🌙Capítulo 27| Erin.

492 58 22
                                    

Becca lo mira con fijeza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Becca lo mira con fijeza. Examina su rostro moreno, los labios gruesos, el cabello afro que lleva un poco largo y su mirada achocolatada que no se detiene ante cada movimiento de Lía. Becca sabe que algo no está bien, por lo que, cuando acaba de examinarlo, regresa su mirada hasta mí, se aleja de la viga y camina con rapidez hasta la cocina, tomando asiento frente a mí.

—¿Y él es...?

—Jasper —contesto.

—¿Y es tu...?

—Amigo.

Regresa la mirada hasta él. Jasper sostiene la guitarra nueva de Lía, le muestra algunos de los acordes y luego, cuando se la tiende, ella niega y le susurra algo al oído, los dos ríen. Y por reflejo yo no me impido sonreír. Becca lo nota al mirarme.

—Es el chico del que hablabas —deduce— te gusta.

—Lo hace —decido dejar las omisiones atrás. Por lo que enderezo mi espalda y me cruzo de brazos, determinante— me gusta demasiado y pienso acompañarlo a Queens.

El rostro sin maquillar de Becca cambia de expresión, su sonrisa es una mueca hasta que su ceño se frunce y niega para dejar atrás todo eso. Conozco New York por la temporada en que papá cambió de estado para poder ganar más dinero y poder pagar la hipoteca de una casa, fue hace más de diez años, recuerdo muy poco, tan solo las veces en que salimos de turistas. Recuerdo poco porque nunca regresamos. No lo hicimos desde el incidente del hospital y todo lo que me llevó a terapia.

Pero ahora mismo, aunque Jasper me haya repetido que no es necesario, encuentro un deseo descomunal que, al igual que un imán, me insta en acompañarlo. Porque yo, al igual que él, necesito regresar a ese lugar y enfrentarme de una buena vez por todas a la Erin de siete años que me ha obligado a vivir con pesadillas. Y ya me he cansado, necesito dejarle claro a esa Erin que ahora mismo soy más fuerte de lo que antes pude ser.

—¿Escaparás? ¿Lo harás para reabrir heridas y volver destrozada?

—No lo entenderías —contesto con suavidad, no pretendo ir a la defensiva— pero es como querer entender unas cosas pero no hacerlo con exactitud hasta tenerlo en enfrente —miro por sobre el hombro de mi hermana, Jasper rasguea la guitarra mirándome. Canta para mí— sucedió con mis complejos de inferioridad, con entender quién soy y todo lo que me rodea, aun así no puedo seguir creciendo si la niña con traumas que vive dentro de mí no me lo permite.

—Fuiste a terapia por más de dos años, Erin. ¿acaso...?

Es asombroso como parece que todos llevamos una venda sobre los ojos, que se cae cuando entendemos lo que nos rodea y lo que somos en realidad. Antes, cuando creí nunca poder salir de la sombra de Becca; me parecía que todos vivían a la perfección, que no había nada malo en los demás y que solo yo, únicamente yo, era perjudicada. Pero me doy cuenta que nunca es así, que tan solo vivimos distintos tipos de problemas, que cruzamos obstáculos en otras canchas.

¿Quiénes somos de noche? ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora