Capitulo 29

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No puedo esperar más para verla vestida de novia, por fin podré darle el anillo a la mujer indicada, sin que está me lo devuelva, muchas veces lo intente con Morena pero ella insistió en que lo guardara para la correcta, y no cabe duda que la única que podría llevar ese anillo es Lali. Ya pasaron unos días del incidente que pasó con mi Julia, pero ya se encuentra mejor, no puede viajar con nosotros pero está más emocionada que yo, a veces hasta le tengo que reprimir para que no le de más pistas a Lali, mañana partimos a España y ella no sabe lo que le espera en nuestra estadía allá, cada vez que tocan el tema, yo afirmo que nos casaremos dentro de mucho, para que no sospeche nada de lo que estoy planeando hacer.

Llame a mi amigo Mario para que se haga cargo de la empresa mientras me voy de viaje a España.

-¿Mario?

-Decime, Lanzani -su voz suena un poco ronca.

-Necesito que te quedes a cargo mientras voy a hacer algunas cosas en España -un grito de sorpresa me sorprende.

-¡No lo puedo creer! La española te...

-Cállate -ruedo los ojos, siempre quiso buscarme pareja pero nunca lograba nada. Así como me presentaba mujeres, así mismo terminaban con él antes que conmigo. Admito que nunca me di la oportunidad de conocerlas, pero con Lali todo fue diferente, ella me tuve en sus manos y volteo mi mundo, me hizo sentir tantas cosas buenas en poco tiempo. No quiero imaginarme el bullying que me va a hacer Mario cuando se entere mis planes de boda, se pondrá insoportable, pero no importa, es de los pocos amigos que aún está conmigo.

-Es increíble, la llevas al trabajo, la presentas como tú novia, faltas a trabajar, y ahora te vuelves con ella. De haberlo sabido, te hubiese buscado una española desde hace mucho. -ahora si está acabando con mi paciencia, hago un bufido y parece notarlo.

-¿Ya terminaste? ¿Cuánto con vos? -digo para terminar nuestra charla.

-Está bien amigo, sabes que si...suerte y si podés, conseguime una también -¿eh? ¿una qué? ya me perdí.

-¿Qué decís?

-Una española con quién pasar cada uno de mis despechos -dice con un tono de risa, nunca va a cambiar, siempre va a hacer un mujeriego.

-Después la buscas vos solito -cuando vayas a mi boda, idiota.

-¿Qué?

-Nada, hace tu trabajo y cualquier cosa te comunicas con Nico por la salud de Julia, hasta luego imbécil. -cuelgo sin dejar que conteste.

-Mi vida -la voz de Julia me sorprende y volteo a verla, ya se ve mejor que los días anteriores. Me acerco hacia ella y le doy un suave beso en la frente mientras la abrazo.

-Decime, preciosa -me da un pequeño golpe en el brazo y se separa de mi para poder mirarme a los ojos.

-Que tonterías estás diciendo, ya estás delirando, a la que le tenés que decirle eso es a otra. -rie y me regala una mirada cómplice -Peter, mañana se van a España, y no se cuándo vas a volver, después de la decisión que tomaste -sus ojos empiezan a cristalizarse, pero una sonrisa viene con eso -estoy tan orgullosa de vos -pone sus manos en mis brazos -. Quiero que sepas que, lo es, Lali es la correcta, espero que la sorpresa salgo como la planteaste...¡ay! va a parecer una película eso que me contaste -reimos los dos, un pequeño nudo se aloja en mi garganta.

-Me encantaría que estés...sabes que yo...

-Está bien, solo es la pedida de mano -me corta, y mueve sus manos para tranquilizarme -. El día de tu boda voy a estar sin falta, esete muchos años para ver ese momento -con mi mano le limpió las lágrimas de alegría.

-Basta...no llores, que no me caso -en ese instante siento como un vaso cae y se rompe, vuelvo la mirada al origen del ruido y me encuentro a mi hermosa Lali, quién parece no saber que hacer, me mira y luego baja la mirada, hay algo en su mirada que no me gusta, está cabizbaja, me preocupa lo que le pasa.

-Dis...disculpen yo solo...venía a ver si querias agua...y se...se me resbaló el piso...

-Aja...el piso se te cayó, esa es nueva -no puedo evitar reír con la inocencia que nos trata de mentir, pero falla en su ataque de nervios. Se puso colorada colorada, ya me imagino lo que pudo escuchar, creerá que no me quiero casar, mi hermosa, si tan solo supiera lo que quiero para vos.

-Tranquila La, ya mando a alguien a limpiarlo no te preocupes -y sale de la sala, dejándonos solos.

-Quise decir que se me resbaló el vaso, pero no me dejaste corregir mi error, ¿cómo se me va a ver el piso? -trats de actuar, es espectacular, me siento en el sillón que me da la vista perfecta frente a ella, y apoyo mi tobillo en una rodilla, me rescuesto relajándome. Aunque su mirada parece que la intimido, es muy expresiva.

-¿Por qué no decís nada...y...y porqué me miras así?

-Nada...es solo que...el piso se me resbaló -rio al decirlo, está vez ella pone sus ojos en blanco, y ya entiendo porque Mario se le hace divertido fastidiar -Te amo Lali -sus ojos se abren de par en par, luego una gran sonrisa se dibuja en su rostro, al igual que un color rosa empieza a pintarse en sus mejillas. No me resisto cuando la veo morderse el labio, reprimiendome ver su sonrisa en su totalidad, me levanto y la beso, perdiendome así en el tiempo y en el espacio, solo imaginándo, que está será mi nueva vida, nuestra nueva vida.

The GermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora