Capitulo 1

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~Todo es un abismo, las acciones, los deseos, los sueños y las palabras~Baudelarire

El ultimo día de vacaciones es un sinónimo para el ultimo respiro de libertad. Mañana comenzaría de nuevo mi caótico mundo de ruidos sin cesar y soledad. Mi segundo año de preparatoria parecía ser tan prometedor como el anterior. En resumen, un asco. 

Ojala pudiera terminar mis estudios en casa. Lo intente, pero la abuela me grito diciendo que es importante ir a la escuela, formar amistades y socializar. Desearía poder quedarme todo el año perdida en medio del bosque, en completo silencio tejiendo bufonadas para los arboles. Lo tengo todo planeado: me alimentaria de la cosecha-tener un invernadero es muy practico- y la energía eléctrica se obtendría con un panel solar para el cual estoy ahorrando. Haría uno que otro trabajo de traducción para tener algo de dinero para pagar las cuentas y así, viviría feliz en mi modo ermitaño.

Lastima que aun no tenga la edad legal para decidir como vivir mi vida. 

Mis padres me echaron de su casa cuando tenia... ¿siete, ocho? en esas fechas aproximadamente. En aquel entonces mi cerebro infantil no podía filtrar lo que podía o no decir y me exponía continuamente. Expuse las deudas de papa por una mala inversión y mas tarde le pregunte a mama en una cena familiar, con toda mi inocencia, quien era el papa de Anastasia, mi hermana menor.

Mis padres me tacharon de demonio en sus mentes, me llamaron mentirosa y una niña problemática. Mis hermanos me culparon por su divorcio. Joel lo hizo, Anastasia era demasiado pequeña. Ella me odia por que así la criaron. Al final, termine criándome sola en una casa en medio del bosque junto a mi abuela cuyos pensamientos varían de pobre niña a interrogantes de si fui maldecida o bendecida. Gracias a la abuela conozco a todos los espiritistas, adivinos, chamanes de la ciudad y alrededores.

Justamente este día la abuela estableció una visita de Franchesca, una adivina cuyos poderes psíquicos se derivan de la observación y acoso a los clientes con un toque de crack. Era un evento anual, donde la adivina me lanza un hechizo protector para evitar que me dañen en la escuela. De acuerdo a los pensamientos de Franchesca, el supuesto hechizo es un verso extraído de un poema del siglo XX. 

Fuera de su falsedad, no es tan malo estar con ella. Sus palabras son tan extravagantes y divertidas como las imágenes que crea en su cabeza. Y calma un poco la preocupación constante de la abuela de que me acosen en la escuela.

Claro que ella no tiene ni idea de la realidad.

***

—¡Ninette Petrov! Mi clienta mas fiel ¿Estas lista para el ritual de purificación?— Franchesca me tomo entre sus brazos en un fuerte abrazo, clavando las cuentas y las puntiagudos colmillos de sus decenas de collares en mi garganta.

—Buenas tardes, Fran—

Franchesca cerro sus dedos largos y huesos alrededor de mis brazos, evitando que escapara de su escaneo. Chasqueo la lengua y negó la cabeza con preocupación.

—Un aura oscura te rodea, Ninette. Hay que deshacerse de ella. Le diré a tu abuela que te prepare un te de hierbas especiales mientras preparo los inciensos.

Me estremecí. Los te de hierba de Franchesca podrían llevarme a prisión por consumo de drogas ilegales.

Mientras la abuela preparaba el te totalmente convencida de su eficacia, la adivina me ahogaba con humo de incienso mientras repetía en su mente la escena de sexo censurada de su novela favorita.  

Un rato después procedió a leerme las cartas. Me hizo concentrarme en lo que deseaba saber y luego hacer una pregunta especifica. Casi, casi rodé los ojos. Sin embargo, le seguí el rollo. Sobre todo por los ojos expectantes de la abuela. 

Pero por mas que intentaba concentrarme y hacer una pregunta sobre algo especifico, nada se me venia a la cabeza. Al final, pregunte lo mas común.

