.
Y ese es el asunto, solo lleva una semana trabajando en esa empresa y ya está interesado en un par de delgadas piernas que le vuelven loco cada que lo ve caminar, lo cual por supuesto no es correcto, así que aunque no le agrade, tiene que marcar una distancia que le ayude a ser prudente con él.
🍷🍷🍷
Hoseok evidentemente está desganado, y es que no tiene idea de lo que está pasando sin embargo siente el rechazo en su pecho cuando su jefe ni siquiera quiso darle una explicación a la increíble conexión que tuvieron momentos atrás, y no es como que no lo comprenda.
De hecho el chiquillo sabe que no pueden permitirse algo así, no obstante esa horrible sensación en su pecho no desea marcharse, haciéndole sentir culpable por arruinar un ambiente laboral que aunque era agotador; no le parecía desagradable.
—Eres un tonto—se regaña a sí mismo, con inmensas ganas de llorar pero decidido a continuar trabajando para no perder también el trabajo como ha perdido la dignidad.
Sin embargo el ambiente es incómodo sobre todo cuando tiene que volver a verlo y no puede dejar pasar el tema.
Le ha llevado unos papeles importantes en los que el rubio tiene que trabajar pero no puede evitar quedarse unos momentos más en la oficina donde todo empezó, obviamente llamando su atención.
—¿Qué?—Yoongi es frío, tanto que podría romper su corazón ahora mismo pero el chiquillo no se piensa rendir.
—Quería hablar sobre..
Sin embargo este no lo deja continuar.
—Basta Hoseok, límitate a volver a trabajar. Tenemos mucho que hacer.
El mencionando apenas puede respirar después de tan nítido rechazo, y aunque no desea marcharse, no puede quedarse ahí intentando pisotear más su autoestima.
—Lo siento..—se retira, evidentemente avergonzado, aún sin creer haber merecido ese trato, más no negará que no desea romperle la boca de un puñetazo pese a no desear hacer escándalos, porque maldita sea ha sido un cretino.
Pero se contiene, y guarda todas esas sensaciones intentando olvidarse de lo que efectivamente fue un error y no debió tomarse a juego, y aunque no desea verlo tiene que volver a su oficina en varias ocasiones durante la día y tiene que hablar con él, agradeciendo que todo sea sobre la empresa y que sus ojos oscuros no le analicen como horas atrás, además logra librarse de él durante la hora del almuerzo en la que no pudo evitar estar callado aun cuando suele ser el alma del lugar, y aunque no dice lo que le molesta, sus cercanos comprenden que por ahora no es momento para hablar, hasta que finalmente Yoongi sale de la oficina esa noche apenas despidiéndose de él, ignorando en demasía lo sucedido, dejando claro que efectivamente nada ha pasado entre ambos y quizá eso es lo mejor porque no cree tener corazón para un rechazo más.
🍷🍷🍷
Y Yoongi llega molesto a la mansión, no creyendo como es que despreció una conexión increíblemente placentera que lo hizo sentir como hace mucho no lo hacía y solo por ser un idiota de no poder aceptar quien se la proporciona, y no es como que no comprenda las razones lógicas que le impulsan a rechazar a ese querubín que lo hechiza de mil y un maneras, sino porque precisamente es consiente de que no debe acercarse a él más de lo debido porque en primera es su maldito empleado y en segunda es el ser más maravilloso que hasta la fecha a conocido.
Pfff, como si llevase tanto de conocerlo pero maldita sea, no puede sacarselo del pensamiento, y no puede evitar arrepentirse de haberle tratado así.
Se avienta a la cama de su habitación apenas acostumbrándose a la sensación y es que no mentirá, realmente todo en Inglaterra era mejor. Tenía una habitación y un hogar, un novio estable, un trabajo bien pagado y sobre todo carecía de tantos problemas como los que está teniendo ahora, como el haberse involucrado con su único aliado en esa cueva llena de enemigos que ahora es su hogar.
Le está costando adaptarse, le va costar cojones todavía, pero Min Yoongi no piensa rendirse, no sabiendo que nació siendo un rey y no un cobarde que intentará dejar el esfuerzo atrás.
Solo.. necesita encontrar la manera de organizar sus pensamientos y no lastimar a nadie en el proceso, mucho menos alguien como Hoseok, quien es pese a todo lo único bueno que posee en sus manos.
***
¡NO OLVIDES VOTAR!.
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Intransigente. © [YOONSEOK.]
FanficDonde Yoongi hereda una de las mayores empresas en Seúl, y Hoseok es el único aleado que tiene en un ambiente lleno de enemigos, no pudiendo evitar dejarse llevar por el deseo en medio de esa alianza, hasta terminar prendidos en llamas cargadas de l...