"Aquello que tuvo un comienzo pero que no contará con un final. Lo sempiterno, por lo tanto, es perpetuo ya que se extenderá por siempre".
[Edmun x Female]✓
@Chica0indiscreta
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°° Caminaron alrededor de tres kilómetros colina abajo emocionados y soltando varias carcajadas cada que uno de los cinco cayera o tropezara por el exceso de nieve sobre el que caminaban. Al fin llegaron a una cueva que por fuera parecía acogedora pero lo primero que notaron fue la puerta principal abierta de par en par.
-¿Lu?- le llamo Amelia viendo como la niña comenzaba a correr con un rostro lleno se preocupación hacia la cueva donde todos le siguieron encontrándose en el interior, el hogar estaba oscuro, frío y destruido, despedía el olor a humedad propio de un lugar en el que no ha vivido nadie durante varios días. Por la entrada abierta había penetrado nieve que se había amontonado en el suelo, mezclada con algo negro, que resultaron ser las cenizas del fuego de la chimenea.
Al parecer, alguien lo había esparcido por la habitación y luego lo había apagado a pisotones. La vajilla estaba hecha trizas por el suelo. Todos miraban preocupados la espantosa escena.
Edmun accidentalmente piso el retrato de aquel viejo fauno que resultaba ser el padre del señor Tumnus, cuidadosamente lo tomo para volver a ponerlo en su lugar.
-Oigan, hay una nota- hablo Amelia mirando que en la mesa de té había una nota clavada ahí con una navaja algo rara; la chica con fuerza saco la navaja y comenzó a leer.
El anterior ocupante de este lugar, el fauno Tumnus, está bajo arresto y aguardando juicio por la acusación de alta traición contra su majestad imperial Jadis, reina de Narnia, emperatriz de Cair Paravel y las islas solitarias, etc; también se lo acusa de haber dado alimento a los enemigos de dicha majestad, haber alojado espías y confraternizado con humanos.
Firmado: MAUGRIM, capitán de la policía secreta ¡LARGA VIDA A LA REINA!
-¿No creen que ya nos deberíamos ir?- dijo temerosa Susan después de saber lo que había pasado con aquel dichoso fauno. Pero para Amelia fue el comentario más estúpido que pudo haber escuchado, ¿irse? ¿Justo ahora que tenían una misión y darle la espalda a la aventura? Por supuesto que no. No estaba dispuesta a perder la única oportunidad de vivir en una de esas historias mágicas que tanto se entusiasmaba por experimentar.
-¿Pero y el señor Tumnus?- cuestionó triste Lucy.
-Si lo arrestaron por ser amigo de un humano, no creo que podamos ayudarlo- hablo Edmun.
-¿No lo entienden? Hablan de mi, el me salvó y la reina lo descubrio-
¿Y si le decimos a la policía?- opinó Peter. Amelia, Edmun y Lucy lo miraron fastidiados, no había entendido nada. El castaño rodo los ojos por la ignorancia y estupidez de su hermano mayor.
