Enredado(s) 2

Todo se fue al carajo

ULTIMO CAPITULO🔥

Cincuenta y uno (TREINTA)

Marizza

—¿Por qué tenes esa carita Marizza?— me preguntó Lujan —Es viernes, salimos de esta cárcel, tenes que estar contenta—

—Anoche discutí con Pablo, otra vez— suspiré mientras acomodaba mi cabello, estábamos en el baño del colegio, ya casi todos se habían ido a sus casas, yo no tenía ganas de volver así que había decidido quedarme toda la tarde con Luján —Estoy tan agotada, Luji—

—¿Otra vez pelearon?— puso los ojos en blanco —¿Y ahora por qué?—

—Estuvimos toda la semana peleando por su autito nuevo, el tarado del padre le regaló un auto a cambio de que lo acompañe a no se donde—

—No entiendo—

—Volvió del sur y le regaló el auto a cambio de que lo acompañe todo este mes a hacer su cierre de campaña por todo el país, el mes que viene son las elecciones y Sergio esta más pesado que nunca—

—Decime que tu novio no es tan idiota como para aceptar— rogó

—Por eso peleamos Luján, Pablo aceptó el auto y ya lo esta usando aunque no sabe manejar, es más, no sabes lo que me dijo, quiere ser político y él odia la política ¿entendes?— expliqué —Ya peleamos la primera vez y ya nos arreglamos, pero desde que Sergio esta en el medio Pablo esta hecho un idiota, no se que más hacer para ayudarlo a ver la realidad—

—¿Un idiota en que sentido?—

—Él y yo estamos bien, pero cuando aparece el padre su esencia cambia, Pablo se convierte en otro —suspiré decepcionada —Yo te juro que lo quiero un montón...—

—¿Pero..?—

—Pero siento que todo lo que lo quiero a veces no alcanza, no puedo tolerar que sea tan manipulable— dije con frustración —vos me conoces, alguien como yo no estaría con alguien tan débil, Pablo no es capaz de jugarse por nada, y encima con sobornos ya cambia de opinión, no se si un tipo así es el hombre ideal para mí —

—No sé que queres que te diga Marizza, vos lo elegiste, nadie te obligó a estar con él— se encogió de hombros —A mí sinceramente ese chico jamás me agrado—

—Pero es que cuando lo conocí era Pablo, mi vecino, un chico insoportable pero súper tierno en el fondo ¿y ahora quien es? Pablo el hijo del intendente, el futuro político, el que por dos pesos ya cambia de idea...—

—Marizza, él cambio desde que conoció al padre ¿recién te das cuenta?—

—Cada vez que Sergio aparece Pablo cambia, deja de ser mi Pablo — expliqué —lo quiero, pero no se si tanto como para aguantar esto, no se hasta donde voy a aguantar su debilidad—

—Marizza... ¿Vos queres dejar a Pablo?— ambas nos quedamos en silencio unos segundos, no podía evitar replantearme que es lo que quiero, y se que dejarlo no estaba entre mis planes.

—No se que hacer, solo se que a Pablo no lo dejo ni por más que me obliguen— aseguré —pero es súper frustrante que Sergio lo use como a un títere, no se cuanto más voy a tolerar esto—

—Bueno Marizza cálmate, si lo queres vas a encontrar la manera de ayudarlo a alejarse del tarado de su padre, llevan poco tiempo, tenes que tener paciencia—

—Lo sé, pero me estresa— caminé unos pasos y me tambalee, rápidamente me sostuve del mueble frente al espejo.

—¿Estas bien?— me preguntó sosteniéndome