********Sólo basta con decirme que mi bebé está en enfermería para que se me suban todos los poderes a la cabeza. No voy a preguntar que ha pasado porque este año no es la primera vez que pasa.
Intento mantenerme serena pero voy a necesitar toda la fuerza de voluntad del mundo para no cometer un crimen.—¿Ha pasado algo con la niña?
Pregunta Ernesto sumamente preocupado. Tengo ganas hasta de abrazarlo.
—Parece que ha tenido un altercado en el colegio y y-yo tengo que irme— es todo lo que soy capaz de decir. Intento irme en dirección a la puerta pero Ernesto me retiene.
—¿Andas en tu coche? — debe de ver el reconocimiento qué pasa por mi cara. ¡Joder! Que he venido en taxi. —yo te llevo.
No tengo tiempo de dar una negativa porque este lo ha dado por hecho mientras va por sus lleves. Para que negar que el hecho de que Ernesto vaya a conocer a mi hija, me llena de incertidumbre pero en estos momentos o único que quiero es llegar y confirmar que mi pequeña Ángela está bien, sin más rodeos voy tras el.
*******
Cuando Ernesto aparca en el estacionamiento del colegio, prácticamente salgo volando del asiento del copiloto. Conozco esta mierda como la palma de mi mano, así que voy directamente hasta el area de enfermería mientras Ernesto va detrás de mí.
Entro sin tocar, en estos momentos lo último que quiero es utilizar mis modales.
Ángela está sentada sobre la camilla, con un moretón en su rodilla izquierda, una bendita en la frente y lo más alarmante para mí, el labio inferior partido y no puedo expresar con palabras lo que siento en estos momentos.Puedo ver sus ojitos cristalizados, como quien acaba de llorar hace poco y tengo ganas de ponerme a llorar con ella.
Apenas me ve, abre sus bracitos en mi dirección y ni tiene que pedírmelo dos veces.Voy en su dirección apartando a la enfermera quien estaba limpiando la sangre algo seca de su herida.
—¿Estás bien cariño? ¿Que ha pasado?
Esta comienza a estrujar sus ojos que bajo otras circunstancias me parecería por demás adorable pero no esta vez. Veo como sus ojitos se cristalizan antes de decirme de manera muy simple lo sucedido:
—Hemos estado pintando y-yo... —pongo mis manos sobre su cabello como cuando era mi bebé —Mathew ha tomado mi-mis colores y le he dicho... q-que no y me ha pegado acá — dice señalando su labio.
Miro a la enfermera quien parece pedir una disculpa silenciosa. Me siento por demás indignada. ¿Cómo es posible este tipo de comportamientos? Soy consiente del momento justo en que mi sangre llega al punto justo de ebullición, justo ahora soy capaz de cualquier cosa.
Estoy tentada a preguntarle más a detalle qué ha pasado pero no quiero que siga llorando; es de las personas que no puede contar las cosas sin que las lagrimas la dominen.
—Todo está bien cariño, mamá ya está aquí ¿Bien? — esta asciende mientras yo me dedico a acurrucarla en mis brazos mientras pasó las manos por sus coletas.
De momento recuerdo que no he llegado sola, Ernesto permanece en la puerta mientras mira fijamente a mi pequeña. Esta parece percatarse de su presencia porque ladea su cabeza antes de dar inicio a su interrogatorio:
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El padre de mi Hija
RomanceTener una hija esta BIEN, que su padre lo sepa ya es AVARICIA . ¿A quién se le ocurre tener una hija para ocultarle su existencia a su padre por 4 años? 🤡 ¿Y para terminar de rematar, va y se mete a trabajar a la empresa de su ex? Si crees qu...