—¿Me ira bien este año?

Franchesca chasqueo la lengua, un habito, y me extendió el maso. Acostumbrada, empecé a mesclar las cartas esperando hasta que la adivina considerara que mi espíritu ya se conecto con las cartas. Unos minutos después, Fran me quito el mazo de las manos. Tomo las primeras tres tres cartas y las coloco en orden frente a mi. Luego explicó. 

—La izquierda significa tu pasado, el centro tu presente y la derecha tu futuro.

La adivina dio vuelta la primer carta. Apareció un hombre  de cabeza vestido con túnicas rojas sosteniendo un enorme libro en las manos.

Franchesca hablo con voz turbia

—El papa invertido significa restricción, tentaciones retenidas, desafíos. Estas confundida sin saber si lo que hiciste en el pasado fue correcto. Los demás no te comprenden. Hay una profunda limitación en tu vida.

¿Como, no se, literalmente conocer los sucios secretos de todo el mundo? Pues si que tengo una limitación.

La segunda carta se mostro. Ahora se trataba de un hombre de negro, cuernos rojos saliendo de su cabeza, una sonrisa malvada era lo mas visible en su rostro pálido y poco iluminado.

—¡Oh! El diablo. Se aproxima un acontecimiento que cambiara tu vida como la conoces. Esta totalmente fuera de tu control, no podrás evitarlo, así que no lo intentes. No dice si es para mal o para bien, miremos otra carta.

Pude escuchar el llanto y la preocupación de la abuela, creyente fiel de estas supersticiones. La ignore, decidiendo concentrarme en la nueva carta que Franchesca saco del mazo y coloco arriba de la carta del diablo. Esta vez, la Parca me dijo hola.

La abuela lloro.

—Pobre niña...Si esta carta estuviera sola, no necesariamente tendría un significado malo... Sin embargo...en este contexto... ejem...el cambio que te espera será una gran perdida para ti. Ve preparándote.

Por fin, dio vuelta a la ultima carta. En esta, un hombre cuelga de un pie atado a un árbol.

—Mm... el colgado. Habla de un futuro incierto para ti. Vas a necesitar marcar tus objetivos y metas para no acabar perdido. Siempre que tengas presente lo que quieres, te ira bien... veamos que mas nos pueden decir.

Otra vez, Franchesca saco otra carta del mazo, colocándola debajo de la tercer carta.

—¡NO!!— Franchesca exclamo, provocando que me sobresaltara.

La abuela no pudo contenerse mas y dio voz a sus caóticas preocupaciones.

—¡Que es?¡Que le sucederá a mi niña?¿Que es tan malo?¿Puede prevenirse?

Franchesca carraspeo. Lo que llamo mi atención fue que a medida que iba sacando las cartas cada vez se ponía mas y mas seria, muy metida en su papel. Casi como si se lo creyera. Fugases pensamientos aparecían de ve en cuando sorprendida de haber sacado tantas cartas negativas en una lectura, siendo su primera vez.

—La emperatriz invertida— anuncio con voz de ultratumba —sugiere una pérdida de poder personal por haber puesto demasiado énfasis en las necesidades emocionales o materiales de otra persona, descuidando las suyas propias. Niña, tienes que tener cuidado de en quien confías. Si te pones a ti en primer lugar, hay posibilidad de evitar este futuro.

Luego de la macabra lectura de cartas, siguió la ceremonia del te-al cual escupí-me lanzo un hechizo salpicando sobre mi polvo de alguna hierba que ni siquiera ella sabe de que es, y danzando el baile para atraer a la lluvia a mi alrededor. Entonces, por fin, se marcho. Por supuesto, no se fue hasta que me lanzo una mirada profunda de pena y temor, compaginado con sus pensamientos.

"¿Sobrevivirás este año, Ninette?"

Pensaba. 

Y ese fue el final de mi ultimo día de vacaciones. El futuro parece ser muy prometedor.

Mente_En pausaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora