The German

Capitulo 38

-¡Mira este! Es hermoso... -dice Olivia mientras me muestra otro vestido, ya me probé como cinco pero la verdad no me gusta como me quedan, y el que eligió parece uno que ya me probé.

-Gracias Oli, pero no me gusta, vamos a seguir buscando... -digo.

-A ver, ¿podrías ser más específica con lo que queres? -pregunta amablemente la chica de la tienda.

-Quiero un vestido sencillo...

-¿Cómo que sencillo? Es tu boda, tiene que ser espectacular, fantástico -me interrumpe Olivia, como toda linda amiga, llevándome la contraria cuando la que se va a casar soy yo, pero supongo que se quiere vengar de mi, cuando la llevaba docenas de vestidos para que se probará, y ya a los tres cambios estaba cansada.

-Quiero que sea sencillo, me gusta el encaje, y puede tener un cintunor brillante en la cintura...algo así, ¡no sé! No estaba preparada para esto aún.

-Bueno, creo que puedo buscarte algo así, ¿te gusta corte sirena o estilo princesa?

-Traeme ambos, me los pruebo y vemos... -los vestidos son una belleza. Agarro uno y entro al probador con la señora para que me ayude, el primero es de un corte de sirena muy hermoso, tiene encaje y una cinta con cristales brillantes, salgo para que Olí me vea, y me sonríe.

-Te ves hermosa, ¿pero que pensas vos?

-Es muy lindo. -me miro en un espejo que hay al lado de Oli -pero no creo que sea el indicado...no se...

-Eso pensé,anda probate otro... -si decir más voy a por el segundo, este es un corte de princesa, me miro al espejo y me emociono, este no tiene encaje, me quedo sin palabras. No sé cómo llegue acá, creo que m entro la euforia ¡Me voy a casar! No me doy cuenta de que la señorita me alcanza un papel.

-Gracias, yo...no es que yo sea llorona -reimos.

-Esta bien linda, no te preocupes -sonrie amablemente.

-¿Por qué tardas tanto? -grita Oli -¿Tu culo es tan grande que no entra en el vestido? -abro la puerta y se queda con la boca abierta.

-¿Y? -digo dando vuelta, toda emocionada, con una super sonrisa en mi cara.

-Falta algo... -dice la señora, acercándose para ponerme un velo.

-¿Cómo te sentís con ese vestido? -pregunta Olivia.

-Es... -suspiro emocionada- me encanta, creo que a Peter le va a gustar ¿no?

-Ese alemán, va a morir cuando te vaa entrar por la puerta de la iglesia con ese vestido... -lo dice muy convencida.

-¡Entonces este es! Muchas gracias, señora...?

-Decime Blanca, es un placer ayudarte -caigo en cuenta de que está tienda es bastante lujosa, ¿cuál es el precio del vestido?, lo tomo un momento y miro la etiqueta, podría manteneme con este cifra por dos meses, es demasiado, salgo decepcionada. No puedo permitirme gastar tanto en un vestido.

-¿Que pasa?

-¿Le viste el precio? Es inaccesible para mí. No puedo -Olivia ríe a todo pulmón. Que desgraciada.

-No es gracioso Olivia. -ya me había ilusionada con que Peter me vea con ese vestido.

-Querida te vas a casar con un exitoo empresario el cual tiene sucursales en Alemania, España y en no se dónde. ¡Claro que podés permitirtelo!

-Pero es su plata, no la mía...

-Pero, no es precisamente lo que el dijo cuando me llamo para decirme que transfirió una gran cantidad para que gastaras lo que quisieras.