One~Shot's [Rosé x BTS]

One~Shot 02.

Se encontraba de mal humor se supone que aún no era tiempo, miraba la pantalla de su celular y también su calendario, sus ojos se paseaban de una lado a otro entre sus dos agendas.

— Esto es imposible.

No podía creerlo pues que ella recuerde había marcado muy bien esa fecha y sus cálculos nunca fallaban, bueno solo en este ocacion.

Soltó un sonoro suspiro.

— Pues ya que.— dijo algo desanimada.

Lo que ocurría con aquella pequeña rubia era que su periodo se había adelantado y eso era muy frustrante para ella, pues ya tenía planeado aquel día. Así que sin mas que hacer canceló toda su agenda.

No es que fuera alguien muy ocupada pero ese día era su preciado día de descanso, tenía planeado ir de compras, preparar una deliciosa cena para ella y su lindo novio.

Y todo se arruino por su desastroso período, quería llorar pues sus planes no habían resultado como ella deseaba.

Lo único bueno de eso es que hace uno días había comprado una deliciosa rebanada de pastel de fresa, con delicioso chocolate blanco y adornado con unas pocas fresas y ricas almendras.

Cuando estaba por llegar su período ella siempre pasaba por su tienda de pasteles favorita y pedía su rebanada de pastel preferida, cuando llegaba el tan odioso día disfrutaba su rica rebanada con un poco de te y ahora deseaba con toda su alma esa rica rebanada.

Salió de la habitación, la cual compartía con su novio y se encaminó directamente a la cocina,  tan solo imaginarse comiendo aquella delicia se le hacia agua la boca, no creía que aguantaría por mas tiempo.

Llego frente al refrigerador y abrió la puerta lo primero que saco fue una botella de leche pues ahora no deseaba te para acompañar su pastel, si no que se le antojo un vaso de leche fría.

Llevo el embase sobre la barra de la cocina y se dirigió a la puerta de los vasos, tomo uno y se encaminó nuevamente a la barra sirvió un poco de leche en el vaso y bebió la mitad saboreando aquel líquido, volvió a llenar el vaso y regreso frente al refrigerador, colocó en su lugar el embase de leche y rebuscó por todo el lugar su preciada rebanada de pastel.

No había pastel por ningún lado.

Entro en desesperación, no podía haber desaparecido, o quizá olvido comprarlo.

— No yo recuerdo que lo compré ayer.— dijo muy ansiosa.

Siguió buscando por todo el refrigerador, saco varios toppers que contenían comida, pero su rebanada no se hallaba por ningún lado.

Triste cerro la puerta y se fue directo a la barra, tomo asiento en una silla alta y recargo los codos sobre la barra y recostó su cabeza en ambas manos mirando con tristeza su vaso de leche.

¿Que ocurrió con aquella rebanada de pastel?.

No lo sabía, pero ella estaba muy segura de haber traído a casa esa delicia.

— No la comí antes de tiempo.— dijo haciendo un puchero.

Rememoró su día de ayer.

— Recuerdo que salí del trabajo fui directo al local de pasteles, salí con mi pedazo de pastel y fui directo a casa, no me desvíe a ningún otro lado, llegue a casa y me dirigí a la cocina guarde la caja donde venía aquel pastel dentro del refrigerador lo mas alejado posible de la puerta y luego tome unas verduras e hize una ensalada y eso es todo.— dijo con el seño fruncido.

Así que el que ella se haya comido aquel pastel no estaba en sus recuerdos.

— Él aún no estaba en casa cuando llegué, de echo creó que llegó algo noche pues me había quedado dormida.