Capitulo 7

11 2 0
                                    

Llegue a la escuela con tiempo. Una de las "ventajas" de usar el autobús escolar. Por suerte, no me cruce con ningún conocido no deseado, es decir toda la lista de humanos y no humanos que conozco son no deseados.

Hoy los estudiantes parecen estar mas calmados. Por lo menos, la barrera musical en mis oídos es suficiente para callar los murmullos de sus mentes. Ayer era un infierno con sus gritos. Me presente en secretaria para saber mas sobre mi castigo, después de escuchar un regaño del vicedirector, me dejaron ir a clase con una citación a la biblioteca apenas terminara mi horario escolar. Y el consejo de ir a hacerme un chequeo medico, no es la primera vez que lo dicen. Mis continuas jaquecas y enfermedad en mi historial es suficiente para llamar la atención del vicedirector.

Asentí, prometí hacerlo y cuidarme mas. Murmure unas disculpas y me marche. Como si ir al doctor pudiera ayudarme. Ya me hicieron chequeos y toda clase de estudios, incluso tomografías. Pero todo esta bien, no hay tumores ni ninguna parte de mi cerebro sobredesarollada. La ciencia no esta lo suficientemente avanzada aun para detectar la magia en este mundo o lo que sea que me sucede.

Seguro hay mas como yo, aunque no conozco a nadie. Pero de acuerdo a los recuerdos y pensamientos de mis compañeros sobrenaturales, existen todo tipo de criaturas fantásticas en este mundo. Eh escuchado de brujas, elementales, duendes, elfos, dragones, Wendigos... e incluso arpías y valquirias.

Las leyendas y mitos no salieron de las mentes ebrias o perturbadas de algunos pobres desquiciados. 

Mis clases sucedieron sin problemas. Comparto una de ellas con Cristian, el mejor amigo de Levi. Este cuando paso por mi lado me sonrió y saludo como si nos conociéramos de toda la vida. Bueno, técnicamente es así porque pertenecemos al mismo grado y vamos  al mismas escuelas desde que teníamos edad para asistir, pero somos extraños.

Eso fue extraño. Aunque puedo imaginarme que la conversación de Levi tubo algo que ver.

—¿Puedo sentarme aquí?.

Estaba tan concentrada en Cristian y distraída por su saludo y lo que se de su amigo, que no capte la cercanía de Valentino.

No espero respuesta, dejo caer la mochila en el asiento vacío a mi lado y se sentó. Los asientos no están designados, así que no es un problema, el profesor no le dirá nada.  

El profesor llego y la clase dio comienzo. 

Atrás mío, Cristian no nos quitaba los ojos de encima, mientras mensajeaba a su amigo todo el tiempo poniéndolo al día con la situación. A mi lado, el vampiro se mantenía imperturbable por fuera pero su mente variaba desde el rostro de Joel a una conversación extraña que tubo con el, en la que de alguna manera fui nombrada. Joel escucho mi advertencia, pero en vez de esperar y ver y ser cuidadoso fue directamente a la fuente de todos los problemas  y de una manera no muy sutil lo interrogo sobre lo que dije. 

Idiota.

Valentino tomo su cuaderno y garabateo algo, luego me lo paso. Claro, no necesitaba leerlo, pero fingí que si. Con cuidado, para que el profesor no me descubierta, escribir rápidamente una respuesta.

"¿Tienes algo en mi contra?"

"No"

"¿De Joel?"

"No"

"¿Por que le dijiste que no se juntara conmigo?"

Idiota. Idiota. Idiota. 

Me tome mi tiempo para responder, buscando una escusa. Sin embargo, note que sus pensamientos e intenciones hacia mi hermano son mas complicados que los de una casería. Parece que Joel realmente le interesa... tanto como su  dulce sangre. 

Puaj.

"Yo no dije eso"

Escribí. En realidad, solo dije que era peligroso, nunca le dije que no debía juntarse con el...

"Le dijiste a tu hermano que podía hacerle daño"

¿Por que tienes una lengua tan larga, Joel?

"¿Es mentira?"

No se como explicar mi comportamiento sin exponerme, aun no se me ah ocurrido ninguna excusa creíble. Asi que mi mejor respuesta es otra pregunta.

Se mantuvo en silencio el resto de la clase. Cuando sonó el timbre y todos empezaron a guardar sus cosas, Valentino me detuvo. A mis espaldas Cristian se detuvo y alzo las orejas, atento a nuestra conversación, el vampiro parecía ignorante de su presencia. O no le preocupaba o estaba tan preocupado por Joel que no le importaba nada mas.

—¿Es por el comportamiento de Gianna? Se que ella fue grosera, pero ese día no se encontraba bien y ya se disculpo contigo. Además, yo no soy ella— Dijo.

¡Oh, cierto!¡Gracias por la escusa!

—Es mejor prevenir que pedir perdón—Conteste con toda la seriedad que pude, escondiendo mi alivio.

—Creí que la relación con tu hermano no era buena, no sabia que te preocupaba tanto— dijo, con sarcasmo en la voz.

—Entonces no se porque te interesa tanto—espete a mi vez.

—Por que Joel, extrañamente, cree en lo que sea que le hayas dicho y ahora es distante conmigo.

Me detuve, lo mire fijamente analizando cada uno de sus pensamientos y recuerdos que cruzaron por su cabeza en esos pocos intentes. Suspire. Quizás no debí entrometerme...

—¿Y que quieres que haga?.

—Dime que fue lo que le dijiste así podre arreglarlo— dijo, muy seguro.

Valentino tiene como cincuenta años, el y Gianna entraron a la escuela hace cuatro años porque querían integrarse a la sociedad diurna porque estaban aburridos.  Y, mientras mas jóvenes empiecen, mas años podrán quedarse. ¿Qué tan extraño es que un vampiro de medio siglo quiera salir con mi hermano de 18 años? Es un bebe a comparación, podría ser su hijo... o su nieto. Sin embargo, su interés por el es real.

—Le dije que tuviera cuidado porque podrías lastimarlo— Torcí y omití algunas palabras —Si eres completamente sincero con el, todo ira bien, creo.

Valentino entrecerró los ojos y me miro con sospecha. Lo sabia, me estoy arriesgando mucho al decir algo así y con ese tono. 

¿Debería o no debería?¿Debería?

Joel es mi hermano, pero apenas nos conocemos. 

—¿A que te refieres?— pregunto, insistente.

¿Y ahora que digo?

Supongo que, podría decir eso, pero eso me expondría...en parte. Y Valentino no es el único escuchando nuestra conversación. 

Hay diablos.... ¿en que lio me metí?

—Tiene dieciocho ya ¿No? Creo que aun no fue a un bar a festejar, oí de algunos en el centro...no lo lleves allí.

Tome rápidamente mis cosas y me fui, dejando atrás a un vampiro preocupado por su identidad y su novio; y un atónito licántropo con igual grado de sospechas sobre mi.

Mierda ¿Qué acabo de hacer?




Mente_En pausaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora