One~Shot's [Rosé x BTS]

One~Shot 07.

Y ahí estaba otra vez, admirando desde lejos a la bonita rubia quien se encontraba tras ese inmenso escritorio.

¿Que lugar era ese?.

Pues nada mas ni nada menos que la dirección del colegio al que asistía.

Desvío el rostro cuando aquella chica miro hacia su dirección.

Ella negó con la cabeza esa era la quinta vez que visitaba la dirección en esa semana.

— ¿Ahora en que problema te metiste?.— regaño la chica mirando al chico que estaba sentado en una de las tantas sillas que estaban a un costado de ella.

— En ninguno en especial, la profesora Nara no quiere que este en su clase.— respondió él chico alzando los hombros.

— Si claro la profesora Nara. ¿Porque debería creerle joven Min?.— pregunto la chica entrecerrando los ojos y cruzando los brazos a la altura de su pecho.

— Porque eres demasiado buena y esta vez estoy diciendo la verdad.— sonrió el chico ante su respuesta.

Ella solto una pequeña carcajada y él solo miró lo bonita que era riendo.

— Tal vez debería dejar que te den un buen castigo para no verte por un tiempo aqui.— dijo la rubia con burla.

— Me vas a extrañar.— respondio él guiñando un ojo a la chica.

— Rosé ven un momento por favor.— dijo aquel que era director de aquella escuela.

Él director dio una rápida mirada al chico pelimenta y negó con la cabeza.

Ella sin mas se dirigió a la oficina de su superior.

Min solo la miro entrar a la oficina, deseaba que al menos le hubiera dado una última mirada.

Soltó un suspiró no podia creer que alguien tan bonita como ella trabajará en un horrible lugar como era ese colegio.

Sabía que estaba mal el que se fijara en alguien como ella, ya que Rosé era mayor que él por solo tres años, además siendo hijo de padres millonarios sabía que su jueguito de romance no duraría demasiado, ya que sus padres se encargarían de elegir a la candidata ideal para él.

Pero no podía ignorar la bonita cara de aquella secretaria, había pasado tanto tiempo desde que la vio por primera vez que en ese entonces solo pensaba en como era su voz, como sería su rostro con una sonrisa o incluso como se vería molesta.

No sabía que hacer para tan siquiera poder recibir una mirada por parte de ella, aquellos compañeros que tenían mala conducta y por lo regular pasaban más tiempo en dirección que en sus respectivos salones siempre le hablaban de lo buena persona que era.

De la bonita sonrisa que se plasmaba en su bonito rostro cada que uno de ellos le decían algo gracioso, o la forma en que intentaba ser alguien autoritaria, eso solo lograba incrementar la curiosidad de Min.

Así que para poder observarla de cerca comenzó su etapa de rebeldía, en esa ocasión le contesto de mala manera al profesor SeokJink él sin pensarlo llamo a la secretaria del director para que le asignara algún castigo.

Ese fue el comienzo de todo, aquella chica le había regañado, pero en vez de tener miedo le dio bastante ternura como hacia inconsiente aquel bonito puchero.

También había notado sus bonitas mejillas, sus dedos picaban por apretar aquellos bonitos y redondos cachetes.

Sonrió ante en recuerdo de aquella bonita cara.

Volteo el rostro hacia la puerta de la oficina del director donde salió aquella bonita rubia.

Ella traía consigo una pila enorme de papeles que tenía que revisar, era muy estresante eso pero ella era la secretaria y tenía que encargarse de eso.